Peheta

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BanderaEspaña.png Este artículo contiene una alta dosis de humor español.
Si no eres de esta casta tierra, probablemente pierdas el tiempo leyendo esto.
Posiblemente extinguido.PNG ADVERTENCIA: El presente documento trata sobre una especie posiblemente extinguida. Si usted se encuentra un(a) Peheta en libertad, seguramente se está confundiendo. No se confíe.
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Aquella bonita moneda de la cual ahora casi nadie se acuerda.
Cita3.pngDame un duroCita4.png
Ancient Yonqui "Pago 3 y me sobran 2" Editorial Nosjodieron
Cita3.pngSon sei mi pezeta de wijkiCita4.png
Cañita brava en una pelicula de Almodóvar
Cita3.pngEsquelacosasestaponiendomumalCita4.png
Yaya Maria Antonia de las Mercedes en un congreso de comercio alimenticio, hablando de la entrada del euro
Cita3.pngMi primer coche me costó dos mil pesetas de las de antesCita4.png
Tu abuelo hablando de los tiempos de Matusalén

La peheta era la moneda oficial de España, Andorra, Sáhara, el País Vasco y las Islas Chafarinas, antes de la rebentada entrada del lero en el año de nuestro Señor de 2002. Instaurada mucho antes de que naciéramos y retirada antes de poder haberla disfrutado. Durante bastantes años fue una divisa tan fuerte como el dólar canadiense, pero con el tiempo, y sobre todo, tras la muerte de Paquito el Chocolatero, empezó a devaluarse hasta valer poco más de un yen.

Tambien conocida como: Peseta, pela, pezeta, pesheta (lease como Rajoy).

Tipos de pesetas

Pesetas de hace mucho mucho tiempo, en una galaxia muy muy lejana..

La Peseta fue creada en 1808 con motivo de la victoria española sobre Napoleón, pero no fue hasta 1868 cuando empezó a usarse. Con una sola peseta podía comprarse una isla del tamaño de Australia, por lo que no era muy útil. Por ese motivo, se crearon los céntimos y otras medidas extrañas como la perra gorda, la perra flaca, la perra desnutrida, y otros tipos de perras. Cada Comunidad española creaba sus propias pesetas, pero guardando que todas tuvieran el mismo valor. Los madrileños crearon las suyas de mithril, los gallegos de nácar sacado de las ostras, los andaluces de oro, y los catalanes, más agarrados ellos, hicieron sus pesetas de butifarra.

Este detalle no agradó al resto de Comunidades, por lo que empezaron a alterar la composición de sus pesetas, metiendo metales menos preciosos, como amianto o plomo, en las aleaciones. La peseta, de esta forma, empezó a devaluarse.

Pesetas de las de antes

Se denominan "Pesetas de las de antes" aquellas vigentes antes de que y yo nacieramos, pero que sí usaron nuestros padres y los padres de nuestros padres. Esas pesetas sí que eran pesetas, y no como las de ahora. Esas pesetas valían su peso en oro, y no las de ahora, que no pesan una mierda. Una peseta de las de antes era grande, y la moneda de cien pesetas no cabía en el bolsillo y había que llevarla rodando por la calle. Pero había pocas cosas que valieran cien pesetas, y si lo valían, eran bienes de lujo.

Con una peseta de las de antes pasabas todo un día en el cine, con veinte céntimos de peseta eras el niño más rico del patio del colegio. Los coches costaban doscientas mil pesetas de nada, y un piso apenas llegaba al millón. Eso sí que eran buenos tiempos.

Pesetas de las de ahora

Tras la muerte del queridísimo Franco, la peseta empezó a cambiar de valor. Lo que antes costaba dos duros, ahora costaba diez duros, luego veinte, y más tarde cien. El tamaño de las monedas se empequeñeció. Y su valor también. Algunos aseguran que este cambio de valor vino motivado por el cambio de cara en las monedas, ya que las de ahora llevan la cara de Magento I Rey de España y las de antes la de Franco.

El caso es que si bien la gente antes se pegaba por coger una moneda de una peseta tirada en la calle, con las pesetas de ahora la gente tira las monedas de una peseta porque ocupan lugar (y tampoco demasiado, ya que son más pequeñas que la pila de tu reloj).

Las pesetas de ahora tuvieron vigencia desde aproximadamente 1980 hasta el 2002, año en que se paso a las pesetas del futuro, mucho más bonitas y coloridas.

