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Incilibros/Paradoja de los gemelos
Un día, a un anciano genio alemán se le descompuso uno de sus dos relojes cucú que tenía en la sala de su casa. Creyó que era gracioso, y de repente le vino una idea intrigante a la mente, una paradoja realmente desafiante para la mente humana, y se quedó pensando en ello por un largo rato en vez de ir a comprar baterías nuevas.
Aquel genio científico se planteo la siguiente situación, basada en la película Viaje a la Luna que había visto por la mañana, y en sus primos siameses a los cuales no le gustaba encontrarse. Y decía lo siguiente:
"Hay dos gemelos, uno bien parecido, otro no tanto, por lo tanto, el segundo se pone celoso y decide viajar a alguna estrella lejana para alejarse de su molesto hermano y donde pueda encontrar alguna extraterrestre facilona que sí lo quiera, pero mala suerte, olvidó el manual de ligar féminas en la tierra, por lo que tiene que regresar a su lugar natal, y cuando vuelve a ver a su molesto hermano, este es más viejo, pero aún así más apuesto, hijo de puta."
"El segundo gemelo no entiende lo que pasa, hace muchos cálculos avanzados, ya que es feo pero no tonto, y se pone a pensar que para él, el tiempo transcurrió normal, y quien se alejaba era el planeta tierra con su maldito hermano en el, por ende, él mismo debería ser más viejo, y si es posible, guapo, que su hermano gemelo."
Si usted no ha captado aún la catastrófica situación que se le presenta a nuestros héroes, le será explicada en este texto con poco gusto pero mucha dedicación forzada.
Planteamiento
Desarrollaremos esta situación lentamente, paso a paso, con imágenes y dibujitos bonitos para logre captarlo al menos en un 40% de su totalidad.
Tenemos a nuestros dos individuos gemelos en cuestión, con los que hemos de experimentar para obtener la respuesta, pero como en estos días modernos e idiotas no se puede experimentar con seres humanos, por alguna burrada posmoderna llamada "Derechos Humanos", usaremos dos chimpancés para poder explicarlo:
Aunque ahora resulta que también experimentar con animales es considerado "inhumano" también, vaya mundo de locos, ni siquiera son humanos los chimpancés. Bueno, supongo que en ese caso, usaremos un par de florecillas para el experimento:
Pero al demonio, ¿quién es perfecto en esta vida?, Todos cometemos errores alguna vez, todos enviamos chimpancés al espacio alguna vez. Así que los chimpancés se quedan definitivamente:
Comenzamos con el experimento enviando a uno de los chimpancés al espacio, por lo que necesitamos conseguir, primeramente, una nave espacial, que puede encontrarla usted mismo en la estación espacial más cercana, pero ubíquela en un lugar abierto y con algo de patio. También necesitamos conseguir algún cebo para conseguir que el primate suba a la nave y no lo agarre a usted a golpes, además de que debe conseguir cierta cantidad de alimento para el chimpancé, alguna que otra rama para que pueda jugar en el viaje, y algún dispositivo de aumento de gravedad para que el sujeto pueda deambular libremente y lance sus heces fecales con comodidad.
Mientras que para el otro chimpancé, manténgalo cómodo y tranquilo en un lugar placentero, lejos del lugar de despegue del cohete, si no puede haber varios heridos y muchos gritos y mordidas. Cuando la nave haya despegado, proceda a lo siguiente.
Desenlace
Enhorabuena, el chimpancé a regresado de su odisea espacial, consigo trae montones de experiencias, historias de aventuras y enfermedades y plgas por estar tanto tiempo encerrado. Con cuidado, baje al chimpancé y con ayuda de un adulto, y si usted ya es adulto, con ayuda de un amigo adulto, traiga al otro simio, para que estos dos vuelvan a encontrarse y usted y el resto de los observantes, si es que a alguien más a parte de usted le interesa, puedan observar si hubo algún cambio significativo en alguno de los monos. Estos son los panoramas y casos que pueden desarrollarse tras el experimento:
Caso 1
El mono que se quedó en la Tierra es más viejo. Está en blanco y negro, por ende y lógica este es más viejo.
Esto puede deberse a que, debido a que, como el chimpancé espacial viajó a una velocidad supersónica que viola muchas leyes de la física y de tránsito, pudo vencer al inmundo tiempo cruel y viajó más rápido que este, mientras que para el otro pobre simio, el tiempo fue más rápido esta vez. El tiempo no perdona muchachos.
Caso 2
El mono que fue al espacio es más viejo. Toma eso, intelectualoide.
¿Como ha sido posible?, ¿Qué no ya estaba resuelto?, bueno, esto es más complicado y existencial de lo que parece. Parece que el mono espacial, aunque está moviéndose más rápido que un adolescente precoz, estando adentro de la nave, no parece estar percibiendo movimiento, ya que cuenta con un piloto muy responable y este siempre va seguro a la misma velocidad, mientras que para este mismo, la tierra se está alejando en el plano espacial, por lo tanto, es la que está realizando la aceleración; sí, la tierra tiene ruedas, ¿porqué crees que es redonda?, duh.
Caso 3
El mono que fue al espacio es más viejo, y súper inteligente y con ganas de destruir el mundo.
Parece que la interacción con seres de inteligencia superior y origen desconocido y maligno aumentaron la capacidad cerebral del chimpancé y al mismo tiempo su megalomanía. El mono vio varios documentales de Napoleón y Hitler de regreso del viaje y está listo para regresar a hacer estragos en grande. Solo el mono de la tierra podrá detenerlo, pero es muy estúpido para ello. El futuro de la raza humana está en sus manos.
Caso 4
El mono que se quedó en la tierra es más joven, pero al reencontrarse con su contraparte crea otra paradoja espacio-tiempo donde se desarrolla un vórtice atemporal que absorbe poco a poco toda nuestra dimensión.
Este caso podría tener una larga y detallada explicación por parte de la astrofísica y las leyes del tiempo, pero ya ni siquiera hay monos, entonces no tiene chiste seguir intentándolo. Nos veremos la próxima.