Jeroboam I
Jeroboam I, o Ben-Serua, era un antiguo amigo de Salomón que terminó tratando de trolear a Salomón, luego a su hijo, Roboam, y finalmente intentó trolear a Yahvé, pero luego hubo mierda, mucha mierda... Se volvió el primero de los reyes del ya separado reino de Israel, también llamado Reino del Norte, el tipo que logró robar diez de las doce tribus de Israel, para eterna tristeza de la dinastía de David, pero al mismo tiempo fue el responsable por causar la desgracia que jodería a esa parte de Israel para siempre.
Historia
La Revelación
Jeroboam probablemente fue uno de los consejeros del rey Salomón, hombres de confianza, general o algo por el estilo. En la película de 1997 lo retratan como un amigo del rey, su amistad es muy linda, pero el propio Jeroboam en esa película parece preocupado porque Salomón parecía un poco demasiado filosófico para el relato, probablemente bebiendo demasiado vino de la gasolinera, lo que poco a poco lo irritó Jeroboam.
Un día, Jero estaba paseando cuando se encontró con cierto profeta llamado Ahías. Este tipo apareció con un manto ensangrentado en sus manos, caro como el infierno, hecho del lino más fino (prácticamente un Armani actual), y rompió todo el manto frente a Jero en 12 pedazos pequeños, mandándolo a recoger diez de ellos. Al hacerlo, Jeroboam recibe la profecía de que tomaría en sus manos a las tribus de Rubén, Simeón, Dan, Neftalí, Gad, Aser, Isacar, Zabulón, Manasés y, por supuesto, la suya propia, Efraín. Solo Judá y Benjamín quedarían para los hijos de David (Leví no cuenta porque solo eran sacerdotes, no terratenientes y eran pobres), debido a que Salomón había sido demasiado pendejo, derrochando demasiado su dinero, adorando a unos muñecos extraños y también rellenando mujeres.
Jeroboam termina demasiado emocional e intenta golpear a su viejo amigo, pero logra escapar y termina yendo al Antiguo Egipto, donde se hace amigo del faraón Shisaque I. Y esto va a ser mucha mierda más adelante, pero para Roboam...
La secesión
Después de la muerte de Salomón, varios del pueblo, cansados de los altos impuestos del rey para pagar sus palacios y mujeres, van a pedir consejo a su sucesor, Roboam. Pero, recordando el intento de golpe de Estado de Jeroboam, lo invitan a ver si todavía quiere reinar, dependiendo de la respuesta de Roboam, Jeroba tomaría el relevo rápidamente. Sin pensarlo dos veces, el malaco sale de Egipto y ya está charlando con los líderes de diez tribus, solo esperando a ver si sucedé. Y sucedió: Roboam, siendo un tonto, le dice al pueblo que se siente en su abrevadero porque los impuestos serían aún más altos y vergonzosos. Así, aprovechando la situación, Jeroboam ya proclama el golpe de Estado y hurta casi todo para él, creando así el nuevo Reino de Israel sin juegos de azar y sin mujerzuelas, porque todas eran de la dinastía de David.
Cuando todo empezó a apestar para Jeroboam
Jeroboam había recibido la profecía de Yahvé, sin embargo, recordó que dios tiene su residencia en Jerusalén, en el lujoso y caro Templo de Salomón. Al ver que, si iban allí a adorar a Yahvé, correrían el riesgo de perderlo todo y volver a someterse a la dinastía davínica, el loco decidió criar dos becerros de oro, uno en la ciudad más al norte de toda la tribu, Dan, y el otro en el punto hasta ahora más al sur del reino, Betel.
Esto obviamente dejó a Yahvé bastante cabreado y aunque cabrearlo es muy fácil, ahora fue en exageración, la situación se puso fea: apareció un supuesto "profeta anónimo" que profetizó que muchos años en el futuro, un tal Josías vendría a asar los huesos de los profetas en el altar de la becerro de Betel, que era un desastre. Así que Jeroboam ya sabía que estaba en la mierda, pero se empeñó en querer joder al profeta, sin embargo acabó con una mano igual que aquel mayordomo de Scream 2, solo para aprender a no meterse con los callados. Spoiler que nadie pidió: al rato el propio profeta anónimo se molestó con los sucios consejos de otro profeta anónimo, ya anciano, que quería arreglar lo de no profanar sus huesos siglos después, enterrándolos juntos y luego confundir a todos.
Deshonra y muerte
Después de eso, Jeroboam solo vio cosas malas que sucedieron en su vida. Su hijo mayor, Abías de Israel, terminó con el trasero pateado por culpa de una maldición de Ahías, quien llegó a decir que el resto de la familia de Jeroba también moriría, solo que todo sería en base a machete. Luego hubo una guerra contra el Reino de Judá y luego Abías de Judá (curiosamente con el mismo nombre que el difunto hijo de Jeroboam, tal vez eso le arruinó la cabeza al mamón) le ganó la batalla de mala manera.
Finalmente, prediciendo ya el tamaño de la mierda que le iba a pasar a su reino, Jeroboam muere de depresión y con su manita graciosa.
Véase también
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