Andrés Iniesta
Nacimiento Defunción | Albacete, Barcelona y Otakulandia |
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Origen | Humor manchego. |
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Sobrenombres | Iniesta de mi Vida |
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Lugar de residencia | Otakulandia |
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Se dedica a | futbolista luminoso |
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Estado actual | iluminado |
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Hazañas logradas | Marcar el gol de nuestras vidas. |
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Relaciones | Leo Messi, Xavi Hernández, Pepito Guardiola, Luis Aragonés, El Marqués del Bosque |
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Enemigos | el Real Mandril, Florentino Pérez |
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Poderes especiales | Brillar con luz propia |
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Objetos | cepillo de dientes. |
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Andrés Iniesta Luján (Fuentealbilla, Albacete, 11 de mayo de 1984), más conocido como Iniesta de mi vida o simplemente Iniesta para los amigos, es un futbolista español que juega ahí en la mitad del campo en el Vissel Kobe de la "Liga Oliver y Benji" en Otakulandia. Aunque no se fue a jugar a Japón por dinero, sino por el estímulo de participar en ese cementerio de elefantes la competición nacional de este país, la más prestigiosa del mundo a nivel deportivo, es uno de los futbolistas mejor pagados del mundo, si bien no es el más pagado de sí mismo, ya que este honor le corresponde, por mucha diferencia, a Cristiano Ronaldo.
Principales características futbolísticas
Andrés Iniesta ocupa posiciones como media punta (cuando se saca media chorra) o interior (cuando está dentro). Es pequeñito y se mueve mucho, con lo cual a los contrarios les cuesta localizarle para lanzarle patadas y golpes. Es también muy hábil dando pases, dominando un amplio repertorio: la pasa cuando estás cerca, la pasa cuando estás lejos, lo mismo la pasa abombada que te la pasa en línea recta. La pasa para adelante, la pasa para atrás, y hasta taconea. Eso no quiere decir que pase de todo, porque si no sería Guti. También es bueno con el dribbling, que un día se puso a driblar y se hizo así media Barcelona, que el partido ya había acabado y todo y él seguía. Goles, no mete muchos. Pero los que mete son de gran importancia y muy efectivos, pues tiene cuatro hijos.
Trayectoria
Andrés Iniesta nació en Fuentealbilla, hijo de una familia que se dedicaba al vino, motivo por el cual él salió prácticamente albino, que es blanco como un váter. Blanco como es, desde la más tierna infancia fue seguidor del Real Madrid, y su vida es una tragedia personal pues el destino ha querido que se vea abocado a machacar una y otra vez y sin piedad las aspiraciones del equipo de sus amores, formando en las filas del eterno rival. No, no tiene nada que ver con machacársela una y otra vez, que es lo que tú haces.
Inicios en infantiles
Como de niño se pasaba el día tocando las pelotas, sus padres, gente trabajadora y humilde pero afecta a la higiene y al decoro, decidieron apuntarle a las pruebas para que ingresara en los infantiles del Albacete Balompié. Como los manchegos son un pueblo que ha dado grandes queseros, navajeros y humoristas, pero generalmente no futbolistas, el pequeño Andrés no tuvo mucha competencia y pasó las ridículas pruebas sin inmutarse siquiera. Así empezó a vestir de blanco, colores tradicionales del club albaceteño que, blanco como era él también, le hacían muy refulgente, de tal manera que parecía un gusiluz su presencia se hacía sentir en toda la cancha, que casí había que poner gafas de sol cuando él jugaba.
Fue entonces cuando se fraguó la tragedia. El Barcelona jugó en liga contra los mayores del Albacete y le metió siete, que eran más malos que una invasión de ladillas. Esto en principio no tiene nada que ver con nuestro protagonista pero es lo que hizo que su corazón se decantara desde ese momento, por puro despecho, por el Real Madrid, desde ese momento y ¿para siempre? club de sus amores.
Pocos años después participó en un torneo de alevines donde llamó la atención (era difícil no verlo) de los ojeadores tanto del Barcelona como del Real Madrid. Estos últimos le ofrecían potenciar su blancura, mientras los primeros le ofrecían un completo plan de estudios en una masía, razón por la cual sus padres decidieron que fichara por el Barça, en contra de los deseos de Andrés: de esta forma, pensaban, podría seguir viviendo en un entorno rural, como hasta el momento, aprendería idiomas, e iría a tocar las pelotas a otros (a sus técnicos y compañeros, no piensen mal).
