Indiana Jones y el dial del destino

Indiana Jones y el dial del destino

Indiana Jones and the Dial of Destiny

El viejo cascarrabias tenía ganas de zurrar a todos con el látigo.

Ficha técnica

Dirección	James Mangold

Producción	La del ratón.

Intérpretes	Harrison Ford y otros que a nadie le importan.

Guión	El director y otros dos.

Música	John Williams, aún más viejo que el propio Indy.

País	Gringolandia.

Fecha de estreno	Cuarenta años tarde.

Género	Aventura, geriatría, viajes en el tiempo.

Calificación	No apta para quienes quieren viajar atrás en el tiempo para que los nazis finalmente ganen.

Premios	Un aplauso en Cannes y a correr.

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Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal	Indiana Jones y los Terraplanistas tenían razón

Hitler cometió errores. Y con esto, los corregiré a todos.

— Dr. Voller sobre la Segunda Guerra Mundial.

Spielberg cometió errores. Y con esto, los corregiré todos.

— James Mangold sobre Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal.

No creo en la magia. Pero algunas veces en mi vida, he visto cosas. Cosas que no puedo explicar. Y he llegado a creer que no se trata tanto de lo que crees, sino de la intensidad con que lo creas.

— Indiana Jones explicando cómo lograr una erección a su edad.

He sido torturado con vudú. Me han disparado nueve veces, ¡una vez por tu padre! Pero he estado buscando esto, toda mi vida.

— Indiana Jones sobre la jubilación.

Indiana Jones y el dial del destino es la quinta y podemos estar seguros de que la última película de la saga de Indiana Jones, ya que la malvada productora del ratón fracasó con ella tan estrepitosamente en taquilla que dudamos mucho que se lancen a hacer otra más. La película fue dirigida por James Mangold, a quien Steven Spielberg le dejó el marrón, ya que no le apetecía volver a la saga después de las quisquillosas y tocacojones críticas recibidas por su trabajo en Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal, y en esta ocasión se limitó a ser productor ejecutivo junto a su compadre George Lucas, quien a su vez se puso de perfil, dejando el guión al mismo James Mangold y a otros dos tipos.

Harrison Ford por su parte cayó en la pardillada y volvió a embutirse en la cazadora y el sombrero del viejo arqueólogo, viejo esta vez de verdad.

Argumento

Advertencia: Esta sección contiene detalles de la trama y el argumento; si eres tan rarito que prefieres leer el libro o ver la película antes, no te recomiendo que leas esto.

Con lo bien que estaba yo ahora mismo jugando al bingo... ¿Quién me mandaría a mí?

Esta historia empieza en 1944. Los nazis están perdiendo la guerra, Hitler está escondido en su búnker como una rata y ha ordenado a sus oficiales que roben todos los objetos antiguos que puedan, con el fin de venderlos en el mercado negro cuando se fugue a Argentina. Indiana Jones y Shaw, un amigo gordito que tiene, están intentando impedirlo llevándose ellos los que puedan porque también quieren venderlos deben estar en un museo. Cuando encontramos a Indy los nazis están intentando ahorcarlo pero tras una serie de peripecias termina en un tren donde llevan toda la mercancía, incluida la lanza de Longinos. También tienen los nazis en el tren a Shaw, al que pegan solo por diversión. Indy descubre que la lanza de Longinos es más falsa que un dólar de cartón. Voller, uno de los nazis, descubre lo mismo por su lado. Así que Indy la roba para utilizarla como abrecartas y, tras esmochar un montón de nazis, él y Shaw se van con otra reliquia que resulta ser verdadera: la Anticitera de Arquímedes, una especie de mecanismo de relojería. Aunque solo tienen la mitad de la misma, ya que al parecer Arquímedes decidió desmontarla.

Ahora estamos en 1969. El hombre acaba de llegar a la Luna e Indiana Jones está feliz con Marion y el hijo de ambos. Nah, mentira, Indiana Jones está solo y borracho, su apartamento está hecho una mierda y de Marion solo le quedan los papeles del divorcio. Así, mal peinado y tras desayunar whisky de buena mañana, va a trabajar a la uni. Los alumnos cada vez son más vagos y se sacan los mocos en clase, todo un asco. Menos mal que es su último día: se jubilará y se irá a Benidorm. Sus compañeros de trabajo le hacen una fiesta cutre y le regalan un reloj muy hortera para festejar que el chiflado se larga. Indy según sale a la calle se lo da a un mendigo. Cuando se aleja, oye la detonación: vaya, igual no era un reloj y esos cilindros rojos no eran parte de la decoración. Cuando está emborrachándose en el bar aparece Helena, la hija de Shaw, ya fallecido, y ahijada del propio Indy, a la que hace años que no ve. Helena le recuerda que su padre tenía el convencimiento de que la Anticitera permitía predecir perturbaciones en el tiempo.

