Caballeros Medievales en la ciudad de
Constantinopla que se alistaron en las malditas
Cruzadas a punto de ir a
Tierra Santa en busca de
Oro para el
Papa. Así como ellos, millones de Caballeros de todos los Reinos Europeos abandonaron a sus pobres y humildes familias campestres y se fueron a morir en vano ante los malditos terroristas del
Califato Almohada. Lamentablemente estos tres tipejos murieron matándose entre ellos. El primero murió heroicamente defendiendo la ciudad santa de Jerusalén a favor de las tropas terroristas Almohadas del Sultan
Saladino, el segundo lucho por el rey
Federico Barbarroja y de los siete reinos del Sacro Imperio Romano Germánico y el tercero termino robándose todo el Oro de tierra santa y cuando llego a los Estados Pontificios termino convirtiéndose en
Papa.