Guerra cultural
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Guerra cultural es el Reality Show Ideológico™ donde yo, el prole que gana el salario mínimo y no me alcanza ni para rentar un cuarto con baño compartido, sirvo de cojín ejemplificador con funda de progres para que ambos bandos justifiquen 3.4 billones de dólares anuales en leyes, presupuestos y redistribución de impuestos mientras yo solo intento que no me corten el nepe por falta de pago. Tengo que ser testigo de dos grupos estúpidos peleando por cosas importantes de forma estúpida y no quejarme.
Los progres me señalan con su dedo de resina biodegradable insistiéndome que lo importante es usar 47 pronombres inclusivos en el Código Laboral: Estimadx gerentx, mi cuerpx trabajadorx necesita un incrementx salarialx. Los fachas con colonia barata y escaños asegurados me tachan de comunista degenerado que quiere destruir la familia tradicional cuando les digo que no tengo maldito dinero ni para una santa cama y menos para tener hijos. Yo solo quería que me pagaran a tiempo, pero resulta que mi mera existencia es un caso de estudio para la ONU y una amenaza a la soberanía nacional para el Ministerio de Defensa.
Características
Alimentación
Digo que no me alcanza para comer, pero opino que el arroz con huevo es un manjar de dioses si le echas suficiente sal.
- Los Progres: Impulsan una iniciativa de alimentación vegana ancestral en comedores comunitarios (costo: 2,000 millones de pesos, cero para mi arroz). Su influencer vegano más famoso con 2.3M seguidores lanzó superalimentos ancestrales a $89 el frasco, mientras su último post desde el hospital decía que la salud no tiene precio.
- Los Fachas: Me llaman roto comunista que no sabe administrar y proponen quitar subsidios porque la gente gasta en cerveza. El diputado Fernández de la Cruz gastó $4,800 mensuales en dietas parlamentarias de tradición ibérica mientras votaba recortar el 30% en ayuda alimentaria.
- Quién gana: Las corporaciones que venden proteína de insecto premium a $12.99/100g y las cerveceras que patrocinan informes sobre responsabilidad ciudadana. La empresa de snacks de larvas aumentó sus ingresos un 340% en 2023. Yo pierdo porque mi cena es ahora un acto político y mi desayuno es evidencia de inmadurez fiscal ante el FMI.
Vivienda
Admito que vivo con mis padres a los 32 años porque la renta cuesta tres veces mi hígado.
- Los Progres: Tildan a mi padre de patriarca opresor y exigen talleres obligatorios de desvinculación por $500. Sus activistas terminan volviendo a casa de sus papás porque el empoderamiento no paga el depósito. El colectivo por la autonomía juvenil obtuvo $1.2 millones en subvenciones, pero su directora vive en el ático de sus padres en la zona financiera.
- Los Fachas: Me celebran como defensor de la familia tradicional, ignorando que mi padre me cobra $300 de renta, me trata como inquilino moroso y me deja el papel higiénico de una sola hoja por ahorro intergeneracional. La asociación de valores familiares facturó $890,000 en conferencias mientras su presidente embargaba la casa de su madre.
- Quién gana: Los bancos que venden paquetes de vivienda patriótica con tasas del 28% y los terapeutas de género que cobran $3,000 la hora para explicarme por qué odio el pasillo de mi casa. Santander lanzó la hipoteca RaícesSeguras con TAE del 31.2% específicamente para jóvenes que valoran la tradición.
Aborto
Opino que el aborto debería ser legal porque otra cría más en este sistema sería como echarle gasolina a un incendio forestal.
- Los Progres: Me putean porque no uso lenguaje académico sobre cuerpos gestantes y me excluyen por no haber leído el último PDF de la universidad de moda. La ONG por los derechos reproductivos recibió $8.7 millones en donaciones pero su CEO gana $14,000 mensuales y nunca ha pisado un centro de salud público.
- Los Fachas: Dicen que si no tengo dinero es porque no quiero, y presentan leyes para que los pobres no se reproduzcan sin aval bancario, mientras ellos tienen 12 hijos mantenidos con mis impuestos. El diputado García Mesa tiene 8 hijos en colegios privados ($45,000/año cada uno) pagados con su dieta de $5,000/mes.