-Helena: ¡Mi padre estaba convencido de que la Anticitera puede percibir perturbaciones en el tiempo, Indy!

-Indiana Jones: Un barómetro no es una cosa tan rara, Helena.

-Helena: De esas no, imbécil, de viajar al pasado y al futuro.

-Indiana Jones: Tu padre estaba chiflado.

-Helena: ¿Me dejas la Anticitera? Es para un trabajo de Conocimiento del Medio.

-Indiana Jones: Vale.

Cuando van a por ella unos tipos de la CIA se cargan a media universidad para quitársela y además revientan el desfile en honor de Lance Armstrong, Aldrin y Collins. Que luego resulta que la mitad de estos agentes eran nazis cuyo jefe era el tal Voller que ahora se hace llamar Smith y trabaja para el Gobierno de Gringolandia. Un nazi trabajando para el gobierno de Estados Unidos ¿qué escándalo, verdad? Helena se sale con la suya y se lleva la media Anticitera o Dial (que también se llama así).

Indy va tras Helena a Tanger, donde ella está intentando vender el medio Dial en el mercado negro para pagarse unas deudillas que había contraído con la mafia, qué cosas, incluida la dote nupcial que le había pagado el hijo del capo, antes de que ella le plantara en el altar. También se ha echado a Teddy un chico que robaba carteras en la calle y que ahora le hace de una especie de criado para todo. Tras unas cuantas persecuciones en patinete por las calles de Tanger el medio Dial se lo llevan los nazis y el hijo del capo de la mafia descubre el amor verdadero al besar el suelo. Indy, Helena y Teddy se van a buscar el Grafikos, que es una tablilla en la que se indica dónde está la segunda parte de la Anticitera. Helena sabe dónde está el Grafikos porque robó leyó los cuadernos íntimos de su padre, donde él anotaba sus descubrimientos y sus fantasías sexuales.

Entonces Indy, Helena y Teddy van a Grecia donde está Renaldo, pero no ese futbolista ese paquetorro que decía que era como Ronaldo pero con e, sino un marinero amigo de Indy que tiene un barco. Así le embarcan y durante el viaje en barco Indiana Jones le dice a Helena que él y Marion se separaron debido a la muerte de su hijo Mutt, pero no porque Indy lo matara, aunque a veces no le faltaran ganas, sino porque el muy imbécil se enroló para la guerra de Vietnam y se hizo el Rambo con fatídicas consecuencias. Ambos padres se pusieron muy tristes y la convivencia se volvió un infierno. Se dejan entonces de cháchara y se ponen a bucear encontrando el Grafikos, tras una emocionante batalla con anguilas que a Indiana le dan miedo porque le recuerdan a serpientes y porque se le intentan colar por sendo orificio.

Parece un engranaje del carrillón de tu abuela, pero con el Dial del Destino puedes viajar por el tiempo, e incluso sintonizar Cadena Dial.

Volviendo a la superficie se encuentran a los nazis, que han abordado el barco. Entonces ellos hacen cosas de nazis, como matar a Renaldo, y el trío protagonista escapa en el barco en el que habían llegado los propios nazis, llevándose el Grafikos. La información que venía en el mismo (una receta de ravioli) era irrelevante, pero al quitar la capa superior del mismo, hecha con cera de los oídos del propio Arquímedes, descubren un disco de oro (que Teddy intenta robar a Jones) donde se indica que tienen que buscar la tumba del inventor siracusano en Sicilia. Los nazis les ven cambiar de rumbo a lo lejos y se van detrás de ellos.

En Sicilia los nazis secuestran a Teddy. Como a Helena e Indy se les hace más cargante que otra cosa la verdad es que no hacen mucho por ir a rescatarle: así se hace que el público empatice con los protagonistas. Entonces Indy y Helena descubren la tumba de Arquímedes en una cueva y con ella la segunda parte del Dial, pero justo llegan los nazis que se lo mangan, disparan a Jones y se llevan tanto al Dial como a Jones (dos reliquias mejor que una). Helena se va con Teddy que a su vez se ha fugado matando al nazi grande, aprovechando sus cortas luces.

Los nazis despegan con Jones y se visten ya de nazis propiamente. Le revelan que su plan es matar a Hitler por chapucero. Que sí, que entienden que empezó bien con eso de la política, pero que luego gestionó la guerra peor que Bartomeu el Barcelona. Así, cargándoselo, podrán aspirar a la victoria. A Jones le llevan para que sea testigo de esto y se joda. No reparan en que Helena se les ha colado de polizonte y Teddy va en una avioneta detrás. Cuando van a coger el vórtice temporal Jones les dice que den la vuelta, que no han tenido en cuenta no se qué milongas de la deriva continental y que no van a ir a 1939, sino a algún tiempo random que a saber. Los nazis se descojonan de él pero...

