Historia Medieval de África
Al principio...
Bueno, la Historia Medieval, agarra y empieza un día de esos. Se sabe que en la edad media, los colonos de Mochosvolavia comerciaban con el limítrofe país de Rotrofomovia, objetos varios, y gracias a este tipo de comercio el Rey Bigornio del Cazote, juntó un gran ejército e hizo mierda a sus vecinos, que nada tenían que ver en el asunto, pero con eso les dejó claro quién se la aguantaba más. Así y todo, y contra el código penal ateniense del siglo II a. c. hubo una importación de animales de Rospotavia (según el filósofo Jujeño en su libro La vida salvaje de la Puna, donde hace hincapié en los Leones, Tigres y Maraños), que llevaron a la ruina a dos grosos imperios de cuatro habitantes. Mientras tanto en Peruvia, al oeste del mar Mediterráneo se creaba una religión alrededor de un tótem de vidrio que luego fue banalizado y utilizado como prototipo para el goce sexual de la población femenina. De esta manera se abrió un gran comercio de bolognos con Mansabia del Noroeste de africa.
Un poquito más tarde...
Pero no podemos dejar de mencionar que cuatro años más tarde, Seobundio el Groso descubrió oro en las montañas del Jamón Cocido, y con esto su imperio creció. Y así, con su ambición a flor de piel, compró todas las prostitutas de Europa y convirtió a su imperio en un jolgorio zarpado en gatos.
Los científicos de su imperio fueron los que inventaron el masapán de cemento, que fue utilizado como bala para las catapultas con las que asediaron el país vecino de Trochangosta. Ya para esta altura Su majestad había alcanzado vastas extensiones de tierra. Por lo que se puede saber a través de precisas fuentes extraídas la revista Penthouse de antaño, fue el más extenso y poderoso imperio jamás visto en la historia. Iba desde más allá, hasta por allá, donde se pone el sol, y para aquel lado, kilómetros y millas. Tremendo, era así de grande. Una cosa de locos.
Con la campaña que se llamó luego “La del mono”, conquistó vastos territorios a lo largo y ancho del otro extremo de la linea del mapamundi en pergamino. Por ahi, por donde se hundian los barcos. Viste donde no se ve nada, bueno por ahí. Así fue como llegó a la corte del rey, un científico que a base de vitrofusión, creó el primer tetrabrik de vidrio, que fue vendido masivamente por toda el África medieval, y despertó la curiosidad de grandes, y chicos…
Claramente se expandió tanto que terminó por explotar en infinidad de reinos que se trenzaron a roscazos entre sí. Seobundio jamás logró saber qué pasó. Una horda de delfines a caballo lo raptó y lo llevó al palacio de Papá Noel donde los renos lo violaron día y noche, y aun hoy en dia si prestan atención en una noche fría y silenciosa apartado del hiracundo bullicio, podrán oir muy lejanamente los desgarradores gritos del rey mientras es sodomizado dia tras día, hasta el fin de los tiempos.
Más tarde todavía...
Ya hacia el siglo XI de E.M.A. (Edad media Africana), se sabía que los africanos ostentaban los mejores tatuajes del mundo, (sin mencionar el trozo), y Mao Tsé Sunga, famoso por haber sido el inventor del tatuaje por hipodérmica, enfurecido por la rompida de huevos que esto le ocacionaba por ilustres ciudadanos, decidió irse al Oriente lejano, a fundar su propia república, a la que llamó la Grosa Chinga. El Rey Gaboto, hermano menor de Mao quien gobernaba en extremo mas lejano de la Concha de la Lora, le preguntó cómo iba hacer para diferenciarse de ellos, y así que decidió pegarse unas cintas scotch en los ojos y para estirárselos. Nunca se supo nada más de él, hasta que se descubrió un barco que naufragó en la costa oeste de Gribaldia proveniente de Escocia, repleto de containers de cinta scotch.
Tremenda fue su desasón al enterarse de este acontecimiento, y enfurecido como la misma mierda, el Rey Gaboto, Dios y Señor del mundo conocido, decidió quemar completamente la ciudad con habitantes y todo. Pero estúpido de él mismo se olvidó de salir cuando dio la orden y quedó como un churro quemado. Así terminó su reinado de anarquía sedienta de whisky y damicelas.
Ahora bien, uno de sus orfebres más famosos, creó para el Rey Zabaramba el Culebrón, cuñado tercero de Gaboto, una espada loca llamada escálibur, que en idioma africano medieval significa "Para vos, la mía", pero por falta de pago se la regaló a un rey de una isla lejana. Zabaramba intentó remediarlo regalándole una docena de prostitutas y una pila de wiski en caja, pero el orfebre había descubierto que ya se las habían pasado por todo África, y no las quizo. El rey, furioso, lo mandó a destazar vivo pero el orfebre sabedor de lo que le iba a pasar, se tomó el buque y rajó al sur para Magovia donde lo esperaba un helicópero que lo llevó a Marte. Fin de esta época.
Y muuuucho más tarde...
Ya hacia el siglo XV de E.M.A. llegó un contingente de Romanos con bebidas y regalos, y se dice que se hizo la fiesta más zarpada de la historia. Cuentan los libros que corrió sexo y metal como agua, y desfilaron putas, travestis, muertos, camellos… Y en un escrito del cantautor Trozombus se cuenta que cayó una manada de los más fieros y grandes habitantes de las profundidades del lejano sur y portadores de una trocha no angosta, aprovechándose de la debilidad que provocó el alcohol en las mentes de los festejantes, hicieron mella hasta en los huecos más humildes. Así es como se introdujo el mestizaje entre los africano, que hasta entonces no existía.
La historia medieval de África termina con el nacimiento de Dios.