Incilibros/Guía de supervivencia para zombies
Ceeerebrooo
Si estás leyendo esto es porque no has seguido al pie de la letra nuestros fantásticos consejos y tampoco has maximizado tus posibilidades de supervivencia. Pasaremos pues a darte nuevas recomendaciones para tu nueva vida como enemigo zombie. Sobre todo porque ellos también merecen una guía y nunca te discriminarían por tener la misma inteligencia que David Beckham.
Pensemos por un momento que eres el típico listillo que baja al sótano oscuro anteponiendo la seguridad del grupo a la tuya o estas tan gordo que tus posibilidades de correr más rápido que un montón de carne en putrefacción son nulas. Claramente serás el próximo en convertirte en zombie. En el momento de tu resurrección te asaltan las preguntas y dudas en esa única neurona que ha sobrevivido tras tu no-muerte. A continuación te facilitamos algunas instrucciones sencillas para que llenes tu despensa para suficiente tiempo antes de que el Armaggedon erradique por fin a los seres humanos vivos de la faz de la Tierra. A menos que el zombie de Bruce Willis haga algo al respecto.
Introducción
En primer lugar deseamos comunicar a nuestros lectores que este artículo esta pensado para los zombies viejunos. Aquellos con pieles azulosas y que se mueven con la elegancia de un borracho patizambo. Por tanto si eres de esos zombies que van a la última moda y te den plazas a la velocidad de Usain Bolt olvídate de nosotros porque a Dios pongo por testigo que jamás pasaréis la misma hambre. Además de que la gente seria no lo considera canon.
Posibles orígenes de la plaga
Hay muchas posibilidades: un meteorito averiado, un barril perdido del ejército, un desodorante defectuoso, un restaurante hindú, o simplemente Michael Jackson que se puso a bailar thriller en el mas alla... pero en realidad tú ahora no debes preocuparte por eso. En primer lugar porque la única neurona que queda en tu coco solo piensa en llenar el buche. Lo ideal es que la plaga tenga como origen la experimentación de cosméticos en primates porque de este modo adquirirás superpoderes que te permiten competir en Olimpiadas. Si por casualidad algún científico consigue descubrir el origen debes saber que es una víctima propicia para saciar tu hambruna ya que su cerebro seguro que será de buen tamaño.
Consejos gastronómicos
No vayas de gourmet por la vida
Lo primero que debes saber es que ahora que eres zombi no le debes hacer ascos a nada. Aunque creas que la mejor carne está en los muslos, las pechugas o el lomo pronto te darás cuenta de que las manitas y los intestinos son un manjar para los no-muertos. Tampoco debes discriminar por razones de sexo, raza, edad, religión o sexualidad. En caso de que no haya humanos a mano siempre puedes mordisquear cualquier animal que encuentres. Esto tampoco es considerado canon, pero es igual, sólo procura hacerlo sin que te vean vivos o muertos. Tienes la ropa hecha jirones, hueles mal y probablemente seas un poquito más feo que en vida, pero por desgracia la sociedad zombi, al igual que la humana, es muy superficial.
Olvídate de grandes banquetes
En segundo lugar es importante destacar que los zombis que más tiempo sobreviven son aquellos que se quedan zampando lo cazado en vez de salir por nuevas presas. Por tanto, una vez que captures a un vivo quédate mordisqueándole hasta que solo queden los huesillos. Lo único que debe apartarte de tu presa es otro zombi al que tendrás que patear el culo para defender lo que es tuyo. Recuerda que lo que te mata a ti le mata a él, patá en los cojones y fuera.
No dejes para mañana lo que puedas zamparte hoy
En el lado contrario están los zombis-previsores que en su anterior vida fueron grandes ahorradores y previsores por lo que suelen dar un par de dentelladas y luego se guardan al humano pa' luego. Estos zombis serán los primeros en morir de inanición porque cuando vuelvan a su despensa encontraran que su presa muerta ha resucitado y se ha convertido en competencia por carne fresca. Es un grave error utilizar tácticas tan humanas cuando ya no eres humano.