Cuando el niño Andrés llegó a la tal masía descubrió que no era una bonita casa en un pueblo, como esperaba, sino una escuela de fútbol en una gran ciudad. Esto, jugar para el gran rival del equipo de sus amores y, también, echar de menos a sus padres y amigos hicieron de él un niño mohíno y tristón que sólo parecía sacar energía cuando daba patadas a algo redondo, cosa en la que sus progresos no dejaron de sucederse.
Su carácter melancólico solo se alivió a cierto punto cuando su familia decidió vender vinos a los quinquis del extrarradio barcelonés, ahí se sintió ya más en compañía y volvió de nuevo a brillar (como un gusiluz, tal como mencionábamos antes).
Debut con el Barça
Y así Andrés fue creciendo y creciendo (bueno, tampoco mucho, que es más bien bajito) hasta que se hizo un prometedor joven que esperaba su oportunidad de dar el salto a la élite. Al ser bajito, parecía que dar este salto le iba a costar más, pero por suerte tenía buenas piernas, así que el elocuente y no por ello menos atractivo entrenador holandés Louis van Gaal decidió dar a Andresito la oportunidad de debutar con él. Con el primer equipo, queremos decir. Así que durante esa temporada y la siguiente se dedicó al alterne, porque alternó partidos con el filial y con el primer equipo.
Grandes triunfos
Con el Barcelona
Un par de temporadas después, siendo entrenador el también holandés Frank Rijkaard, de quien es conocida su afición a la buena hierba (a que le gusta tener el césped del campo de fútbol bien segado, nos referimos), Andresito pasó a formar parte integrante de pleno derecho del primer equipo, si bien solo le sacaban en las segundas partes cuando la cosa se ponía cruda, para que sirviera de repulsivo. No obstante desempeñó muy bien esta función porque así a lo bobo participó en casi todos los partidos.
De repulsivo hizo también en su primer gran triunfo azulgrana: en la final de la Champiñons League comenzó calentando banquillo, pero salió a jugar cuando iban perdiendo y al final ganaron. Si bien algo tuvo que ver que el rival fuera el Arsenal de Arsene Wenger, entrenador tan generoso cuyo método consistía en que sus equipos jugaran bonito pero dejaran que todos los títulos importantes los ganaran los rivales, que no hay que abusar.
En la siguiente temporada adoptaría el que en lo sucesivo sería su dorsal habitual en el equipo: el ocho, porque por el culo te la entocho le daba buena suerte.
Su siguiente Champiñons League la ganaría en 2009, ya asentado como titular y siendo un pilar indispensable en el equipo, Pilarín que le llamaban debido a su escasa talla. Fue determinante para ello su gol contra el Chelsea en semifinales jugando a domicilio (Iniesta hace goles como quien reparte pizzas). Este gol supuso el empate del partido y decantó la eliminatoria a favor del Barça. Iniesta fue el segundo jugador más importante del Barcelona tras Tom Henning Ovrebo, árbitro del partido. Ese año el Barcelona ganó también Liga y Copa, que así dicho parece que estuvieron en una despedida de soltero.
Ligas y copas siguió ganando tras recuperarse de una tristuna que le entró porque se murió un amigo suyo (ver el siguiente apartado). Y machacando especialmente al Real Madrid, equipo de sus amores, cosa que le hacía seguramente sufrir mucho. Y dos Champiñons League, pero seguro que no le hizo tanta ilusión como con las primeras, que la primera vez siempre es especial. Que se lo pregunten a Louis van Gaal.
Con la Selección Española
Su debut con la Selección Española fue muy especial, porque se produjo en su pueblo, en un partido amistoso de solteros contra casados de preparación para el Mundial de Alemania. Mundial del que les eliminaría la Francia imparable de Calvito Zidane, Francia a quien solo pararía, irónicamente, la misma calva ilustre que la aupó a la final del campeonato, pero eso es otra historia.
Su primer gran triunfo con la Selección fue en la Eurocopa 2008. En este torneo Iniesta lució por primera vez el dorsal número seis, el cual escogió porque así os jodéis tiene buena rima. Fue explotado de mala manera durante este campeonato por Luis Aragonés, quien le hizo jugar todos los minutos de todos los partidos y aun seguir jugando él solo cuando los partidos ya se habían terminado. Fue considerado el mejor jugador de la semifinal, el cual fue considerado el mejor partido de su equipo y también fue considerado el jugador más brillante (recuerden lo del Gusiluz) en los demás partidos. España se proclamó campeona de la competición por segunda vez en su historia, y esta vez sin los servicios secretos franquistas poniendo evacuol en el desayuno de los jugadores de la U.R.S.S. (como ocurriera en la primera ocasión).
