Connotación sexual
La connotación sexual es un concepto duro y grueso de explicar. Su contexto se puede venir rápido a la mente, sacándola de su estado de reposo a otro más rígido y listo. Requiere un ambiente estudiado, ya que en todos los casos será necesario que se profundice en la idea una y otra vez, de manera que entre limpiamente y sin arrugarse.
En el debate se ponen en práctica cambios de postura que pueden llevar al lector a disfrutar más, también el ofrecer una actitud pasiva ante el correr de las ideas es en ocasiones más placentero que tener una actitud activa, todo depende del método. Existe una vía tradicional para hacer llegar la connotación sexual, sin embargo existe una segunda alternativa de menor acogida pero igualmente válida, que requiere el empleo de altas dosis de confianza, flexibilidad y resistencia, ya que se percutirá sobre zonas que la persona que la reciba quizás no haya utilizado nunca. En estos casos, es bueno utilizar herramientas que eviten que la persona receptora ofrezca resistencia, de este modo la connotación sexual tiene más fácil cabida y dejaría menos tocado al sujeto, por ello se recomienda hacer anualmente y con paciencia al principio.
Usualmente se corre mucho y muy pronto en la difusión de la connotación sexual, a veces dejando a la gente insatisfecha y con ganas de más, por haber puesto en práctica una explicación dispersa y escasa de experiencia. Luego se pueden quedar lagunas por todas partes y tomaría un rato volver al punto en que se estaba anteriormente.
Al abordar el tema manera oral, no deja a todos igual de contentos, siendo necesario el cambio de puntos de vista, y tomar agua para evitar la deshidratación ya que la persona al mando puede llevar la voz cantante durante un tiempo prolongado, acabando con un mal sabor de boca si no se han tomado las medidas oportunas previamente. El abundante uso de saliva siempre es una buena opción. No se debe insistir en demasía con esta práctica, ya que sus repercursiones en el vocabulario pueden ser muy nocivas.
Un problema común con la connotación sexual, es que al lector le venga grande, en cuyo caso tendrá que abrirse un poco para que le entre. Si no se deja no habrá nada que hacer, ya que es necesario su consentimiento para llevar a cabo el proceso, de otro modo estaríamos entrando en prácticas ilegales, incluso no está permitido que los niños se acerquen al concepto, a menos que sea en un camión con el cartel "Caramelos gratis", en cuyo caso la polícia hará la vista gorda.
Si se hincha y crece de rabia, la connotación sexual puede ser peligrosa, dejando heridas abiertas y provocando un dolor fino y puntiagudo, que sería la punta del iceberg. Estar dentro es el objetivo clave, sentirse a gusto, relajarse, y si se requiere, utilizar el lenguaje corporal como complemento para tener mayor éxito. Pegar fuerte y flojo cuando se requiera, percutir, tener constancia, dar una vuelta cuando se quede atascado y ser cuidadoso son las mejores medidas para que los lectores tengan ganas de que el discurso se repita.
Precauciones
Siempre hay que estar prevenido ante los problemas relacionados con la connotación sexual, ya que las ideas enfermas se propagan nada más tomar contacto con el lector, siendo en ocasiones letales. La famosas doctoras Silvia Gra y Rosa Mel Cacho recomienda ser firme en este punto.
Ejemplos de connotación sexual
El maestro de la connotación sexual
Donde encontrarlas
- En series de Cartoon Network como Regular Show o The Amazing World of Gumball. Luego esta Adventure Time cuyas guarradas ya pasan a otro nivel
- En las películas de Disney
- En los juegos de Rockstar Games, sobretodo les gusta lo de poner el número 69 en todas partes