Pesetas del futuro

La peseta del futuro se llama Euro (€), un nombre impronunciable para la mayoría de los españoles. Vale 166 y pico pesetas de las de ahora, osea, de las de 1999 (como pasa el tiempo...). Dicen que puede usarse por todo el mundo esta peseta del futuro, yo aún no lo he probado, ¿y ?

Estas pesetas del futuro tienen la cualidad de hacer que la mayoría de los españoles sigan preguntándose cuánto cuestan las cosas en las pesetas de ahora (osea, de antes, porque las pesetas del futuro, osea, las de ahora, llevan ya casi ocho años funcionando... qué lío). La entrada de las pesetas futuristas hizo que los precios se dispararan, intentando engañar así a los compradores. Y al parecer, lo consiguieron.

Las Monedas

Pesetas de las de antes

Las pesetas de las de antes tenían un tamaño mayor a las últimas que fueron en los bolsillos de los españolitos de a pie, hecho que quizá se debiera a que una peseta antigua valía más que una pesetuja de las actuales.

Las pesetas de las de antes se caracterizaban por llevar la cabeza de Alfred Hitchcock en el anverso. Bueno, o de alguien con una cabeza parecida. Por detrás solían llevar un pajarraco grande (decían que era un águila, aunque a mí se me asemeja a un cuervo) con un escudo agarrado entre las patas. El escudo de España, para ser más concretos.

Había monedas de diferentes colores, tamaños y sabores, dependiendo de su valor:

  • Diez céntimos
  • Cincuenta céntimos
  • Una peseta
  • Dos pesetas y media: Esta moneda estaba hecha chocolate con un envoltorio de papel de aluminio.
  • Cinco pesetas
  • Veinticinco pesetas
  • Cincuenta pesetas
  • Cien pesetas: Tenía el tamaño de la tapa de una alcantarilla, estaba hecha de plata de primera ley robada a los argentinos durante el colonialismo.

Pesetas de las últimas (hasta 2002)

El tamaño de estas pesetas se redujo considerablemente debido a la devaluación de la divisa en el resto del mundo, y a que se acabaron los pocos metales preciosos que quedaban de cuando Felipe II. En la parte delantera llevaban la cara del rey, Juan Carlos I, pero con pelo y más joven. Por detrás algunas llevaban el escudo de España, y otras alegres dibujos abstractos conmemorando algún hecho importante, como el Mundial de Fútbol, las Olimpiadas de Barcelona, una fiesta de Pocholo, o cuando decidiste bañarte por primera vez en diez años.

Dependiendo de su valor, las monedas eran:

  • Una peseta: Tenía el tamaño de una pastilla para la tos, por lo que la mitad de la gente las perdía por la calle y la otra mitad se las tomaba sin querer confundiéndolas con su medicación habitual.
  • Cinco pesetas: De color cerveza, algo más grande que la peseta.
  • Diez pesetas: No se veían muchas monedas de este valor, para ello se usaban dos monedas de cinco y tirando.
  • Veinticinco pesetas: Esta moneda tenía un agujero en su interior. Dicen que el creador de los Donuts con agujero se inspiró en este diseño para hacer sus bollos mundialmente reconocidos.
  • Cincuenta pesetas: Estas monedas parecían ser redondas, pero todas tenían abolladuras por su canto a intervalos regulares. Iker Jiménez continua investigando tal hecho.
  • Cien pesetas: Moneda de las más utilizadas, en los últimos años a algunas ya ni se les veía el dibujo de tanto desgaste.
  • Doscientas pesetas: Ah, ¿pero existía? Yo sólo había oído rumores...
  • Quinientas pesetas: Esta moneda pesaba medio kilo. Salía más rentable llevar cinco monedas de cien que una sola de quinientas.

Denominación y otros usos de algunas monedas

A algunas monedas se les llamaba duro, cincoduros, o veinteduros, dependiendo de su valor: 5 pesetas, 25 pesetas, o 100 pesetas, respectivamente.

El origen de la palabra "duro" para referirse a la moneda de cinco pesetas proviene de los estadios de fútbol, donde los espectadores lanzaban estas monedas a la cabeza de los árbitros o de los jugadores, si estos se portaban mal. En un Athletic-Compostela, hace ya muchos años, un espectador cualquiera pedió algo "duro" para tirar, a lo que su compañero de al lado en la grada le dejó una moneda de cinco pesetas, que lanzó sin ningún pudor contra el primer jugador rival que se le puso a tiro. Fue en ese momento cuando quedó acuñado el nombre para la posteridad.

