El hombre del tapabocas
Este artículo es un producto 100% chibchombiano. Si sumercé queda más perdido que una uva pasa en un tamal al leerlo, está en el lugar equivocado; así que le recomendamos abrirse del parche. Un mensaje del Ministerio de Incultura de la República de Chibchombia. |
El hombre del tapabocas, cuya identidad secreta es desconocida, pasará a los anales de la historia como el colombiano del año 2009 ¿Por qué? Porque gracias a los medios masivos de difusión de información en la internet, y a otros colombianos que celebran sus choradas este hombre está ya aspirando a un cargo de elección popular, lo que nos hace pensar en la calidad de nuestros gobernantes.
Biografía
El actualmente hijo más ilustre de Santa Rosa de Cabal, pueblo enclavado en medio de la irregular geografía colombiana (cerca a Perreira), el hombre del tapabocas, fue otrora un fulano común y corriente, como usted o como yo.
Migrando de su terruño, decide probar suerte en Ciudad Caótica, donde desempeña varios trabajos como lo son: vendedor de empanadas, vendedor de cucas, barman, hombre estatua, esposo de Daniela Franco, profesor, calibrador de ruta, vendedor de biblias, de enciclopedias, de aspiradoras, miembro del secretariado del Club de amigos de Hugo Chaves, jugador de la selección Colombia, DT de la misma, entre otros tantos trabajos que por el desempleo y merced al rebusque cualquier colombiano promedio a tenido que ejercer de mala gana para no morirse de hambre.
Posteriormente presenta el examen de admisión a la Universidad Nacional, buscando ser aceptado para el programa de economía y teniendo arquitectura como segunda opción, pero su puntaje en el examen y más aun, el puntaje obtenido en la test de lógica, hacen que los evaluadores tengan la certeza que estará mejor cursando el programa de sociología, que a su juzgar es la única carrera en que la capacidad del Hombre del tapabocas de clasificar y establecer relaciones no coloca en riesgo la vida de otros humanos.
Como buen estudiante de la Nacional salto de carrera en carrera buscando la verdadera orientación de su vida, se paso de sociología a agronomía, de agronomía a diseño industrial, de diseño a nutrición y dietética, de nutrición a agronomía, de agronomía a vendedor de música pirata en la plaza Che de esto a capucho, luego gran capucho, estudio historia fue de colado a clases de arquitectura, hasta por fin retirarse de la universidad para encontrar su verdadera vocación: vendedor de colchones
El salto a la infamia.
Hasta este momento no hemos hecho más que describir la vida de cualquier colombiano rebuscador y con experiencia la interior de la universidad, pero la vida de El hombre del tapabocas daría un giro trascendental cuando el menos se lo esperaba, en medio de la paranoia pandemia global por la AH1N1, El hombre del tapabocas fue dotado del opjeto que le ha dado su nombre y reconocimiento y en acto altruista decidió enseñar a sus compatreiotas la manera de utilizarlo:
En ese momento vi que había un periodista de Citytv entrevistando a la gente que pasaba por ahí. Me acerqué y me preguntó qué opinaba sobre el uso del tapabocas; le dije que me parecía una excelente campaña educativa y que todos los ciudadanos lo tendríamos que usar. Luego me preguntó si lo sabía utilizar, le dije que tenía que tapar desde la nariz al mentón y que acababa de recibir el mío. Lo saqué del bolsillo del maletín mientras el periodista decía que en la calle se veía mucha gente que lo usaba mal y que yo iba a servir de ejemplo para demostrar la forma correcta de usarlo.[1]
Y como sirvió este sujeto de ejemplo, no hubo mejor campaña pedagógica, mejor ejemplo que el pobre tipo intentando tres veces colocarse un tapabocas y fracasando en dos, el Hombre del tapabocas ilustro a todo un pueblo no solo como no colocarse un tapabocas, sino que también le enseño a rehuir de las cámaras de Tv, pues a partir de ese momento, y solo a partir de ese punto de inflexión de la historia, el pueblo colombiano tomo conciencia de la época tecnológica y digital en que vivimos, y descubrió que toda idiotez, tontería, acto ridículo, bochornoso o reprobable que quede registrado en cámara será siempre usado en su contra y difundido a todos los rincones del mundo.
Esto es Colombia
Paradójicamente, el ridículo del hombre del tapabocas no lo hundió en la ignominia como era de prever, cosa contraria, lo catapulto a los mas altos índices de popularidad y admiración. Al final esto es previsible, pues en un país que premia al tonto, castiga al inteligente y enriquece al mañoso y tramoyero cualquier cosa puede pasar. Solo fue que el hombre apareciese en Youtube para que entre los comentarios figuraran.
Colombiano de colombianos, ejemplo de las futuras generaciones
Que man tan verraco
Definitivamente me hizo reír como dos horas y reí de lo bueno...lo felicito por su carácter y la forma en que toma la situación, en Colombia hacia falta un OSO de esos para darnos un poco de alegría.
A partir de ese momento el hombre del tapabocas a aparecido en Día a día, muy buenos días, quien quiere ser millonario; a sido jurado en el reinado de la panela, el coco y la butifarra, Jorge Celedon le dedica muchos de sus pseudovallenatos y ha anunciado su optimismo para la campaña al senado que piensa emprender. No cabe duda, en este país todo se puede.
Notas
- ↑ VARGAS LONDOÑO Juan Carlos. Revista Soho. Bogotá. Colombia.2009