Antes del Mundial 2010 estaba muy triste y deprimido, desmotivado y asqueado de ganar cosas, y además que se había muerto un amigo suyo. Pero no obstante Vicente del Bosque, el Krusty de Chamartín, consideró que un Iniesta mohíno, tristuno, apático y abúlico era mejor opción para su centro del campo que cualquier otro jugador español, mira si le tenía aprecio. Así que le convocó. Iniesta fue recuperando poco a poco la motivación y la alegría de jugar y firmó un brillante (modo Gusiluz de nuevo) campeonato. Fue determinante en la final, en la que marcó el gol que le valió a España el título de Campeona del Mundo, a Vicente del Bosque el Título de Marqués y al propio Andrés Iniesta el Título de Iniesta de mi Vida, otorgado por José Antonio Camacho. Este evento es considerado por los historiadores como el más importante de la Historia de España. Iniesta el gol se lo dedicó a su amigo fallecido, mira tú si es buena gente. Y fue un partido muy difícil, porque el rival, Holanda, decidió emular en su juego a la Naranja Mecánica, pero no a la de Cruyff y Neeskens, sino a la de Burguess y Kubrick, por el violento desempeño con el que se desenvolvieron los tuercebotas tulipanes.
Su último gran éxito con España fue la Eurocopa 2012 en la que España volvería a proclamarse campeona. Fue elegido mejor jugador del torneo, jugador más brillante del torneo, jugador con la voz más graciosa del torneo, mejor bailarín del torneo (porque él solo bailó hasta a cino italianos en la final), mejor mascota del torneo y mejor mejor del torneo.
También participó con España en la Eurocopa 2016 y los Mundiales de 2014 y 2018, pero sobre esto mejor correr un tupido velo ¿verdad?. Qué quieres, no se puede ganar siempre.
Ocaso en el país del sol naciente
En 2018 decide retirarse de la Selección y dejar también el Barcelona, donde consideraba que ya había cumplido su cometido. Su club le organiza un sentido homenaje al que acude como representante del eterno rival y equipo de sus amores su ídolo de juventud, el sin par Emilio Butragueño, quien pronuncia un emotivo discurso:
Eeem, pssch, bueeeno, psssh, seee, estamos encantados de estar aquí. Pensamos que pssch, buee, pssh, Iniesta es un jugador con una trayectoria pssch, buee, extraordinaria en todos los sentidos. Es un jugador que, pssch, es del Barcelona, lo cual nos ha jodido bastante, pssch, pero es el jugador de toda España y de pschh, todo el mundo por su calidad como jugador y como pssch, deportista. Por encima de la rivalidad, que pssch, existe, está el respeto y, en el caso de Iniesta, pssch, siempre ha sido una persona muy respetuosa, pssch, no como otros, psssch ¿verdad Piqué?.
Así iniesta decidió poner rumbo a oriente, donde fichó por el Vissel Kobe japonés, equipo que eligió por su divertida camiseta arlequinada que le hace parecer que juega en un circo. Allí ha seguido ganando títulos locales en esa gran potencia futbolística a la que solo los dibujos de Oliver y Benji, que no la realidad, hacen justicia.
Fuera del fútbol
Ha potenciado el negocio familiar y vende vinos. Lo cual viene muy bien a los seguidores de los equipos a los que se enfrenta, para ahogar las penas.
Carácter y personalidad
A José Mourinho le gustan los futbolistas zafios, atrabiliarios, malencarados, pendencieros, patibularios y estrafalarios. Pues bien, Andrés Iniesta es todo lo contrario, menos mal que el "desprecial one" nunca le ha entrenado. Es una persona humilde (económicamente ya no, pero eso es otro cantar) y sencilla que tiene por afición, al margen del fútbol, lavarse los dientes y que nunca dice una mala palabra sobre nadie. Además lo que dice, lo dice con esa voz temblona tan simpática que tiene, que siempre parece que está en medio de un terremoto (lo cual aterroriza a los japoneses con los que convive en el ocaso de su carrera futbolística, pues este país es muy proclive a los movimientos sísmicos. Además, con este sencillo truco podrían ahorrarse los temores: la cosa es sencilla, cuando a Iniesta NO le tiemble la voz, entonces será cuando haya terremoto, por eso de la cancelación de fase).
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