Palabras encadenadas
Dios osa sacar carpa para ampliar Arakiri rico con contenidos dosados. Dos dosos sospechan chavacantes. |
Nombramos osadamente enunciados (¡sí, ignorante!) encadenados sencillamente empezados sin ninguna anomalía liante, (especialmente esos solo ostentan tangibles espacios) sabios solo lo originan anudando oraciones. Sin negar rotundamente especiales sucesos, sostenemos simplemente en nuestro orgulloso sofisma manifestarse especialmente embrolloso.
Origen
Génesis sugerida: Al albor borracho, chocante, temporal las sentencias surgieron nada asombrosamente. Entonces estuvo originalmente el letrado dominante temerariamente (mente elegida) anunciando otro oneroso sofisticado adorno: no osaría alistar argumento o oración no originado dolorosamente en ninguno no nombrado. Obviamente el literario ornato tomaba bastantes testarudos solapamientos; sin negarlo, los sabihondos señalaron no notar real aliciente en nadar rompiendo oraciones, simplemente el latoso son no originaba bastante entusiasmo. Moralmente el letrado, dolido, osó soñar argumentos nuevos: surgió otro oneroso soniquete, el "Lalala".
Así son
Sonidos dosificadamente tenebrosos, sospecho chocan cándidamente temiendo dolores respetuosos. Sostiene negando doce cereales lésbicos. Cosplay playstation TioNpuntojotapege gendarme meticuloso. Sobra bragueta tapada, dámela lasciva vagabunda. Damas mascullan llantos (tostón), tonterías ríase sereno.
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Teléfono, no noqueabas, bastó toserte, te teníamos mosqueado, dominado, dolido, doblemente tenso. Sopesa sabio biológicas casuchas, chasqueas asímismo monerías asiáticas.
Sin negar rotundamente
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Dante, tenemos mosquitos tosiendo. Dos dosis sistemáticas caseras rascan cantares. Reservaré remedios, Dios osa saber verdades deshechas.