Elimina la competencia
En la cumbre de la escala evolutiva zombi están aquellos que lo primero que muerden en un humano es su cerebro. Históricamente se creía que la razón es por la ingente cantidad de proteínas que contiene el cerebro humano. Estudios posteriores propusieron que los zombis más inteligentes adquieren esa habilidad al comer cerebros. Actualmente se ha llegado a la conclusión de que ambas razones son totalmente falsas. El zombi más listo se come un cerebro porque de esa manera elimina futura competencia.
Minimiza esfuerzos
Prioridad de ataque: siempre hay que buscar el humano más fácil. Lo ideal es un buen gordo pero con el paso de los días no quedarán. Otras buenas presas son los cojos, los ciegos, los sordos y las rubias. Por razones de edad encontrarás ancianos fáciles de comer pero con carne rancia y niños asustadizos de tiernas proteínas.
Cazador solitario
Es posible que hayas visto documentales sobre felinos en el Discovery Channel o que alguien te haya lavado el cerebro en la universidad hablándote de las excelencias del trabajo en equipo pero en realidad ahora que eres zombi debes evitarlo. Un grupo elevado facilita en efecto la caza pero como en el comunismo tendrás que compartir lo tuyo con los demás y eso no es bueno. Por otro lado un grupo de trescientos apestosos babeando, gruñendo y desplazándose a 3km/año suelen llamar la atención en exceso.
Camúflate
Está probadamente demostrado que los zombis mejor nutridos son aquellos que son capaces de pasar desapercibidos dentro de su entorno. Procura guardar tus tripas dentro de la ropa, utiliza ropajes oscuros o tonos verdosos si vas por un bosque y evita los disfraces llamativos estilo payaso o hare-krishna. Sobre todo porque a estos últimos les dispararán independientemente de si son zombis o no.
Grandes oportunidades de llenar el estómago
Un buen zombi nunca debe desaprovechar una buena oportunidad para clavar el diente. Cualquier despiste del humano es bueno para dejar tu marca en su carne. Entre las mejores oportunidades destacan:
Tu primer mordisco
Cuando llega el momento de tu paso de la vida a la muerte siempre estarás acompañado de tu mejor amigo que llorará contigo hasta tu conversión en zombi. Lo normal es gemir y babearse mirándole mientras él duda sobre que hacer. Por un momento crees que podrás mordisquear al muy idiota pero finalmente te pegará el habitual disparo en el almendro. Por tanto, lo más aconsejable es quedarse quietecito tras morirte con los ojos abiertos. En el momento en que tu mejor amigo se limpie los lagrimones y mire hacia otro lugar... ¡ZAS! Movimiento rápido y mordisco a la yugular. ¿Se creía ese imbécil que lo ibas a dejar escapar con vida?
Hacerse el muerto-muerto
Permanecer tirado en el suelo sin moverse, babearse o gimotear hasta que llegue un humano. Este comprobará si estás vivo, no-muerto o muerto del to'. Tú sigues quieto y cuando el humano llegue a la conclusión de que no eres una amenaza... ¡ZAS! Mordisco en el tobillo por imbécil.
Espera a que se haga de noche
Seguramente creerás que todo el mundo ha leído la guía para la supervivencia zombi y que evitan moverse de noche. ¡FALSO! Muy poca gente pierde el tiempo en Inciclopedia. Durante la noche es tu mejor oportunidad para encontrar comida rápida. Ya sabes, mordisco en los cojones por imbéciles y por no leer la Inciclopedia.
Búscate un buen lugar
Lo más recomendable es un lugar al que los humanos quieran ir para aprovisionarse. Supermercados, tiendas de armas, maquinas expendedoras, neveras, tugurios donde se venden drogas y tabledances
2.0
En las últimas epidemias zombis ha aumentado notablemente el número de videoaficionados que desean captar imágenes espeluznantes con el propósito de ganar un Pulitzer o salir en un programa cutre de videos caseros. Los muy ilusos no se dan cuenta de que sus cintas solo serán vistas por zombis. De todos modos, lo importante para un zombi es que hay mucho iluso que rodeado de cincuenta no-muertos solo prestará atención a aspectos como el encuadre, el contraste o la mejor toma de lo que está grabando. El zombi más listo será aquel que en vez de dirigirse hacia el resto de humanos que huyen dirigirá su atención al incauto Scorsese de saldo.
