Respiración
El mecanismo de la respiración es la habilidad que tiene un humanoide para llenar sus pulmones con algo diferente al tabaco o maría. Normalmente es una habilidad innata que vamos perdiendo con el paso del tiempo.
Los factores que afectan a este mecanismo son: el diafragma, la caja de costillas, la cantidad de humo/cacas en el entorno y el que te estén o no agarrando por el cuello, lo que dificulta aún más esta tarea, bastante dura de por sí misma.
Historia y evolución
Comienzos
Desde el principio de los tiempos, el hombre ha ido perfeccionándose en busca de la facilidad en sus tareas cotidianas. Antiguamente, los hombres primigenios aún no habían desarrollado la respiración tal y como la conocemos hoy en día, ya que para ellos era un acto que se realizaba una sola vez al día.
Era conocido como dar una respirá y palante, y solía hacerse nada más levantarse uno de la cama/suite, acumulando aire en los pulmones como para aguantar todo el día.
1ª Revolución
El hombre arcaico, algo más avanzado en el tiempo que el primigenio, decide cambiar el sistema de respirar de siempre, ya que resultaba algo incómodo pasear todo el día con la barriga hinchada. Se pone manos a la obra para buscar una solución al problema, y se inventa el arte de la expiración.
Dicho arte consistía en que, si el individuo se encontraba apurado, podía ir soltando parte del aire acumulado en su interior, y vaciar parcialmente la barriga. Ésto supuso grandes problemas, ya que los niños pequeños no dominaban esta nueva habilidad, y eran más que frecuentes las "vomitonas post-expiración" de los potitos y colacaos. Había que pensar una vuelta de tuerca más del tema...
3ª y última revolución
Con la conquista llegada del hombre al espacio, la tecnología utilizada requería de personas para ponerla a punto una vez en el espacio, donde como todos sabemos, no hay aire sino atmósfera. Dichos especímenes humanos utilizaron iniciáticamente la técnica de la bolsita, con catastróficas consecuencias al inundarse el espacio útil de la nave de estos estúpidos utensilios.
Pensando y pensando en alternativas al problema, a uno de los científicos se le iluminó el trasero la cabeza y dio a luz una sencillísima y nada compleja forma de respirar: se utilizaría la misma técnica que antes, es decir, respirar y luego expulsar el aire, pero sin la ayuda de la bolsita. A la gente le entró mono de la bolsa, pero con el tiempo se ha convertido en una de las formas más comunes de realizar esta noble tarea cotidiana.
¿Sabías que..
- Aprender a respirar puede llegar a ser una acción muy complicada?
- El primero de marzo es el día mundial sin respirar?
- Las azafatas de aviones aún utilizan el sistema de bolsita?
- Si intentas utilizar dicho sistema durante más de una hora, puedes expulsar otros gases distintos de los ya conocidos, como eructos y pedos?
- Durante un beso nos respiramos mutuamente por dentro?
buaggg