Niños índigo
Concepto
Los niños índigo son una especie de pequeños infantes con déficit de atención, que pueden ser desde autistas, hasta pequeños psicópatas, pasando por niños con aires de superioridad y críos rompebolas que dicen que tienen extraños poderes mágicos. Todas estas características y peculiaridades son explotadas por sus orgullosas madres para alardear frente a sus amigas diciendo que vienen del espacio exterior a traer la paz al mundo.Su principal característica es que son hipersensibles : no toleran la frustracion, se sienten diferentes a los demás; el hecho de que no tengan amigos no imaginarios es una de las características que los hacen fáciles de detectar sin mucho esfuerzo.
Normalmente no sobresalen en nada y no tienen nada de extraordinario, aunque eso es lo contrario que piensa su mamá. ésta, sin ánimo alguno de sobreprotección, se autoengaña estudiando y razonando las emociones de su hijo, asistiendo a cursos y seminarios, y comprando libros especiales donde les explican que son extraterrestres destinados a salvar a la Humanidad (verídico).
La enfermedad mental nace del ocio. Por eso los psicólogos son tan caros.
Historia
El termino índigo fue inventado por la parasicóloga Nancy de Ken & Tupperware, tras observar anonadada un programa de TVE llamado Estudio Abierto, presentado por Jose Maria Íñigo. El impacto visual del mostacho y del peluquín del presentador fue tal, que el cerebro de la parasicóloga entró en frenesí resonante cuántico murciano, y tras tres dias de parálisis anal, la primera palabra que fue capaz de articular, fue "índigo". Después de pronunciar tal palabra, ella relató que había una cierta aura sobre su tupé, que aumentaba espectacularmente para luego entrar en sus fosas nasales, creando un efecto de realimentacion positrónica en las puntas del mostacho del susodicho presentador.
Más adelante, en 1999, apareció un libro titulado "Los niños índigo (esos pequeños plastas)", donde los autores Leed Dioden y Jean Toberass popularizaron la idea de una nueva degeneración espiritual debida al consumo de Pepsi caducada y Mentos de regaliz de Chernobyl y Vandellos, que eran la causa de las auras en estos niños tan "especiales". Estos niños, venidos a mejorar el mundo a base de programas en blanco y negro, terceros chakras en dudoso estado de ying y empanadas de marihuana (una hierba que te hace ver buenas auras con un poco de aguardiente), eran capaces de desarrollar increibles poderes tales como eructar interrumpidamente todo el abecedario, o soportar a invitados soporíferos capaces de doblar cucharas con martillos mientras recitan a Góngora.
En 2001, un niño índigo fue capaz de alimentarse con una anchoa de 5 kilos durante 1 día, 10h, 23 minutos y 10,86563 segundos. Tal proeza generó una aura de 1.000.000 MegaPotters que fue detectada por la Universidad Invisible de Ankh-Morpork, y más tarde corroborada por el Instituto de Belleza Halitosa de Lepe.
Actualmente hay una pequeña colonia de niños índigo en TelaInco. Esta colonia secreta se esconde tras un programa televisivo llamado "Gran Marrano" creado para ellos exclusivamente, en el cual niños índigo de entre 20 y 40 años pasan por niños normales con comportamientos de lo más mundano. Se cree que también hay algunos de ellos en la isla de los Casposos.
Poderes
Según doctores esotéricos especialistas en viajes astrales y el tercer chakra, estos engendros tienen los siguientes poderes:
- Ver por los ojos.
- Caminar con las piernas.
- Hablar.
- Dicen que sus piernas llegan hasta el suelo.
- Pueden ver auras psicodélicas. Se cree que este es el principal motivo por el cual escuchan a Pink Floyd.
- Entran en un estado de letargo profundo cuando anochece y en la mañana despiertan de el. Como una mini hibernación de 7 u 8 horas.
- Se creía que podían ver el futuro, aunque últimos estudios demuestran lo contrario: El niño no pudo anticipar el pape que le dio el científico por mentiroso.
- El poder de presentar programas de television luciendo motachos de foca y tupes falsos.
Oración real de los niños índigo
no sé dónde debo ir
no sé quién soy ni qué hago aquí;
no sé qué hay a mi alrededor, ni qué hay dentro de mí.
¡Pero déjalo estar así! ¡Déjame estar en el desconocimiento!
¡Amén!