Obelisco de Buenos Aires
Coste | Un montón |
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Localización | En la Calle Corrientes |
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Propietario | Bs Ass |
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Uso | Mirar minas. |
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Coordenadas | Buscala en google, so vago. |
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Inicio | Un marzo lluvioso |
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Estimación de finalización | Dos meses después |
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Altura de la última planta | 67,5 m |
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¿Hay ascensores? | NO |
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Ingeniero estructural | Alberto Prebisch |
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Contratista | Siemens |
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El Obelisco de Buenos Aires es un monumento considerado un ícono para Buenos Alientos. Construido por cumplirse 400 años felices de la ciudad. Es un lugar para compartir una tarde amistosa con los piqueteros y demases en el país. Por este motivo es considerada como la estatua de la libertad argentina mas o menos.
Historia
En el solar donde hoy se encuentra el Obelisco estaba emplazada la iglesia dedicada a Nicolás de Bari, un chabón que se decidió demoler para la construcción de la Avenida 9 de Julio donde siempre jode el tránsito. En la torre de esa iglesia fue izada oficialmente por primera vez en Buenos Aires, en la banderita de Belgrano hecha con sus manos en un día libre. Dicha circunstancia se recuerda en una de las firmas/inscripciones del obelisco.
Desarrollo
Se decía que los arcaicos radicales de las cámaras presentaría un proyecto para que en ese lugar se erigiera el monumento a Hipolito Yrigoyen que tuvo el honor de iniciar la tradición de los golpes de estado. Pero, el 3 de febrero de 1936, a 400 años del suceso de unos españoles que se fueron de parranda al fundar la ciudad, el intendente de su época que debe estar hecho polvo ahora, nombrado en la presidencia de Agustín Pedro Justo, firmó un decreto que generaría quilombo, para la ejecución de una obra que será más grande que la mierda, que señale al pueblo de la República la verdadera importancia de aquella fecha para ir a la camita. Que no existe en la ciudad ningún monumento que simbolice el homenaje de la Capital de la Nación entera. Se le encargó entonces a un arquitecto pasado de aspirinas Alberto Prebisch la construcción de un obelisco que se realizó en solo sesenta días: la obra comenzó el 20 de marzo de 1936 y tiraron balas/papelitos el 23 de mayo de ese año.
Alberto Prebisch fue uno de los principales arquitectos del modernismo argentino y autor también del vecino Gran Rex (teatro donde viejos/viejas ganan pasta cuando hay un evento que valga la pena). Con respecto al motivo de la forma del monumento Prebisch dijo:
Se adoptó esta simple y honesto pico de los buenos porque es la forma de los obeliscos tradicionales... Se le llamó Obelisco porque me dió flojera. Yo reivindico para mi el derecho de llamarle de un modo más copado y genérico «Monumento».
La construcción estuvo a cargo del consorcio (entiéndanse como una asociación económica para los que no entiendan un pepino) alemán G.E.O.P.E. - Gano Economía O Pego Estados. El tiempo de laburo de este objeto extraño finalizó en el tiempo récord de 31 días, para la que empleó a 157 gorilas. Para hacer bien las cosas como Dios manda, se utilizó un cemento Incor de endurecimiento rápido que parece leche de vaca. Y dan ganas de beberlo. El monumento se fue construyendo por partes para facilitar arrojar el hormigón sin tener problemas que invada la ciudad una colonia de hormigas. Para su construcción, que costó doscientas lucas (200.000, viteh) se utilizaron cemento (algo obvio) y 1360 m² de piedra blanca (nada que ver con polvo blanco, che) de la capital del cuarteto y el fernet.
Teniendo cerquita la línea B de subterráneos aumentó a la velocidad de un torpedo la construcción del monumento, pues facilitó la colocación de los cimientos sobre los túneles formándose la base de hormigón . La roca que aparece en el techo del túnel del subte permite el paso del pedazo de piedra de fundación del obelisco. Durante la obra, un obrero italiano estaba jugando al gallito ciego en su descanso, desde que se puso las vendas nadie lo vio más. Tal vez se fue a hacer una picada entre amigos, quién sabe.
El 20 de febrero de 1938, otro milico se sentó en el sillón de Rivadavia, y designó como nuevo intendente de la ciudad a Arturo Goyeneche.
En la noche del 20 o al 21 de junio de 1938 a tal hora que no sabemos fue porque no tenemos una máquina del tiempo para corraborarlo. Volviendo al tema central, al día siguiente de haberse realizado en el lugar un acto público con la presencia del presidente Ortiz, se produjeron algunos desprendimientos de piedra para que los niños, abanderados de colegios primarios y secundarios de la ciudad durante el acto jugaran a la rayuela. Para terminar con el peligro de que nuevas placas de piedra pudiesen imitar la torre de Pisa (y eso no es muy original que digamos), fueron reemplazadas por revoque de cemento en el que se imitó el dibujo de las lajas, que fue pintado con 620 litros de látex. Al quitarse las lajas no se tuvo en cuenta que se retiró una leyenda que decía «Alberto Prebisch fue su arquitecto boludo».