- Quién gana: Los bufetes de abogados que litigan ambos lados y los Think Tanks que reciben fondos para proteger la vida o defender la elección desde sus oficinas con aire acondicionado. La firma de litigios ideológicos facturó $23 millones en 2022 defendiendo ambas posturas simultáneamente. Yo pierdo porque mi opinión es ahora jurisprudencia que no me paga royalties.
Memoria histórica
Necesito exhumar a mi abuelo para reclamar una herencia mínima que me ayude con la luz.
- Los Progres: Exigen museos digitales y becas para historiadores que escriben sobre mi dolor en inglés desde becas Fulbright. Nunca envían un forense, pero sí muchos tuits con corazones morados. El proyecto de memoria en el metaverso recibió $4.5 millones pero el servidor está en Luxemburgo y requiere NFT para entrar.
- Los Fachas: Lo niegan todo y dicen que no hay que remover el pasado, mientras celebran a tipos con peluca de hace 500 años. Reducen el presupuesto de exhumaciones porque hay que mirar al futuro (donde ellos siguen mandando). El fondo de reconciliación pasó de $2 millones a $76,000 en 2023 mientras el presupuesto para conmemoraciones nacionales subió un 340%.
- Quién gana: Las constructoras que compran tierras sin historial conflictivo y el historiador que hizo su tesis doctoral con mis lágrimas. La constructora de desarrollo limpio adquirió 12km² de terreno libre de trauma histórico a $3/m² y lo revendió a $890/m².
Eutanasia
Me detectaron un tumor y el seguro solo cubre una palmadita en la espalda y una bendición.
- Los Progres: Aplauden mi derecho a decidir y proponen una ley con 15 trámites para que me apliquen la eutanasia con estética minimalista. Es su solución favorita para la pobreza: el reciclaje humano. El centro de eutanasia boutique cobra $7,800 por el paquete básico y ofrece streaming en 4K para que tus seguidores vean tu transición consciente.
- Los Fachas: Gritan que la vida es un regalo divino (aunque la mía parezca un regalo de broma) y me dan un folleto de ten fe mientras se van a Suiza para su tratamiento de células madre. El mismo legislador que bloqueó la eutanasia gastó $89,000 en tratamiento antiedad en la clínica suiza más cara.
- Quién gana: Las farmacéuticas que venden el veneno final a precio de tratamiento de lujo y los curas que cobran $300 por la extremaunción express. La empresa de medicación terminal aumentó sus ganancias un 1,200% desde que legalizaron la eutanasia en 3 países. Yo pierdo porque mi muerte es más rentable que mi vida.
Multiculturalismo
Mi barrio se llenó de restaurantes de fusión étnica y ahora mi renta subió un 300%.
- Los Progres: Celebran la diversidad cultural del barrio mientras compran un café de $7 en el local que antes era mi panadería de confianza. Organizan festivales donde la entrada cuesta mi sueldo semanal. La cadena de cafés étnicos factura $12,000/día vendiendo café de comercio justo a $6.50 la taza mientras paga $2.10/hora a los recolectores.
- Los Fachas: Celebran que los inversores extranjeros traen prosperidad (a sus bolsillos), mientras en Twitter piden muros más altos. La inmobiliaria de valores patrios promueve el barrio étnico con rentas de $1,800/m² mientras su presidente tuitea sobre recuperar nuestras calles del invasor.
- Quién gana: El casero convertido en emprendedor multicultural que ahora vende tacos veganos a $20. Mi antiguo casero, don Paco, ahora tiene 8 locales gourmet y factura $45,000/mes. Yo pierdo porque ahora vivo a dos horas de mi trabajo para que un influencer pueda sacarse una foto con estética de barrio.
Idioma
Los progres quieren que diga compañere cuando pido un aumento, pero mi jefe me responde en spanglish corporativo porque así hablan los ganadores.
