Juegos sexuales para adolescentes
Nacidos en la década de los años 80 del siglo pasado, los juegos sexuales para adolescentes son la antesala de lo que actualmente se denomina acto sexual y en jerga popular follón.
Antecedentes
Desde el punto de vista histórico, paleontológico y teosofista, este tipo de juegos fueron creados por un Neanderthal que se encontraba aburrido en la caverna de sus padres. Recordemos que en esa época no existían plataformas de juego. Estaba con una amiga terminando una pintura rupestre cuando, presa del instinto sepsual, inventa el "garrote o agarrón", antecesor de varias versiones modernas de este tipo de juegos.
Los primeros encuentros de corte sepsual entre hombres y mujeres se producen en los colegios, en las plazas y en la cocina (debajo de la mesa de diario). Allí, jugando a las escondidas o al pillarse, se dan los rudimentos de la posterior explosión de la libido que sobrevendrá irremediablemente. Bruscas nalgadas, confundir pezones con perillas de radiorreceptores, imaginar que la hija única de Tio1.jpg es una hermosa damisela, alucinar con el peinado de Leia Organa, son sólo parte de los antecedentes de una verdadera revolución sexual.
Evolución
Al ver los jóvenes que al contacto con el cuerpo de las niñas se produce una energía cósmica desconocida, y con el concurso de las diapositivas sobre sexualidad, ponerle semillas a la mamá, cigueñas parisinas, todo termina por convertirse en una gran confusión. Los síntomas más frecuentes son la sudoración excesiva, las tapas de revistas porno con superficie dispareja debido a humedades de origen extraterrestre y manos hiperactivas cuando se acerca una presa una chica. Era el momento que alguien desarrollase una institucionalidad que permitiese llevar a cabo el encuentro entre el cuerpo del adolescente y su equivalente femenino. Es entonces cuando surgen los juegos sexuales para adolescentes.
Con el tiempo, y en la medida que aumentaba la calentura la edad de los participantes, estos juegos fueron evolucionando en complejidad.
Beso o cachetada
El primer en aparecer fue el beso o cachetada. Para ello, un grupo de chicos y chicas se sienta en forma de círculo. El adolescente selecciona, mediante métodos como su nivel de sudoración o el Parkinson galopante, a la chica a la cual debe formularle la pregunta “¿Beso o cachetada?”. Si la chica es fea, ella decidirá habitualmente darse un beso con el individuo. Si es bonita, la cachetada habitual se escuchará en el lado oscuro de la Luna. Con este efectivo método conductista, los chicos siempre preferirán besar a la fea.
En cuanto a los tipos de besos, se distinguen los siguientes:
- Beso simple pomular: la versión políticamente correcta que permite salir del momento torturante al verse enfrentado el jugador al escrutinio de los participantes.
- Beso en tiempo de redonda con bomba de vacío: los más avezados intentan permanecer más tiempo sobre la piel de la mujer dando un beso largo que dura un compás completo en 4/4, a la vez que se intenta engullir sin éxito el pómulo de la chica.
- Beso cuneteado: el santo grial del beso y principal causante de la contaminación de horario no diurno. Se trata de reproducir la metáfora del neumático y la cuneta al momento de estacionar. El chico besa a la adolescente en la comisura, mientras tiembla entero y palidece.
- Beso en
el hocicola boca: como su nombre lo indica, es un beso en la boca, no dentro de ella. Eso significa que lo único que se produce es un choque entre cuatro labios cerrados o cuanto mucho con los frenillos de ambos adolescentes (se recomienda llevar un alicate en el caso de que se enreden, o un balde con agua hirviendo).
Verdad o consecuencia
Cuando los chicos logran superar el tiempo de los gritos destemplados y sonidos guturales, pueden acceder al juego de la verdad o consecuencia. Para ello, se reúne al mismo grupo dispuesto en círculo, en rombo o en cualquier poliedro irregular dado que ahora algo conocen de geometría. Tanto chicos y chicas le dan a elegir a alguien del sexo opuesto entre verdad o consecuencia. En el primer caso, se trata de preguntas ingenuas como por ejemplo “¿Cuándo diste tu primer beso?”, “¿Todavía no te encamas con el (la) profesor (a)?” o “¿Qué te parecería hacer un trío con mi amiga?”. Respecto de consecuencia, que normalmente eligen los empeñosos de sexo masculino esperando alguna proposición sexualmente atractiva, normalmente termina con un adolescente lesionado luego de saltar a la piscina sin agua desde el trampolín o detenido luego de apedrear un vehículo policial.
