Terremoto de Chile de 2010
Dijimos que para el Bicentenario íbamos a mover el país como nunca y cumplimos
En dos años hemos hecho más que lo que se hizo en los 20 años anterioresSe viene un Tsunami en la zona sur del país ¡Atentos!
El Terremoto de Chile de 2010, que sacudió la zona centro y sur del país más que la mejor cumbia de Américo, sucedió el sábado 27 de febrero, cuando todo Chile estaba carreteando durmiendo. En algunos casos la fiesta no paró o, por exceso de piscola, no fue advertido. Este sismo y evento según los más izquierdistas científicos, significó la bienvenida a la llegada del actual presidente del país, Sebastián Piñera y sus muy célebres "piñericosas".
Este terrepoto terremoto de 8.8º en la escala sismológica del momento, vino con una especie de promoción "2x1", debido a que también vino con un maremoto (desde ahora llamado marepoto o tusunami en jerga chilena moderna), que devastó aún más la zona sur del país. También fue conocido por las constantes réplicas que provocó, lo que también provocó el enojo de la clase aristocrática del país, la cual ya no podía tomar en paz su café o su té marca premium. Los niños de los barrios más marginales, vieron con buenos ojos las réplicas, debido a que ahora practicar juegos infantiles tan conocidos como el "Congelao" o "123 momia es" se hicieron más difíciles y por lo tanto, más divertidos.
Datos sismológicos
Durante los momentos posteriores al sismo se vivieron jocosos momentos protagonizados por la ONEMI (Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior, o comunidad hippie para algunos), el SHOA de la Armada, el servicio de sismología de la Universidad de Chile y el servicio sismológico de Estados Unidos, que impone la verdad en esta materia gracias a las armas. Con los tragos de más propios de un viernes en la noche trataban de ponerse de acuerdo en los datos más importantes del acontecimiento sísmico.
Luego de muchas chelas bebidas a la luz de las velas y las linternas los datos lograron aclararse y se determinó que el sismo tuvo una magnitud de 8.8 MW (escala sismológica de magnitud de momento, que es lo mismo que la escala sismológica de Richter pero que sirve para alargar un poco el artículo), con los epicentros en en las costas frente a los resorts turísticos de Curanipe y Cobquecura. La extensión del sismo fue tal que se sintió también en Buenos Aires y en la República de Balalaika. Dichos datos fueron transmitidos en un cuaderno transportado por una carreta de bueyes a Santiago y que se mojó con el tsunami, lo cual explica por fin porqué días después nadie tenía muy claro qué había ocurrido en la costa.
Causas
Nadie conoce las posibles causas de que haya ocurrido este sismo, ni los más prestigiosos sismólogos de la ONEMI tienen alguna idea o hipótesis sobre esto. Posiblemente se debe a que, al igual que los oriundos de este excesivamente largo país, a las placas le gustó mucho lo que es el "Perreo", baile típico nacional, que poco a poco amenaza con dejar en el pasado a la tan famosa cueca chilena. También por otro lado los más izquierdistas científicos o estudiosos del futuro, consideran que fue un aviso divino de lo que sucederá con la llegada del actual presidente del país, quien goza en la actualidad de gran popularidad y de todo el cariño de su preciado pueblo.
Eso sí, la gran mayoría de los científicos y de los mismos ciudadanos del país, consideran el sismo se debió a la reconocida "mala cuea" de Chile, lo que explicaría también la llegada del actual mandatario. No sería muy extraño pensar que Chile siendo el país con peor suerte del mundo (detrás de Haití y Tuvalu Ulterior), sea el primero en caer ante el posible apocalipsis Maya.
Historia y contexto
Chile, país sísmico y bueno para el baile, la cumbia y la cueca, vive con frecuencia sismos de gran intensidad en toda la extensión de su territorio gracias al gentil auspicio de la placa de Nazca que tiene la habitual costumbre de rozarse con la placa sudamericana según la teoría de tectónica de placas, que viene a ser el Kamasutra de la geología terrestre.
Como resultado de esta entretenida actividad telúrica, es habitual que el territorio chileno sufra sismos de importancia cada unos pocos años, pero según dice el adagio popular "Santiago es Chile", con lo cual los terremotos sufridos en el norte del país son vistos como sismos peruanos, y en el caso de los terremotos sureños normalmente son vistos como actividad geológica que afecta a unos pocos pinguinos en el Territorio Chileno Antártico. Resultado de lo anterior es que el último terremoto de gran importancia vivido por el país había ocurrido en 1985 y ya nadie se acordaba mucho de como enfrentar un desastre natural de este tipo.
