Incijuegos:Viaje en el tiempo/Misión/Bajar
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Tratas de bajar con cuidado con la linterna sujeta en tu mano aún encendida y caes al suelo de espaldas. Te levantas con un dolor de espalda y avanzas en esa enorme grieta dentro de la montaña; entre cada pared hay más o menos una distancia de 20m, el techo esta a 43m de altura y es muy extensa, no alcanzas a iluminar el final. Entonces pisas algo extraño, ¡es guano de murciélago! Te rozas el pie contra el suelo rocoso para sacarte esa asquerosidad y es después de hacer eso que se te da por iluminar para arriba. Ves que el techo de la grieta está cubierto de murciélagos, no te habías dado cuenta anteriormente. Bajas la linterna inmediatamente por el miedo de que esos animales se te abalancen.
Ahora con tu linterna apuntando para adelante y unos cuantos murciélagos volando después de ser asustados por tu luz, piensas que hacer, es decir, no sabes que hay al final de la grieta y tampoco sabes si podrás subir hacia el túnel. Se escucha a alguien gimiendo de una manera peculiar cerca tuyo e inmediatamente desenvainas tu espada e iluminas hacia donde vino esa voz.
Es un hombre mayor, y estaba enseñando los dientes mientras gemía. Pero se asusto cuando lo iluminaste con tu luz y se cubrió con las pieles de animales con las que estaba vestido. Se nota que no se baña ni se afeita, es barbudo y peludo... Te mira con cara de loco encerrado y con ideales extraños.
Hombre: Hola, ¿qué haces por este lugar?
Tú: Yo sólo iba por un camino y me perdí, no sabía de este lugar. Hombre: Mi nombre es... bueno... no me acuerdo de mi verdadero nombre, pero soy un murciélago (extiende sus brazos y enseña unas alas hechas con pieles de animales). ¡¡¡AAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!!! |
Aparecen de la oscuridad varias personas más, también vestidas con pieles y con una apariencia rústica.
Hombre: Jijijijijjijiji, soy un murciélago, era humano, pero cuando era niño. Cuando entré tuve que alimentarme y aprender, aprendí de ellos. Jijijijiji. Soy un listo.
Tú: (Aún con la espada en una mano y la linterna en la otra) Bien... me estas asustando. No me hagas usar mi espada. ¿Saben como salir de aquí? Hombre: No te vamos a dejar, queremos comida. Mi familia también necesita comer. Cualquier fuente de alimento hay que aprovecharla. Espero que lo entiendas. Lo siento. ¡¡¡¡¡AAAAAAAHHHHHH!!!!! ¡¡Al ataque!! |
La cosa se puso aterradora. ¡Ahora las personas-murciélagos se acercan a ti!
¡Mejor haz algo! ¡Ahhh, la linterna se apagó! ¡¿Qué falta ahora, que te cague un elefante?!