Juego de palabras
Figura literaria (de figurantes me figuro porque yo lo valgo) que algo desconfigura el orden del verso, de modo inverso a la redundancia, no figura algún desorden. Pido orden en abundancia pues en la INSERSO y en el reverso de su figura y su borde, acorde a lo que tengo constancia, no hay acordes perversos de figurar en plan borde.
Historia
Entramos en materia y destacamos cierta histeria en su historia. De su desarrollo y de esos rollos hablo ahora y sin demora, pues ya es hora.
En sus inicios fueron Jesús y Susi (no la del sushi) los primeros en usarlos (en USA). Pero alli se abusa, Bush prefiere un obús antes que un bus, vacilarle a la URSS, y nosotros preferimos jugar al mus online con el mouse comiendo mousse o algún cuscús. Por eso aquí este juego entró más tarde, por tal de que el fuego aquí retarde pasamos de la USA un rato y escuchamos a Lobato, que por Alonso lo da tó y por Montoya se le va la olla a Camboya me parto la polla aunque no ya, pues Montoya dio dos yoyas a su equipo en plan paranoia y se fue a hacer el indie en las carreras de Indy.
En castellano fue el sirviente de Cervantes quien cebó antes sus cimientos, y al Manco de Lepante no le hizo falta ser Dante ni pedante para pedir a su sirviente su vientre la simiente de este arte (si no miente mi amante, no querrá que la suerte tiente y a su madre mente pues es quien pone en mi mente el texto siguiente).
Poesía
Se utiliza en la poesía de Poe y cía. no en plan policía, sino por Itziar, novia de Poe (antes de Joe y Moe), que tocaba el oboe. La chica era muy astuta, decía "haz tu también la colada" y siempre colaba, Poe estaba colado por sus huesos y había encolado su casa de sus fotografías.
Oscar Wilde otro humilde escritor de mil demonios, usa este recurso y es su precursor, le dio impulso. Nadie se lo impuso, él solito se lo propuso. Fue algo confuso que un escritor que prefería el sadomasoquismo a la doma o a la dama venciera el pulso y con su discurso le diera fama, ya que en la cama veía una dama y entraba en coma, le temblaba el pulso y prefería sentir el pulso de un recluso que le diera impulsos o que se la coma.
Y que decir de Jorge Manrique, estancado en el dique de escribir a su padre, encontrar este recurso fue su desmadre, desapareció el tabique que limitaba su poesía . Supo adaptarse a su muerte con más o menos suerte, siendo fuerte y dejando el chupo se metió en el grupo de Reverte, y ahora de leerte me ocupo.
Es un recurso que toma curso sin más discurso, en el son cabrón del reggaetón, que se usa, abusa y reusa (hasta en USA) haciendo verso sin nada, nada, nadita de esfuerzo. Cosa que se nota, se marca y se remarca en todas sus canciones causantes de depresiones.
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