Diálogo clásico explicativo
Francisca (rubia 1.75 metro, 90-60-90, minifalda de 15cms.): ¿Verdad o consecuencia?
Jaime (friki 1.50 metro, lentes, camisa de franela): Consecuencia.
Francisca: anda a pedir limosna a la esquina, te espero con 500 leros
La botellita
El non plus ultra de los juegos sexuales para adolescentes. Los chicos ya se han tomado sus primeras dos cervezas y les viene el ansia sexual propia de la edad. Para intentar saciar sus inquietudes recurren al juego quizás más elaborado de esta serie: la botellita. Para ello, se reúnen también en círculo, poniendo una botella de costado y haciéndola girar a la manera del reloj. Van lanzando entonces la botella de acuerdo al orden de los jugadores en el círculo. Si el que tira es chico y sale un adolescente del mismo sexo la jugada también es valida , asi como en las chicas.
Cuando el gollete apunta finalmente a alguien el que la hizo girar debe formular una solicitud al interpelado. Normalmente cuando las cervezas no han causado su efecto, las peticiones son más bien ingenuas y cándidas. Con el correr del alcohol, las solicitudes se van transformando en exigencias cada vez más guarras. El resto de la historia es resultado de una mala planificación familiar (embarazos no deseados, cuatrillizos, padre embarazado...).
Normalmente para este juego se utiliza una botella vacía. De hecho, lo mejor es jugarlo cuando ya se han vaciado todas las botellas. Puedes Culiar Mucho.
El conejo de la suerte
Un clásico en España. Una vez más los adolescentes conforman un círculo, debido a la nula imaginación para representar otra figura, y da comienzo el juego. Los chicos y chicas deben dar una palmada al de su izquierda con la mano derecha, el que la recibe da una palmada con su mano derecha al de su izquierda, y así sucesivamente hasta que la fuerza centrífuga los empuje levemente hacia atrás.
Mientras, deben cantar la siguiente canción:
Ahí va
El conejo de la suerte
Haciéndose el distraído con su cara de pervertido
Tú besarás
Al que te guste más
Nota: El texto original no tiene mucho que ver con éste.
Cuando termina la canción, la última persona que dio la palmada elige a quien quiere besar. Por ello es conveniente no comer ajo antes de jugar.
El duro
Como su nombre bien lo indica: du: juego, ro: de niños.
Su funcionamiento es más sencillo que tabla del 17. Se elige una chica y se coge una moneda de dos caras distintas. Es decir, cara y cruz. Bueno, de una cara y una cruz distintas. Espera, la cara y la cruz ya son distintas en cuanto a su esencia, ¿tengo que mirar si son distintas en cuanto a su ente? Simplificando, tiramos la moneda al aire y si sale cara, besamos a la chica, y si sale cruz, no la besamos y nuestros amigos se rien de nosotros al habernos dado una moneda trucada sin cara.
El nombre proviene de la antigua moneda española de 5 pesetas, más conocida como "duro" ó "la vieja cadena y grillete".
El muelle o ruleta sexual
Una de las grandes contribuciones de Colombia a la humanidad, junto con sus elegantes corbatas y la merca. Un grupo de chicos se tumba en el suelo unos junto a otros mientras un grupo de chicas se sientan encima del miembro de ellos. Al cabo de un tiempo, cambio de pareja. Pierde el chico que eyacula primero y la chica que antes se queda preñada. Las enfermedades de transmisión sexual como la clamidia, la hepatitis, el SIDA y demás son el bonus track de este entretenido juego.
7 minutos en el cielo
Un juego en el que se necesita un armario/sala/cuatro paredes y una puerta. Mediante diversos métodos (variando desde la botella hasta el piedra papel tijera lagarto Spock) se eligen a dos personas que pasaran un lapso de 7 minutos en el armario. La gracia del juego es ponerse a escuchar los gemidos y los sonidos de muslos siendo cacheteados.