Y después de estar listo
Inmediatamente después de su construcción, el obelisco se tornó en centro de las burlas y picnics de los porteños. Tres años después de su inauguración, en junio de 1939, el Concejo Deliberante sancionó la demolición del Obelisco por Ordenanza Nº 10.251, por mayoría de votos, debido a razones económicas, que no combina el color con el lugar y de seguridad pública. Pero la ordenanza fue vetada por el intendente Goyeneche, y lo dejaron así nomas.
La estructura del mismo, basada en la estética racionalista, generó más de una polémica entre los profetas de Marx de la ciudad y los sectores más conservadores.
El Obelisco es frecuentemente utilizado como para prender las bengalas en navidad, las que abarcan también las avenidas 9 de julio y Corrientes que lo rodean, hecho similar al que ocurre en Plaza de Mayo (aunque ahí aparecen los amiguitos de Krishty).
Fue escenario de numerosas anécdotas y hechos locos. En 1939 un pibe colocó en la cima de la estructura una bandera argentina para sentirse el rey del mundo. Pocos meses después, un joven amenazó con tirarse al piso si no le daban el trabajo y que su pareja le de un beso; en caso contrario volaría como Superman. En varias oportunidades se aprovechó la enorme estructura para cosas cursis: en 1973 se lo decoró como árbol de Navidad. En 1975 se colocó un anillo giratorio en el cuarto inferior de su altura, con las inscripciones «El silencio es salud» y «Mantenga limpia Buenos Aires» (En otras palabras, no queremos bosta).
En 1987 se lo rodeó con una reja para impedir las inscripciones en sus paredes frases filosóficas y debatibles como Puto el ke lo lee. En 1998, activistas de Greenpeace violaron el acceso y desplegaron desde la punta un cartel con la leyenda «Salven el clima carajo».
Entre las muchas intervenciones, el 1° de diciembre de 2005 para evitar que los turistas le hicieran chistes malos que pegan a los más pequeños llenos de connotación sexual, le prestaron un preservativo para que calme el problema. No tuvo resultado alguno.
El 20 de septiembre de 2007, conmemorando los 150 años de las relaciones bilaterales entre Argentina y Alemania aunque no lo banquemos por eliminarnos en la final del Mundial... Dos veces. Ese mismo día, amaneció cubierto con una tela de 60 m² con los colores de las banderas de esos países. Además se ajustó un nuevo equipo de luces que fue donado por la embajada de Alemania y empresas de ese país (Allianz, Osram y , Schössling), entre otros más que apoyaron la celebración.
En 2015, un año antes del inicio de la primavera, se sentía que era la temporada del cambio. El día después, el primer cambio más notorio que se notó fue que un mago desapareció el pico del Obelisco para usarlo como exhibición de arte ilusionista. ¡Es mágico!
Descripción
Su altura es de 67 metros, una altura adecuada para ver la ciudad en su esplendor, siempre y cuando no aparezca un aerolineas tapando el paisaje.
Tiene una sola puerta al lado oeste, y estás jodido si quieres subir a lo más alto. Para eso debes decir adios a la Coca-Cola, adiós a la costillita de cuadril y adiós a ver tele pesado.
La punta es roma; mide 40 cm y culmina en un pararrayos que evita tener los pelos parados de punta, cuyos cables corren por el interior del monumento. Existe una caja de hierro guarda que según los conspiranoicos guarda una foto del jefe de máquinas de la construcción, y una carta destinada a los malos que lo demuelan.
Publicidad
Para poder promocionar el obelisco y la albiceleste a ganar un mundial, la compañía de servicios móviles que cuesta un ojo de la cara; Movistar realizó el siguiente comercial en el cual recopilamos ahí.
Buenas noches damas y caballeros...
bienvenidos a esta ceremonia de apertura
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Sin duda alguna, un reflejo de la sociedad argentina es este mensaje.
Galería
Merkel estuvo aquí.
Véase también
- Arquitectura
- Transporte Argentino
- Cualquier cosa relacionada con Argentina.
Referencias
- ↑ Sirve para escribir exámenes y tiene muchas funcionalidades.
- ↑ Comida que hace babear a media nación.
- ↑ No, no nos referimos a esto
- ↑ Fútbolista que promocionó la venta de pelucas rubias en los años 90.
- ↑ Y ahí dan ganas de hacer el efecto mariposa para evitar ver esto.
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