Antonio Lobato

Este artículo contiene una alta dosis de humor español. Si no eres de esta casta tierra, probablemente pierdas el tiempo leyendo esto.

Paparruchas, a nadie le gustan los perros, ¿qué dirias si entrara en tu casa y empezara a babearte la entrepierna?

— Fernando Alonso imitando al Sr Burns con Antonio Lobezno

¿Si fueras tú?

— Antonio Lobato haciéndose ilusiones con Fernando Alonso

¡Y seguimos aquí con todos ustedes, desde el circuito de Wimbledon!

— Antonio Lobato equivocándose de deporte

Que se llama Silverstone, Antonio...

— Gonzalo Serrano el Gordo

Lobato en la cabina de retransmisión

Hermano de Pepe Viyuela e hijo ilegítimo de Emilio Botín, este célebre calvo de la televisión (en LaSexta), es odiado por media España y aborrecido por la otra mitad. Su empleo consiste en joder lo más posible a los aficionados de Fórmula 1 con sus estridentes e insoportables comentarios en las retransmisiones deportivas, así como en cometer el mayor número de paridas e infartos sin sentido por minuto. La imparcialidad y objetividad de sus comentarios. Su objetivo último en la vida es lograr un sueño: casarse con Fernando Alonso. Cuando laSexta se hizo con los derechos de la F1 arrebatándoselos a Telecirco se esperaba que este individuo dejaría de joder la marrana al quedarse sin trabajo, pero al parecer estará otros cinco años dando el coñazo en laSexta. Destaca también por tener los eggs de llamar insensible a Raikkonen cuando se parte de risa cada vez que alguien se estrella y favorece a su semi-Dios.

Su vida antes de Alonso

Míster Proper fue al principio, ahora se llama Don Limpio. Lobato nunca sabrá que es su hermano secreto y primo del monstruo de la Laguna Sucia

Nacido en Asturias, el pequeño Antoñito fue abandonado nada más nacer. Se crió con una camada de lobos en los bosques de las afueras de Oviedo. Fue acogido en el mismo orfanato que Míster Proper y recibió las enseñanzas de Alfredo Urdaci. Allí, lo único que hacía era la pelota al profesor y ser el comentarista de los campeonatos de fútbol. Por estas y más razones, sufrió vejaciones de sus compañeros y en un desfalco le quemaron el pelo de tal manera que no le podría volver a crecer en la vida. Desamparado, Antonio buscó un trabajo desesperadamente e hizo amigos en las colas del paro, como Víctor Seara, el hermano secreto de Evo Morales, y Gonzalo Serrano, un periodista con problemas de obesidad. Telecinco andaba buscando peculiares personajes para subir la audiencia, y contrató a los tres para presentar la sección de Deportes. Al mismo tiempo, la sombra de Fernando Alonso renunció a su empleo (tras ser explotada en un anuncio televisivo) y Lobato ocupó su lugar, momento desde el cual jamás se separa del piloto asturiano. Sólo en una ocasión, y eso por la pasta,se transmutó en "Bob Culatas", prestando entonces su voz para el doblaje al español -que no su imagen- al simpático comentarista de las carreras (Fórmula Indi, copa Pistón) en la película Cars (Disney - Pixar)

