IBeMe
Este artículo contiene un chingo de humor mexicano.
Igual y si no le agarras el pedo, lo mejor es ir a México y preguntar, pero si no entendistes el nahuañol de los mexicanos, ya te chingaste. |
Empresa creada en 1975 D.D.T. (después de todo) por el cocinero mexicano Mario Mireno Manflinflas, quien cansado de los callos a la madrileña, huyó de su Valencia natal (su madre era mexicana) cruzando el Canal de la Mancha justo por la parte más manchada, para lo cual recibió el apoyo de la Reina de Corazones y del Rey de Bastos. Habiendo nadado hacia el oeste sin encontrar tierra, dio con dejarse llevar por la marea hasta que ésta, cansada de transportarlo gratis, le arrojó a las costas de lo que por aquel entonces se conocía como Estados Unidos.
Arrojado sin ninguna ceremonia a la playa, se encontró con el cadáver de un burrito al que le faltaba la mandíbula inferior. Aprovechando la afluencia de turistas en la playa, decidió tomar unas tortillas, preparar la carne del pobre burro con unos tomates y salsas picantes que traía en sus bolsillos, y vendérserlas a los turistas, con lo cual empezó a ganarse la vida. Bautizó al platillo como "Burrito", pues tenía claro que los gringos no hablaban una papa de castellano, pero en cualquier caso tenían hambre y eran capaces de comerse cualquier cosa mientras no supieran lo que fuera (había trabajado en la sucursal sevillana de McDonalds). Fue por eso que tres días después, Mario Mireno Manflinflas, que ya había cambiado su nombre por el de Robert de Niro, ya convertido en un próspero empresario gastronómico, decidió bautizar su empresa como "Industria de Burritos la Mandíbula", es decir, IBeMe.
Cambio de giro
Pasó una cantidad de años inestimable para cualquier historia que no haya sido escrita por Isaac Asimov, hasta que un día uno de sus contadores trató de robarle dinero a la compañía. Advertido de tal situación, Bob Deniro contactó a los mayores genios de la computación de auqella época y les encargó la creación de una máquina que detectara cualquier movimiento inusual de dinero. La máquina, llamada SCAE (Super Computador Anti Estafas) cumplió tan bien su tarea que despidió a todos los trabajadores, incluyendo a Deniro. Este, al ver que una máquina la había robado su empresa, buscó ayuda para recuperar su querida fábrica de burritos, sin lograrlo, tras lo cual se sometió a una operación de cambio de sexo y se fue a vivir a Canadá bajo el nombre de Norma Jean Baker, siendo luego descubierto por un fotógrafo de Playboy y empezando una leyenda nueva.
Entre tanto, los desempleados de IBeMe secuestraron a los programadores que crearon a la SCAE, a la cual se referían despectivamente como La Inmencionable, para recuperar el control de la fábrica. Los programadores diseñaron un plan: harían que la computadora ejecutara un programa tan rudimentario que pronto volvería a realizar solamente operaciones básicas. Fue así como ua noche ingresaron a la sala donde se econtraba la SCAE, y utilizando una cinta magnética le instalaron un programa al que llamaron MSDOSCF (Muy Seguramente Debe Obligar al Super Computador a Fallar). Como previeron, la SCAE quedó en estado de solamente pedir instrucciones sin poder hacer nada más.
Los programadores le hicieron la oferta a los trabajadores de que se decidieran a vender esos computadores con ese mismo programa, al que cambiaron el nombre para evitar sospechas, pues el computador sería fácil de vender a un costo alto pero no necesariamente impagable, y su costo de producción por unidad sería seguramente inferior al de un burrito.
Los trabajadores aceptaron la oferta, y así la que fue una próspera y se podría decir que honesta fábrica de burritos pasó a ser una empresa de computadoras, que en honor a su fundador, Norma Jean Baker, mantuvo el nombre con el que se le conoce actualmente: IBeMe
- No ha sido confirmado, pero se rumorea que uno de los trabajadores de IBeMe que fue despedido sería el fundador de Taco Bell, lo cual explicaría la falta de sabor de esos burritos.
Competencia
Para esto véase
Para saber más sobre los programadores
Para saber más sobre Mario Mireno Manflinflas
Véase