... Indy tenía razón. Aparecen en pleno sitio de Siracusa y son derribados por lanzadas de siracusanos y romanos. Helena y Jones logran saltar en paracaídas pero los nazis quedan despanzurrados y semicarbonizados, parecen una hamburguesa poco pasada. Allí conocemos a Arquímedes que manga un reloj del cadáver del nazi jefe, que se ve que el siracusano además de un gran inventor era un poco chorizo, y examina el dial del futuro, ya montado, que le permite a él montarlo en el pasado, pues se ve que tan listo al final no era y estaba atascado el hombre con el ensamblaje. A Jones le empieza a hacer efecto la pérdida de sangre por el balazo y no dice más que gilipolleces. Helena le da una hostia para dejarle en k.o. y se lo lleva con Teddy en la avioneta para volver al presente antes de que el vórtice temporal se cierre.

Jones despierta en su casa en Nueva York. Helena está con él y le dice que como se ponga tonto le sacude de nuevo, que esto de dar hostias todo es empezar y ella ya le ha pillado gusto al tema. Aparece Marion que hace protestas de que Indy tiene el apartamento que da vergüenza verlo. También están Sallah y sus nietos, que se van con Helena y Teddy a comprar droga para dejar a Indy y Marion que arreglen sus diferencias. Ellos se reconcilian en una escena muy tierna y la saga concluye felizmente con una apología de las relaciones sexuales en la tercera edad.

Producción

Digan lo que digan, Helena e Indy tenían tan buena química que descubrieron incluso el contenido del maletín de Pulp Fiction

George Lucas estaba en la idea de hacer de Mutt Williams, personaje presentado en Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal como hijo de Indiana Jones, el protagonista de una nueva saga de películas. Pero alguien que le quería le hizo ver que Mutt es algo así como el Jar Jar Binks de Indiana Jones y que no le había caído bien a nadie. Por otra parte, el actor que lo encarnaba, Shia LaBoeuf, se había dedicado a hacer declaraciones altisonantes rajando de la película, del reparto, del director, del equipo de producción y, por lo que sea, a Steven Spielberg no le hacía muy feliz la idea de tenerlo de nuevo a sus órdenes. Era ilegal matar al actor, pero podían por lo menos matar al personaje. Así lo hicieron y, satisfechos, ambos se bajaron de la primera línea del proyecto y se fueron a comer palomitas en la producción ejecutiva mientras veían cómo lo desarrollaban otros.

Filmación

James Mangold hizo un estudio minucioso de las anteriores entregas de la saga dirigidas por Spielberg para poder lograr, calcar el estilo, que no se notara el cambio de realizador y tener satisfechos a los fans. Llevó esto tan al extremo que comenzó a vestirse como Spielberg, a imitar el peinado de Spielberg, a andar y a hablar como Spielberg, para que los actores tampoco notaran la diferencia. La película sufrió varios retrasos porque la productora dudaba de la salud mental de Mangold y le obligó a tomarse algún que otro descanso en una clínica de reposo.

Para rodar esta película James Mangold y el resto del reparto utilizaron el Dial del Destino para viajar, entre otros momentos históricos, a 1990 y rodar allí la película con Harrison Ford joven. Después volvieron a 2022 con las imágenes ya rodadas y mediante inteligencia artificial envejecieron a Harrison Ford para que aparentara la edad del Indiana Jones viejo. ¡Un prodigio de tecnología, da el pego perfectamente!. Si bien algunas escenas iban a tener lugar en la India, finalmente se trasladaron a Marruecos debido a la Pandemia de COVID-19, pues para los norteamericanos todos los morenos son más o menos lo mismo y no iban a notar la diferencia.

Recepción

La película, estrenada en tiempos imbécilmente polarizados como comienzos de los 2020's, recibió bastante odio en redes sociales por parte de los alt-righters porque se culpaba a la influencia del movimiento woke de que fuera coprotagonizada por Helena, una mujer. Se ve que los wokes debieron viajar, al igual que Indy y Helena, al pasado para que las anteriores películas de la saga fueran coprotagonizadas por personajes como Marion Ravenwood, Willy Scott o Elsa Schneider.

Por su parte la mayor parte de los fans de viejo cuño de Indiana, tan ancianos como el propio personaje, no fueron al cine y prefirieron quedarse en su casa en pantuflas esperando a que la película estuviera disponible en las plataformas digitales. Es por ello que si bien el paso de la película por las salas de cine se saldó con un sonoro batacazo, tuvo bastante éxito en su segunda vida digital, donde fue degustada, coñac en mano y mantita en las rodillas, por estos vetustos seguidores.