Usuario:Thecritic-uio/Proyectos/El Comentarista y el Crítico/Un Colombiano en el Extranjero
Incilibros/Un colombiano en el exterior
El crítico:: Buenas noches amigos y amigas, bienvenidos a este su nuevo prógrama "El Comentarista y el Crítico", en donde ni la Inci se salva.
El comentarista: Buenos días, tardes, noches o alucinaciones, señores y señoras televidentes. Bienvenidos al programa de éxito en TuvaluTv, El Comentarista y el Crítico. Queremos dejar claro que este programa no está subvencionado por el govierno despótico de Tio2.jpg, sinó que fue... (Entran unos gorilas vestidos de negro con Uzis apuntando al Comentarista y le hablan con cara de pocos amigos al oído)
El comentarista: Bien, amigos, como...ejem...iba diciendo....<glup>...éste programa está subvencionado por el amable señor Tio2.jpg, el Monesvol lo tenga en un pedestal muy alto y de ahí nunca baje a menos que vaya al Mercadonaa por pan... el cual encargó muy amablemente a el Crítico, amante de los deportes de riesgo, como el ajedrez, el patinaje sobre PVC o el Tetris un programa novedoso y lleno de acción.
El crítico:: Ejem, así es, y ya que hablamos de Merca, pues justamente el artículo que analizaremos esta noche se trata de un tema muy relacionado... estamos hablando de Incilibros/Un colombiano en el exterior.
El comentarista: Sí, porque ¿quién mejor que un colombiano para empezar un programa sobre artículos con gran potencial? En este episodio, seguiremos a este entrañable Colombiano en su viaje por el mundo. ¡Empecemos!
El crítico:: Bueno, y antes de analizar nuestro artículo quiero decir que los miembros de la producción han decidido hacer la entrega de nuestro primer premio "Imagen Papachop" de nuestra serie de programas a este artículo! Aplausos, por favor!
Imágenes dignas de National PornoGeographic
El comentarista: Sí, como sabemos que una imagen vale más de mil palabras, y no nos pagan suficiente para decir tantas, empezaremos con lo que más le gusta a la gente, con lo más visto de los artículos: las fotos. ¿Porqué creen que los señores administradores se empeñan en que rellenemos nuestros artículos con cantidades industriales de imagenes mal photoshopeadas? Pues la razón está clara: cualquier ser, por muy despreciable que sea, lo primero que hace es mirar las fotos de un artículo y sus citas. Es como mirar la sinopsis de un libro o de una peli: si ésta no nos gusta, ¡a la mierda! su primo se leerá el artículo, con el montón de letras que tiene.
¿Photoshop, o realidad?
El crítico: Pues y qué dirán los lectores cuando ven a Shakira mal pegada encima de la estatua de la libertad? Además me pregunto, qué dirian los neoyorquinos viendo eso... pensarían que se trata de un nuevo atentado fundamentalista?
El comentarista:...vaya, ¡si no me lo dices no lo hubiera visto!
El comentarista: Y ¿qué me dicen de la visión que este usuario,del que no diremos el nombre, tiene de la embajada de los EEUU?¡Un techo dibujado artísticamente con ¡el Paint!¿O quizás sea un cartel? Sabemos que es difícil entender a un artista vanguardista....¿pero tanto?...Ése dominio de las lineas casi-rectas, esa letra preestablecida del texto del Paint, ese copypaste que casi no se nota... mmmh, excelente trabajo.
El crítico: Un retrato fiel de lo que normalmente son los bunkers de las embajadas de Estados Unidos, no?
El comentarista: Exacto, en él podemos apreciar a los típicos tiroleses de mar provocando altercados en las puertas invisibles de la embajada del King Congo...digoooo, EEUU.
El mal pie de la foto
El crítico: Bueeeeno, hablemos un poco sobre el concepto de pie de página...
El comentarista: Exacto, querido compañero. ¿Qué mejor forma de hacer de una foto graciosa una foto aun más graciosa? Con un buen pie de página. Bien, pues como cabe destacar, este usuario no tiene idea es un grande de los comentarios chiquitines, como cabe apreciar en esta foto.
El crítico: Como se dice "Una imagen vale más que mil palabras" y en este caso se lo ha interpretado literalmente...
El comentarista: Exacto, concretamente, esta imagen vale como ¡2000 palabras! o más, no me paré a contarlas ni lo haré.