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Resumen del Año de Inciclopedia ¡Llegó la hora de conocer lo que |
Frederick Trump
Frederick Trump (nacido como Friedrich Drumpf, Kallstadt, Reino de Baviera, 1869 - Queens, Nueva York, Estados Unidos, 1918) fue un emigrante, inmigrante y deportado que fue de Alemania a Estados Unidos donde medró en base a negocios un tanto turbios e indignos de un norteamericano ejemplar. Es abuelo del 45º y también 47º presidente de los Estados Unidos Donald Trump, pero aclaramos que aquí no hacemos a éste responsable de los pecados de su abuelo, ni aunque el papá del nene de papá que es Donald fuese, gracias a ellos, a su vez un nene de papá.
Biografía
Los Drumpf eran una familia de catetos pero no de pobres. Hasta tenían algunos terruños, pero el padre de Friedrich contrajo un enfisema pulmonar, y no habiendo una seguridad social potente en Baviera, la familia se arruinó por completo, por lo que Friedrich tuvo que aprender el oficio de barbero, el cual le hacía sentir poderoso al poder tener bajo su navaja la garganta de otros hombres. Por causa de la pobreza familiar, porque ya había un barbero en su pueblo y él no tenía cuota de mercado, y porque le llegó la edad de realizar el servicio militar, Friedrich Drumpf salió patrióticamente por piernas para buscar fortuna a la tierra de las oportunidades, que él entendía más como la tierra de los oportunistas.
Así fue que se embarcó con un billete de tercera clase, viajando a la intemperie en un espacio hacinado, donde no había baños y durante diez días los viajeros no podían hacer otra cosa que arrojarse mutuamente heces, orines y hasta vómitos cuando la mar estaba picada. Oliendo mal llegó a la aduana donde el funcionario apuntó su apellido con la ortografía que le salió de los cojones dando origen a la saga de los Trump.
Una vez allí lo primero que hizo fue meterse a vivir a casa de su hermana, que había ido a vivir a Nueva York algunos años antes. La ciudad era un multicultural hervidero de inmigrantes y una Babel de lenguas. Allí logró trabajar de barbero honradamente, por lo que siguió siendo pobre. Así que al poco tiempo se marchó de allí.
Aprovechando la fiebre del oro, Friedrich se fue a Seattle. Pero no piensen que se puso a buscar oro, eso no que es muy malo para los riñones. Su propósito no era sacar el oro de los yacimientos, sino de los que lo minaban. Por eso estableció una casa de putas donde hacía ganancia del cuerpo de las mujeres que allí tenía subcontratadas, y también de las comidas que éstas servían a sus clientes, así como las bebidas alcohólicas. Nada más rentable que explotar a otros seres humanos, así fue como Friedrich amasó su primera pequeña fortuna y se cambió el nombre de Frederick, para sonar más angloparlante, fíjate todo lo que le dieron las ingles a este hombre.
Volvió entonces rico a Alemania y se casó con la también alemana Elizabeth Christ, que era su vecina y once años menor que él, que es lo que le atrajo de ella. El nuevo matrimonio fue expulsado del país porque a Trump le que retirada la nacionalidad por haberse escaqueado del servicio militar. Ante el decreto que le deportaba, Frederick Trump escribió una carta echando la llorada al príncipe Leopoldo de Baviera.
¿Por qué deberíamos ser deportados? Esto es muy, muy duro para una familia. ¿Qué pensarán nuestros conciudadanos si personas honestas tienen que hacer frente a semejante decreto, sin mencionar las grandes pérdidas económicas que ocasionará?
El príncipe Leopoldo no se ablandó y deportó sin miramientos a los Trump, tal y como muchos años después el nieto del matrimonio haría con tantas y tantas personas a las que, por lo menos, la carta de Trump abuelo les sirve como modelo para sus vanos intentos de protestar.
Así es que el joven matrimonio tuvo que volver a Nueva York con el rabo entre las piernas, lo que demuestra que los intentos de vincular a la familia del Presidente Trump con el nazismo son una vil calumnia, ya que su familia había sido expulsada de Alemania con cajas destempladas mucho antes de que Hitler llegara al poder.
Una vez allí, Frederick, decidió montarse su propio sueño americano, con furcias y con casinos. Y es así como, nuevamente en base a negocios turbios pero eficaces como la prostitución, el juego y las bebidas alcóholicas, y más tarde, con este sucio dinero, comprando terrenos e inmuebles, empezó a crear el imperio que más tarde haría que su célebre nieto fuera un hombre hecho a sí mismo (codazo, codazo, guiño, guiño) por meritocracia (risa contenida).
Víctima de la pandemia de la Gripe Española de 1918, el remedio casero utilizado desde tiempos inmemoriales por la familia Trump frente a las enfermedades infecciosas -inyectarse lejía- no le sirvió de gran cosa y falleció dejando tres hijos, una chica y dos chicos. El mayor de los dos chicos, Fred Christ Trump, seguiría con los negocios de su padre garantizando la "meritocracia" de sus propios hijos, entre ellos el famoso Donald.
Personaje histórico (ver todos aquí). ☀️ 
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