En las escuelas de primaria, los profesores de matemáticas enseñaban a desenvolverse utilizando cantidades expresadas en duros en vez de en pesetas, ya que era un conocimiento obligatorio para pasar a la enseñanza secundaria. Era normal así escuchar frases como: "Hay doscientos veinticinco mil duros de bote en la Bonoloto esta semana", o "Nos apostamos diez mil duros a que esa tía está operada", entre otras muchas que podían oírse por los bares.

La moneda más versátil era, sin ninguna duda, la de veinticinco pesetas (o cincoduros). Osea, la que tenía el agujerito en el centro. Muchos niños, para jugar a la peonza (antes de que se inventara el ordenador o el Botellón se jugaba a esas cosas), metían un cordel por el agujero de la moneda, para servirse de que la moneda hacía de tope para lanzar la peonza. También servía como adorno de joyería, metiéndola dentro de un collar, o como pendiente. Las posibilidades eran infinitas.

La moneda de un duro servía para tirarla a las fuentes intentando atraer la buena suerte. Tambíen se usaban, en Navidades, para tirarlas contra las figuras de los belenes vivientes que se ponen por las ciudades.

Y si, jugando a los tazos (otro juego idiota de antes del mésenller), perdías todos, podías usar una moneda de cien pesetas para intentar recuperarlos, tirándola a modo de tazo contra la pila de tazos existente (o contra la cabeza de tu amigo para robarselos).

Los Billetes

Últimos billetes en circulación:

Los Verdes: Partido político de ideología... Billetes con un tacto mayoritariamente seboso y de aspecto mugriento y asqueroso, a veces "arreglados" con celo si se habían roto. Si los tocabas tenías un 200% de probabilidades de coger una enfermedad cualquiera, desde la gonorrea hasta la Gripe A que aún no estaba inventada. Además, tenían altas concentraciones de cocaína, al usarse como canutillo para esnifarla. Su valor era de mil pesetas. Su imagen principal era un señor barbudo.

Los Rojos: Con tacto menos seboso, de más valor, exactamente el doble que el anterior, dos mil pesetas. Con menos enfermedades que el verde y mucho menos deteriorados. En él aparecía un señor con una lupa y con un nombre un tanto extraño.

Los Marrones: Billete color marron anaranjado con una tonalidad caca de oca. Estos solían estar más nuevos y menos arrugados que los dos anteriores. En estos billetes salía uno que decían era Cristobal Colón. La verdad es que era bastante feo, seguro que por eso se largó a las Américas. Tenía un valor de 5000 pesetas.

El azul: Lo más. Veías uno de estos sólo en las celebraciones importantes, y de pasada, por lo que no había tiempo para contemplarlo. Estos billetes lucían nuevos y brillantes por su escaso uso, ya que sólo los manejaban los ricos en el Corte Inglés o en restaurantes caros, y los ancianos tras cobrar la pensión para meterlos debajo del colchón. Valía diez mil pesetas. En él salía el Rey, que estaba falto de protagonismo.

Retirada de la Peheta

Con la empobrecedora fuerte entrada del Euro, hubo un tiempo de transición, donde los bazares chinos se forraron vendiendo calculadoras con doble display. Gracias a estos, la economia supo transformarse de pehetas a leros, porque si no se hubiese acabado el mundo.

Como ya hemos visto, el billete de mayor valor en pesetas era el de Diez Mil Pesetas. Para los españoles, la entrada del Euro supuso toda una revolución al ver tantos billetes de tonos coloridos. Los billetes de 100, 200 y 500 leros superan con creces el valor del billete de más valor de las pesetas, por lo que la gente al principio desconfiaba de sacarlos a pasear al parque. Por eso, España es el país que más billetes de 500 euros tiene escondidos de toda Europa, a salvo en el colchón o bajo la baldosa que se mueve del baño.

Ahora, los billetes mugrientos han pasado a ser los de 5 euros, que al cambio salen más baratos que el de 1000 pesetas para esnifar sustancias por él, o como papelina para fumar.

¿Sabías que ...

  • ...cuando Zapatero pagaba un café en época de pesetas, él pagaba 80 centimos de euro?
  • ...la moneda de veinte céntimos de euro, está plagiada de la de cincuenta pesetas?
  • ...cuando Chuck Norris paga algo, lo paga en pesetas?
  • ...todos los españoles siguen usando las pesetas para manejarse, aunque paguen en Euros? Incluso .