Efectos
Socio-culturales
Entre los tantos efectos que tuvo este fuerte sismo, están por ejemplo, un aumento de palabras en el vocabulario del hablante chileno, ahora términos como "Marepoto, terrepoto o tusunami", se hicieron tan famosos, que ahora forman parte de la conversación cotidiana del buen chileno. El copete tan conocido en la vida nocturna del chileno conocido como "Terremoto", obtuvo un nuevo nivel de ventas, con un nombre mucho más rentable respecto del trago nacional por excelencia, la piscola.
Económicos
El sismo implicó una gran cantidad de muertes para beneficio de la industri
a funeraria, y pérdidas materiales, para beneficio de las distribuidoras de materiales de construcción. Sin embargo, se perdieron millones de pesos en los saqueos que hubieron, debido a que miles de flaites aprovecharon que las tiendas y supermercados estaban sin electricidad para robar elementos de primera necesidad, entiéndose por aquellos elementos televisores HD, computadores, ropa de alto precio y licores. A esto se le llamó el Apocalipsis Flaite de 2010. Debido a este desorden, el ministro de defensa Francisco Vidal se dejó de estirar los cocos y mandó al ejército a la calle, evocando aquellos tiempos gobernados por Tata Pinocho. Sin embargo mandó a las tropas dos días después de que los flaites se pitieran todo lo que hallaran.
Sicológicos
La ocurrencia del movimiento telúrico significó la aparición de un alto número de patologías sicológicas o el incremento de las más frecuentes en tierras chilenas. Estudios aseguran que se produjo un aumento de pololas locas de un 28%, muy superior al 12% de padres alcohólicos que generó el terremoto de 1985.
Otro de los efectos secundarios del sismo fue el Síndrome de Viernes Telúrico (SVT), que causa serios trastornos a la industria del carrete porque alteró el grado de alerta a tal punto que ahora es corriente ver grupos de personas en bares y discotecas con carpas, linternas y alimentos no perecibles para enfrentar un potencial terremoto de la mejor forma posible. El grado extremo del SVT produce los síntomas opuestos, de modo que el individuo beberá en exceso las noches de viernes a fin de contrarrestar las teóricas oscilaciones sísmicas o bien no recordar nada el sábado por la mañana.
Reconstrucción
Desde una perspectiva cultural, el terremoto fue útil para el desarrollo de uno de los grandes mitos nacionales de Chile, la reconstrucción. Diversas instituciones y personas luego de la ocurrencia del sismo comenzaron a ocupar este concepto mitológico para felicidad de folcloristas y antropólogos, según el cual el país se iba a levantar quedando aún más hermoso y moderno que como es habitual. Desde un principio, la actividad de la reconstrucción ha sido muy intensa, con la elaboración de miles y miles de informes y ya se piensa en utilizar el papel como material alternativo para levantar viviendas y obras de infraestructura.
Personajes que se hicieron conocidos gracias al terremoto
El Zafrada
Todos lo conocen. No es necesario explicar.
El weón de la bandera
¿Creerías que un sujeto se hizo famoso en todo el país, sólo por levantar una bandera que ni siquiera era suya? Bueno, en Chile eso es cosa frecuente. Basta ver en Youtube cómo tantísimos personajes se han hecho famosos sólo por mostrar sus respectivos tics. Ahora la historia sobre este personaje, es que después del desastre que quedó con todo lo que fue el sismo, no se lo ocurrió nada mejor que levantar una bandera del país en signo de patriotismo. Obviamente no importaba el niño que se encontraba atrapado entre los escombros o el perro que tenía rota la pata, no, lo que le apremiaba era tener una nueva foto para mostrarla orgullosamente en su Facebook.
Cuenta el mito urbano que dado que en esos momentos no estaba vigente la ley que permite izar la bandera cualquier día del año, la fuerza pública no encontró mejor entretenimiento que apresar al sujeto, el cual posteriormente intentó participar en varios reality show sin éxito, engrosando la lista de famosillos que puebla la televisión chilena sin mérito conocido.
La niña que dio la alarma del tsunami
Prueba irrefutable de que hasta un infante es más eficaz que la ONEMI, de hecho, nuestro astuto presidente y sus más intelectuales ministros, como lo es Joaquín Lavín, están ideando crear una organización parecida a la ONEMI, pero que en vez, los trabajadores sean niños. La iniciativa se basa en que los niños, de naturaleza altamente perceptiva, por ejemplo se ponen nerviosos antes de las lluvias, les duelen los huesos con el frío y tienen diarrea cuando comen completos de la calle. Perspicaz y genial movimiento por parte de nuestro astuto gobierno.
Carmen Fernández
La niña que no dio la alarma del tsunami.
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