Su vida después de Alonso

Lobato en acción

Tras jugarse los derechos de Fórmula 1 con los trileros de TVE, Telecinco adquirió varias temporadas, y decidió escoger a cualquier pazguato que fuera un ignorante en ese deporte, para identificarlo con el español de a pie. Lobato, aficionado a ver los culos de los futbolistas, lo dejó todo al ver a Fernando Alonso, un piloto pitufo y también de Asturias. Su perillita lo excitaba un montón. Así, entre carrera y carrera, orgasmos y orgasmos relatando las carreras del susodicho piloto, Lobato quería más. En sus múltiples reuniones con Alonso, llegaron a un acuerdo: si Lobato le ofrecía su alma a Satanás (fan número 3 de Ferrari) para que Alonso ganase el Campeonato del 2005, Alonso le daría su amor eterno y el compromiso de seguir en Renault. Lobato no lo dudó y Alonso se hizo campeón. Pero al final todo era una trampa: Alonso salió con la cantante de El sueño de Morfeo y fichó con McLaren, dejando al periodista calvo tan solo con los contactos sexuales que tenía con su compañero Gonzalo en la cabina de retransmisión. Ahora, dolido, pero eternamente enamorado a pesar de esa puñalada trapera, sigue en su trabajo, sin tener ni idea de Fórmula 1.

Destacar que no sabe ni cambiar la rueda de su Renault 5, pero sabe cuántas barras de tungsteno hacen falta situar en el fondo plano del coche de Fernando para disminuir el punto de gravedad, evitando así el subviraje.

Proezas al volante

Fernando Alonso, su Dios.

• Conducción de un monoplaza de la Fórmula Renault. Lobato no decepcionó a nadie y en su primera vuelta en un vehículo que no pillaba los 90 km/h hizo un trompo. Su modestia se hizo patente al decir que se parecía a Michael Chumaquer con el mono y al amenazar a Fernando Alonso

• Conducción en bicicleta por las calles de Mónaco. Este fue uno de los días más felices de Lobato, al estar junto a Fernando Alonso en bicicleta, como en Verano Azul, situción en la que se dice que se corrió. Nunca se emitieron las imágenes en las que el Ferrari que iba detrás de ellos arrolló a Lobato mientras Alonso se descojonaba de la situación.

• Copiloto de un triplaza. Como viene siendo habitual, Lobato se empalmó todo durante esta experiencia y tuvo varios orgasmos múltiples, que se aumentarían si el conductor fuera Fernando Alonso, como deseó al bajarse del triplaza (Hecho real, de verdad).

• Copiloto en vuelta rápida a Nurburgring en un Renol. Nada más empezar, cómo no podía ser, deseaba que Alonso bajara la velocidad, para que no le quitaran los puntos, luego se cago encima (llevaba Dodotis triple acción por la ocasión) y luego intentó sobar a Alonso en una curva cerrada, pero al acabar, se deilisionó al comprobar que lo que tocaba era el freno de mano. Al acabar la sesión, y tras 340*Pi orgasmos múltiples, aconsejó junto con Alonso no correr, ni en circuito, fomentando así el uso de patinete eléctrico o en su defecto, a manivela.

• Darse a la fuga de un control policial en Monza. Tras la victoria de Fernando Alonso en Monza, Antonio no pudo evitar tomarse unas 3 o 4 botellitas de champagne, lo cual tuvo sus consecuencias. Tras subirse a su Renault 5 con pegatinas de Mercedes y lograr insertar la llave en el contacto, se disponía a salir del circuito, con tan mala suerte que en la primera rotonda se encontró un control policial, el cual sin dudarlo un solo momento se saltó, por lo que empezó una de las más duras persecuciones policiales de los últimos tiempos. Antonio Lobato, motivado por el champagne, se creía invencible, y en una chicane que encontró se subió al bordillo y plaf, batacazo. Consecuencia: retirada de 13 puntos del carnet de conducir y la imposibilidad de volver a entrar en un circuito de carreras, lo cual nos supone a todos los españoles un enorme alivio.

Enlaces de interés

• Il Calvinho Rampante Vídeo donde podrás contemplar todo el potencial de Antonio Lobato al volante, corriendo(se) en un monoplaza.
• [1] En este video se puede ver hasta donde llega la obsesión de Antonio Lobato, más conocido como "El calvito de Telainco", por Fernando Alonso.Eres el mejor.

Artículo Español Destacado Este artículo ha sido destacado en la Portada Española por el pueblo. Por lo tanto, se trata de un artículo de Pata Negra, rico rico, y con fundamento.

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