- Los Progres: Se pelean por la e, la x o el arroba en el Código Laboral. Si no uso lenguaje inclusivo, mi despido está justificado por falta de sensibilidad. El diccionario inclusivo más famoso tiene 834,000 entradas y su app premium cuesta $12.99/mes. Su CEO es un hombre blanco de 53 años que gana $340,000/año.
- Los Fachas: Me obligan a jurar bandera en latín macarrónico para demostrar herencia hispana, pero el traductor cobra más que mi quincena. El instituto de lengua patria recibió $890,000 en subvenciones para defender el castellano pero su director publica en inglés en LinkedIn.
- Quién gana: Las apps de idiomas que venden mi acento como heritage dataset y los consultores de inclusión que cobran $2,500 por capacitaciones que nadie entiende. La app de idiomas más popular vendió datos de 23 millones de usuarios hispanohablantes a la corporación tecnológica por $89M. El idioma oficial de mi precariedad es el hambre: todos me entienden, nadie me escucha.
Cine
Filmarn mi desalojo con cámara en mano para un documental sobre resistencias urbanas.
- Los Progres: Ganan un Oscar por el documental. Me dieron un cameo donde salgo borrado por un filtro de privacidad. No me pagaron, pero me dieron visibilidad. El documental de resistencia ganó el Oscar 2023, recaudó $23M, y yo recibí $150 por derechos de imagen parciales. El director ahora tiene un contrato con Netflix de $12M.
- Los Fachas: Hacen una película paralela donde mi desalojo es una cruzada contra la inmoralidad del alquiler y me convierten en el villano que no quería emprender. El film patriótico costó $4.5M, recaudó $340,000 , pero recibió $890,000 en ayuda a la cultura patriótica. Soy el antagonista progre del cartel.
- Quién gana: Netflix y los productores que ganan premios con mi tragedia. Netflix aumentó sus suscriptores 12% con su sección de cine social. Sus ganancias con contenido progresista fueron $4.3B en 2023 . Yo pierdo porque no puedo pagar la suscripción para ver la película donde salgo llorando. Dato: La taquilla de cine progre cayó 34% en 2024, mientras los remakes patrióticos de guerra subieron un 67%. Ahora ambos lados me usan como ejemplo de por qué el otro bando pierde contacto con la realidad.
Tecnología
Me regalaron un smartphone reciclado con una app de meditación sobre privilegio consciente.
- Los Progres: La app se cierra cada vez que mi saldo llega a cero. Me dicen que medite sobre mi resiliencia prole. La app de meditación corporativa tiene 2.3M descargas, 4.2 estrellas, y su última actualización arregló el bug que permitía usarla sin conexión a datos (y sin ver anuncios de préstamos).
- Los Fachas: Me bloquean Wikipedia por ser contenido marxista, pero me venden una enciclopedia patria en 48 pagos con un interés que me dejará sin nietos. El router de internet patriótico censura 847 sitios progres pero permite 2,304 sitios de apuestas y 89 de conocimiento tradicional que venden curas milagro.
- Quién gana: Silicon Valley, que ahora tiene mis datos biométricos para saber exactamente cuánta hambre tengo antes de mostrarme un anuncio de préstamos rápidos. La corporación tecnológica acaba de patentar un algoritmo que detecta niveles de cortisol para mostrar anuncios de soluciones financieras en tiempo real. El contrato con el banco de préstamos rápidos les dejó $340M en 2023.
Moda
Mi ropa vieja y rota es ahora la tendencia post-apocalíptica en las pasarelas de París.
- Los Progres: Diseñan una línea de ropa pro chic que cuesta mi sueldo anual. Me dicen que es para visibilizar la lucha de clases. La marca de moda ética vende jeans rotos a $890 , hechos por obreres en Bangladesh a $0.12/hora . Su lema: lleva la revolución con tu tarjeta Platinum.
- Los Fachas: Lanzan la colección hecha en patria con la misma camisa que yo uso, pero me demandan por plagio cultural cuando intento vender la mía en un mercado de pulgas. La marca de ropa patriótica vende camisetas proletarias a $120 hechas en Vietnam, con etiquetas que dicen hecho en casa en español, pero cosidas en Taiwán.
