Incinoticias:Jesús y Moisés juegan un partido de golf
ATENCIÓN: Este artículo puede poner su alma en peligro Cada vez que alguien lo lee, Dios mata un gatito. |
El partido definitivo para conocer al favorito de Dios
28 de octubre del 2007 — Ciudad: Coruvigo; Gondwana — Informa: Ramón Pérez Osorio
El partido comenzó como una de las ya varias competencias entre estos dos magnates del negocio de la religión. Esta vez, Jesús fue demasiado lejos al apostar su monopolio, oferta que Moisés no pudo rechazar.
A estos dos competidores en el deporte más aburrido emocionante del mundo se les sumo un anciano que aún no pudo ser identificado.
Al comenzar el partido los participantes llamaron a sus cadies, el hijo de Dios llamó a San Pedro, quien al parecer habría olvidado las llaves de su auto en el cielo y debió tomarse un micro para llegar. Moisés llamó a Aarón, que aprovechó la oportunidad para alejarse de Miriam, que había preparado kniches. El viejo no identificado, llamó a un tal Gabriel de apellido desconocido.
El partido se llenó de hazañas increíble, y puede ser recordado como El Partido del Siglo™. Se debe comentar, por ejemplo, la gran movida de Jesús en el hoyo 7, cuando su pelota cayó al estanque. El crucificado, caminó por encima de las aguas del estanque y elevó la bola por sobre éste. Por desgracia, su cadie al tratar de seguirlo se cayó al agua, causando la risa del publico. Otra jugada memorable la hizo el líder de los hebreos en el hoyo 4, justo cuando la bola estaba por caer a 16 metros del hoyo, millones de moscas salieron de la nada y la empujaron hacia el punto para Moisés.
Al llegar al hoyo 18, los jugadores estaban empatados, y el público (¿sabía usted que el golf tiene publico?) fanatizado por los favoritos de Dios, el tiro era decisivo. Antes de tirar, Jesús le pidió a su cadie el palo siete, pero Pedro se negó alegando que se lo vendió a Judas. Finalmente Jesús se conformó con una serpiente que convirtió en madera y tiró. La pelota surcó el aire y se atoró en la garganta de uno de los jueces hasta matarlo. Luego, Jesús se dirigió al cadáver quien se levantó y comenzó a andar y vomitó la bola a 2 cm del hoyo.
En su turno, Moisés tiró con fuerza y la bola cayó en el estanque nuevamente. Moisés se acercó al agua y le pidió a Aarón: "dame el palo para agua". En un movimiento nunca antes visto, golpeó contra la tierra y las aguas del estanque se abrieron para que el pasara cómodamente y golpeara la bola hasta el hoyo, ganándose el aplauso del publico.
El último tiro correspondió al viejito no identificado. El hombre, sin vacilar golpeó la pelota que voló casi 20 metros y chocó contra una gaviota que cayó al montículo. Ahí, su cadáver fue devorado por un león hambriento que intentó atacar a uno de los jueces, pero por suerte cayó un rayo justo encima del mismo. Al explotar el león, la pelota en su interior salió disparada seguida de un arco iris y cayó justo en el hoyo. Todo el público aplaudía al viejito triunfante.
Luego del partido, tuve una entrevista exclusiva con una de los perdedores, el Sr. Cristo. Al preguntarle que se siente ser derrotado por un simple viejito contestó:
-"Que viejito ni que nada, cada vez que juego con mis amigos papá viene y se hace el grande"