Ataque terrorista al senado italiano de enero del 2022
El ataque terrorista al senado italiano de enero del 2022 se refiere a una serie de atentados perpetrados por un grupo ecoterrorista mejor conocido como Avalancha el día 17 de enero de 2022. Los ataques se dividieron en varias fases, comenzando con un ciberataque y finalizando con una de las líderes terroristas tomando el liderazgo del senado italiano durante varios meses. El control de los terroristas sobre el organismo estatal duraría hasta septiembre, cuando los distintos grupos que daban su financiamiento a través de internet desviaron dichos fondos hacia tierras anglosajonas tras la muerte de la Reina Isabel II del Reino Hundido para homenajear su deceso de la forma más madura posible.
Antecedentes
El grupo ecoterrorista mejor conocido como Avalancha se formó durante 1997. Sus primeras campañas consistieron en atacar grandes petroleras del mundo sin importar las bajas civiles, aunque de manera inadvertida se creó un culto en torno a una de sus figuras más prominentes, la japonesa Tifa Lockhart. Luego de años de deliberación, expertos en arte japonés y anatomía nombraron al culto como waifuismo. Tras aquellos primeros ataques a fines de los 90 el grupo se matuvo en un hermetismo casi total hasta que finalmente, en 2015, le enviarían una nueva advertencia al mundo, la cual tuvo varios problemas de desarrollo hasta finalmente ver la luz en 2020.
El senado italiano, por su parte, cuenta con una historia muy rica en lo que a introducir objetos de un tamaño que va de unos quince a veinte centímetros y que suelen variar entre tener punta roma o afilada en cuerpos ajenos se refiere, tal como fue la muerte de César en los idus de marzo, o la introducción de un aproximado de doscientos conos a trabajar durante la segunda guerra mundial, para luego despedirlos a todos e instaurar el Senado de la República, organismo que no encontró estabilidad hasta que finalmente Silvio Berlusconi le otorgó un propósito basado en introducir objetos de un largo aproximado de quince centímetros con punta roma en el cuerpo de personas a las que pedía que lo llamaran César.
Perpetración del ataque
Todo comenzó cuando la célula terrorista dirigida por Barret Wallace reunió un grupo de jóvenes idealistas quienes se encontraban cansados de la pasividad de otros grupos de ecoterrorismo, como Greenpeace. El grupo de Wallace estaba conformado por Biggs en el papel de amigo de la infancia del protagonista hacker, Wedge como el piloto rebelde alivio cómico, Jessie Raspberry era la experta en explosivos, Cloud Strife que en ese momento trabajaba como mercenario y Tifa Lockhart como apoyo anímico. Durante la reunión por Zoom del senado italiano organizada por la senadora del Movimiento Cinco Estrellas, Maria Laura Mantovani; Biggs cortaría la llamada y el resto del grupo ingresaría al recinto para tomar rehenes y finalmente hacer explotar una bomba en el senado, asesinando a todos en el proceso.
Llegado el momento de la exhibición del Premio Nóbel de física Giorgio Parani, efectivamente se cortó internet y Avalancha entró en acción, pero olvidaron el detalle de que el mundo se encontraba en caos debido a la pandemia de COVID-19 y todas las reuniones del senado eran home-office. Habiéndose frustrado el plan, decidieron realizar una retirada estratégica, en la cual se olvidaron la laptop de Biggs conectada a la llamada de Zoom, así como a Tifa y a Cloud, quienes aún no estaban enterados del cambio en la estrategia y seguían colocando explosivos por todo el senado mientras el mundo entero era testigo del comienzo de una nueva era en Italia.
Secuelas en el gobierno italiano
Noticieros y periódicos de todo el planeta se inundaron con imágenes y fragmentos de la grabación en la cual Cloud insertaba el detonador en los bloques de C-4 de Tifa hasta lograr hacerla trending en X, lo que llevó a una elección democrática en la que participó todo el noble electorado de la ya extinta República Anarcofascista de Twitter y que tuvo como resultado la elección por casi unanimidad de Tifa Lockhart como presidenta del Senado de la República, en una elección legitimada por Silvio Berlusconi.
Gobierno de Tifa Lockhart
Inesperadamente, Tifa se encontró presidiendo uno de los organismos más poderosos del planeta. Miles y miles de personas alrededor del mundo comenzaron a peregrinar hacia Roma no para ver al Papa ni al Coliseo, sino para observar el momento histórico en que una terrorista se convierte en algo más grande que ella misma, superando la fama de italianos de pura cepa como Mario, Mario Balotelli, y Mario Berti.
Sin embargo, el tiempo de liderazgo de Lockhart duró poco debido a que en los meses posteriores al hecho la República Anarcofascista de Twitter decidió centrar su atención en otros eventos alrededor del mundo, más exactamente presentar sus respetos ante la muerte de la Reina Isabel II. Esto trajo varias consecuencias negativas no solo para Italia sino también para Japón, patria madre de Lockhart.
Para Italia, el fin del gobierno de Lockhart significó una pérdida gigantesca en lo que a turismo se refiere. Pósters, almohadas, figuras y una gran cantidad de merchandising importado desde Japón quedó sin venderse ya que la figura más importante en la historia del senado italiano había sido súbitamente reemplazada, siendo su paradero desconocido. Hay quienes se aventuran a decir que Tifa volvió a su Japón natal, otros que se unió a un escuadrón anti bombas y los más escépticos afirman que su presidencia en el senado fue en realidad una presidencia títere orquestada por Tetsuya Nomura, primer ministro japonés.
Tensión con Japón
Muchos habitantes italianos pusieron el grito en el cielo al conocer la noticia de que una persona de otro país presidía un organismo ajeno a su tierra natal. Grupos ultraconservadores comenzaron a perseguir japoneses por las calles de Italia pidiendo decencia y que el gobierno debería actuar en concordancia a las políticas internacionales de Wikia. El primer ministro japonés hizo caso omiso a los reclamos italianos y decidió seguir exportando iconografía de su máxima musa.
Sergio Mattarella, presidente de Italia, amenazó públicamente a Lockhart, a Nomura y a Avalancha. Sus palabras ante la prensa fueron "— Cazzo di merda, estas figuras son contenido profano y de mal gusto. No tengo más remedio que requisar todo esto y llevarlo hacia mi casa. Los terroristas japoneses deberían arrepentirse antes de que caiga desde el cielo un diluvio de destrucción, inédito en este mundo". El gobierno de Japón hizo caso omiso a las amenazas, aludiendo que los únicos que cumplían su palabra en lo que a arruinar países ajenos se refiere son los Estados Unidos.
Esta es la clase de representación artística que defendían los grupos ultraconservadores religiosos de Italia.
Una de las estatuas requisadas por Mattarella.
El mundo del cosplay fue uno de los grandes ganadores debido a la popularidad de Lockhart, así como a la excentricidad de su atuendo.