- Quién gana: Las marcas de lujo que revenden mi pobreza. Yo pierdo porque mis huecos en los calcetines son tendencia, pero los míos siguen oliendo a pies. El conglomerado de lujo aumentó sus ganancias 23% con su línea de pobreza auténtica inspirada en barrios deprimidos.
Educación
Me inscribí en un posgrado de estudios de la nada para ver si así conseguía un trabajo mejor.
- Los Progres: Me cobran la matrícula con mi propia tesis como caso práctico. El director del posgrado vive en una mansión pero escribe sobre la ética del decrecimiento. La universidad ecológica facturó $45M en matrículas de posgrados en estudios del silencio, meditación crítica y narrativas del vacío. Su rector tiene 3 casas y 7 autos eléctricos.
- Los Fachas: Crean universidades donde enseñan que si soy pobre es porque no leí suficiente a Ayn Rand. El libro de texto cuesta más que mi despensa. La universidad de la tradición vende el pack liberal por $890 : incluye el manifiesto capitalista y acceso a un webinar con un youtuber que gana $34,000/mes diciendo que el dinero no importa.
- Quién gana: Las universidades privadas y los vendedores de cursos de mindset de tiburón. El mercado de cursos online para emprendedores facturó $234M en 2023 . Yo pierdo porque mi maestría solo sirve para decorar la pared de mi cuarto húmedo.
Espiritualidad
Busco consuelo espiritual porque ya no aguanto más.
- Los Progres: Me invitan a un retiro de ayahuasca para despertar mi conciencia. La ceremonia cuesta $3,400 , lo mismo que mi funeral. El chamán es un tipo de Portland que se cambió el nombre a águila de luz. El centro de medicina ancestral facturó $12M en 2023 con retiros dirigidos por un exasesor fiscal de Deloitte que ahora se hace llamar balám jaguar.
- Los Fachas: Me ofrecen un rosario digital con NFTs de santos. El pastor me dice que si doy el diezmo con tarjeta de crédito, Dios me multiplicará los likes. La iglesia digital vende indulgencias 2.0 por $89.99 , acepta criptomonedas y su pastor tiene un jet compartido con otras 3 iglesias patrióticas.
- Quién gana: El chamán de Portland y el pastor con jet privado. Yo pierdo porque mi alma tiene valor de mercado, pero mi cuenta sigue en números rojos. El mercado de espiritualidad consciente facturó $4.5B en 2023.
Hegemonía
Según el historiador italiano Steven Forti —que estudió mi caso en su tesis sobre el proletariado como impedimento en la era del poscapitalismo (Universidad de Bolonia, 2023, 834 páginas, $89 en Amazon)—, estas batallas son estrategias de distracción. Su investigación demuestra que cada vez que se debate un tema cultural, los presupuestos en sanidad pública bajan un promedio del 12% y los de concienciación ciudadana suben un 67% .
Mi imagen es usada por tipos como Steve Bannon (ese coprófago con cara de sidra fermentada): para unos soy el blanco oprimido que necesita una revolución cultural, para otros soy la víctima del marxismo cultural que necesita una bandera más grande. En ambos casos, mi cuenta bancaria sigue teniendo el mismo saldo que mi esperanza de vida: cero. Bannon ganó $23M en 2022 con documentales donde soy el héroe olvidado. Sus seguidores me donaron $12,000 en total; yo recibí $0 porque fondos administrativos.
El objetivo es la hegemonía, un término que Antonio Gramsci definió mientras estaba preso por ser feo, y que ahora usan para justificar por qué mi existencia requiere deconstrucción urgente. Recordemos: cuando Gramsci estaba en prisión en 1929, no hablaba de género fluido, hablaba de que los obreros no tenían comida. Pero eso no vende cursos de $2,500 . Yo solo quiero que me dejen en paz con mi derecho a llorar en el baño del tren, pero ni eso puedo porque el baño ahora tiene un sensor de movimiento que te echa si no detecta actividad productiva en 3 minutos. La empresa de sanitarios inteligentes instaló 4,300 sensores en baños públicos, facturó $12M , y ahora vende los datos a empresas de bienestar laboral que te despiden por ineficiencias fisiológicas.