Alfonso XII de España
Rey Pinturero de España |
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Reinado o lo que sea | Lo bueno, si breve, dos veces bueno. |
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Predecesor | Sucesor |
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Nombre de verdad | Fonsi |
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Nacimiento Defunción | Madrid El Pardo |
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Casa |
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Estado actual | Se finí. |
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Familia | Su madre Isabelota, su padre, su verdadero padre, sus hijos y sus hijos no reconocidos. |
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Relaciones | Pinturero y rey como era, la metía donde quería. |
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Enemigos | ¿Pero quién puede ser enemigo de un figurín así?. |
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Alfonso XII de España, apodado «el Puigmoltejo» o «el de los tristes desatinos» (Madrid, 28 de noviembre de 1857-El Pardo, 25 de noviembre de 1885), fue un muy pinturero rey de España entre 1874 y 1885.
Hijo de la reina Isabel II y vete a saber de quién, el inicio de su reinado puso término a la Primera República y dio paso al período conocido como Restauración, aunque la verdad que fue una restauración así como la del Cristo de Borja. Tras su muerte prematura a los veintisiete años, víctima de deshidratación por masturbarse demasiado la tuberculosis, fue sucedido en el trono por su estúpido hijo póstumo, Alfonso XIII, cuya minoría de edad estuvo encabezada por la regencia de su madre, una reina bastante poco agraciada.
Su Real Vida
Primeros años
Alfonso nació en el Palacio Real de Madrid, hijo de Isabel II y de padre desconocido, ya que el rey consorte, Francisco de Asís de Borbón, era impotente y más maricón que la peineta de la Martirio. Y menos mal oye, porque los reyes eran dobles primos y hubiera salido tonto perdido. Que no es que fuera especialmente listo, de todas maneras. Los historiadores no tienen ni puta idea de quién era su padre, pero suelen cargarle el muerto a un tal Puigmoltó, si bien recientemente hay unos tipos, que dicen que son de la casa de Clonard, que afirman que este Alfonso era un Clonard. Como la oveja Dolly, debe ser.
El caso es que según nació recibió el título e príncipe de Asturias, muy útil para otorgar premios, que tenía cuatro hermanas, cada una de un padre para que hubiera más variedad, y que sus preceptores fueron Camilo Sesto y un obispo lúbrico designado por el Papa Pío IX (de triste recuerdo).
Derrocamiento de su madre
Cuando era solo un niño, harto el pueblo de que su madre se dedicara únicamente a fornicar y se desentendiera del Gobierno del país, la derrocan y tienen que salir por piernas. Así que tanto Isabel como su esposo, Francisco de Asís alias Paquita, se instalaron en París donde siguieron viendo a hombres, cada uno por su cuenta.
La salida a Europa del joven Alfonso supuso una experiencia inestimable. Fue el primer príncipe de Asturias que se formó en centros educativos y militares extranjeros tales como el colegio Stalinas o el colegio Hogwarts, en el que fue introducido por el conde de Morphy, quien le enseñó sus severas normas (más conocidas como la Ley de Morphy).
De la correspondencia de Alfonso con su madre durante todas sus estancias en los distintos colegios y academias, se pone de manifiesto la relativa estrechez económica en que se movía la familia real en esos años, solo disponiendo el príncipe de tres asistentes personales, dónde vamos a parar.
La vuelta a España
Nada que ver con el ciclismo. Su madre, no sabiendo bien qué regalarle para festejar su puesta en largo, abdicó en él sus derechos dinásticos, con lo que Alfonsito pasó a ser considerado por los monárquicos como el legítimo rey de España.
Alfonsito, puestos a agradar, firma un manifiesto en el que se presenta a sí mismo a los españoles como un príncipe católico, español, constitucionalista, liberal, y deseoso de servir a la nación, que parecía que más que querer ser rey estaba buscando un puesto de camarero.
Tras un pronunciamiento militar (lo típico) sus partidarios le llevan de vuelta a España. Allí, junto con sus fieles lugartenientes Antonio Cánovas del Castillo y Práxedes Mateo Sagasta instaura un régimen que simula ser democrático a través de la alternancia en el poder de dos partidos en apariencia antagónicos pero que en realidad tienen la misma ideología y programas perfectamente intercambiables. Y al igual que cada vez que esto ha sucedido en la historia del país, conllevó una época de paz y prosperidad. Por esto es que al rey le llamaron "El Pacificador", porque el que se movía no salía en la foto, que ya estaba bien de carlismo y de gilipolleces.
Al final de su reinado se desató una epidemia de cólera en Valencia que se fue extendiendo hacia el interior del país. Cuando la enfermedad llegó a Aranjuez, queriendo hacerse el supermán, el rey partió hacia esta ciudad sin permiso del Gobierno, para visitar a los afectados en los hospitales y repartir ayudas. Cánovas ordenó traerle de vuelta a colleja limpia, pero cuando entró en Madrid el pueblo le vitoreó por su hermoso gesto.
Poco tiempo después murió de una enfermedad infecciosa, el muy lerdo.
Sus amoríos
Salió a su madre en lo follarín y se tiraba a todo lo que se movía. Su primer matrimonio, siguiendo la tradición borbónica, fue con su prima María de las Mercedes de Orleans, con quien solo se casó para putear a su vieja, que no veía con buenos ojos el matrimonio. Pero le salió enfermiza y se murió, durando menos que un pedo en la mano.
Posteriormente se casó en segundas nupcias con María Cristina de Habsburgo-Lorena, mujer fea y dominante de quien huía casi todo el tiempo. Tuvo tres hijos fruto de su segundo matrimonio, entre ellos el futuro Alfonso XIII a quien tuvo la suerte de no llegar a conocer, pues nació después de que él muriera.
Además de su prole legítima tuvo dos hijos con una actriz, que salieron más espabilados que los oficiales.
En la ficción
Se han hecho tres lacrimógenas películas sobre su vida:
- ¿Dónde vas, Alfonso XII?. Culmina con la muerte de su primera mujer y con la consiguiente tristeza del rey
que se consuela yéndose de putas. - ¿Dónde vas, triste de ti?. Secuela de la anterior en la que Alfonso XII conoce a Batman y juntos combaten misteriosos crímenes en el extrarradio de Madrid.
- El Pacificador. Secuela con George Clooney en el papel de Alfonso XII.