Piernas abiertas
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PELIGRO: Este artículo tiene un alto contenido sexual
Leerlo sin tomar precauciones aumenta el riesgo de contraer |
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Piernas abiertas es un mensaje subliminal que envían las mujeres a los hombres cuando tienen apetencia de sepso.
¿Por qué abrir las piernas?
Esta pregunta, que surgió en las ramas intelectuales de la monarquía danesa, se refiere a la razón de utilizar tan básica forma de expresión, pudiendo utilizar otros medios menos sugerentes. La explicación es la siguiente:
A lo largo de la historia se ha demostrado que el hombre es imbécil. Por ello existen los batidos de fresa para los mamones que creen que es más saludable que una cerveza, el pan integral para los capullos que piensan que engorda menos que el normal, y los coches diésel para los desgraciados a los que engañan haciéndoles creer que el coche les consumirá menos gasolina.
Las mujeres son más listas que eso. Saben que el mensaje debe llegar directo al cerebro sin pasar por el encéfalo, eso supondría un esfuerzo para los hombres en el que podría perderse la información por el camino. ¿Cuál fue su decisión? Abrir las piernas, enseñar las carnes, lo que hay, y dejar que la neurona de los hombres haga el resto. Así de simple. No tiene más ciencia que eso.
Y los hombres siguen cayendo como tontos, cada vez que una mujer les pide algo, sólo debe usar esa técnica y ya puede tener un novio pobre, que el pobre hombre se empeñará hasta los ojos por comprarle esa mierda de chalé que le gusta a ella. Aunque el billete más grande que haya visto en su vida sea del Monopoly.
Complementos a abrir las piernas
Otro tipo de señal. Aunque valdría por sí sola, acompañada de una buena apertura de patas refuerza aún más el mensaje y ablanda el cerebelo masculino hasta límites insospechados
- Escote descomunal: Para casos en los que se requiere el máximo de atención y el mínimo de parpadeos. La mujer tiene unos 5 - 6 segundos para exponer su queja o petición antes de que el pervertido de su novio empiece a babearle el entreteto. Tras esto se le recalientan las córneas y la probabilidad de que afloje la cartera ante una joyería es del 100 %.
- Maquillaje nancy: lo que implica echarse potingues y rimmel, deformándose las facciones, y con tan alto poder corrosivo que aplicar estos elementos sobre la cara de Jar-Jar Binks la dejaría más lisa que el culito de un bebé. Se trata de situaciones en las que habrá un careo inminente, y posiblemente la mujer trate de incrustarle la lengua en el paladar al pobre diablo de turno. Pasearse junto a estos adefesios hace bajar el caché de los hombres y provoca carcajadas en sus reuniones de amigos, por tanto se considera una maniobra agresiva. Para leonas.
- Minifalda con tanga: El manual dice que el tanga debe sobresalir al menos 5 cm por la parte trasera del cuerpo femenino, para causar el efecto deseado. La consecuencia es similar a la de un imán con un tornillo: en un radio de 10 metros los ojos de los chicos no podrán mirar en ninguna otra dirección.
- Minifalda sin tanga: Ideal para una cena romántica con posibilidad de frotarse mutuamente las extremidades inferiores. Pero por favor, depílate, ¿alguna vez viste a un hombre acariciar sentado una langosta con el dedo gordo de su pie?