Usuario:Graimito/Proyectos/Anacardo Pollastre

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Esta es una historia real, de personajes reales en lugares reales, que por orgullo y cabezonería no serán revelados. Si encuentra algún parecido con la realidad, es que el libro trata sobre usted. Si esto sucediese, llame a la policía, porque le estoy siguiendo 24 horas al día, 7 días a la semana.

Este ¿libro? puede contener material ofensivo o no recomendado para su edad mental (con olor a menta). Si decide leerlo es bajo su responsabilidad.

Capítulo I: ¿Por qué mi bebé no me come nada?

Mi nombre es Anacardo Pollastre, persona ante todo y buen amante -o eso es lo que dice mi muñeca-. Descubrí el sexo cuando, paseando por el parque, un chihuahua intentó montarse a mis zapatillas. He de decir que lo consiguió. Nada más volver a casa, tuve que lavarlas porque estaban cubiertas de una cosa blanca. ¿Era dentrífico? A mí me sabía más como a nata. Desde aquel entonces, todos los veranos realizo el denominado turismo sexual: me masturbo en el baño de los aviones y trenes de camino a la playa.


Comenzé los estudios de ingeniería hace tiempo, pero como ví que era muy dificil, hice lo que hacen todos los que no sirven para estudiar ciencia: me metí a derecho, pero acabé a tumbado. Esos años en la universidad me enseñó a no fiarme de nadie que tenga dos piernas. Además, decidí doctorarme en una carrera mejor y más util. Ahora soy doctor de la vida en general y de la diversión en particular. Soy una persona que le gusta mucho la diversión: todos los jueves voy al parque a echarle comida a las palomas y, al volver, ayudo a cruzar la calle al señor Gámbez, que es ciego, y le pongo en frente de una pared para que continue el sólo. Después de eso siempre intenta darme con el bastón. La mayoría de las veces acierta, porque desde que me caí de un bonsai de pequeño, carezco de reflejo alguno. Ni siquiera tengo reflejo en el espejo. A lo que iba, el señor Gámbez cae en la misma broma todas las semanas gracias a mi habilidad para cambiar el tono de mi voz. Desde que tenía diez años, he sido capaz de imitar el sonido de cinco tipos distintos de peces.