Síndrome del Cubículo Crónico

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192px-Star of life2.png Advertencia: Inciclopedia sí da consejos médicos (no como Wikipedia), gracias al gentil auspicio del
Dr. Leandro Gao y su staff de enfermeras.
Esta es la cara que se le pone a uno cuando le enseñan su cubículo nuevo puesto de trabajo ergonómico.
Cita3.pngLa iglesia niega la existencia del Síndrome del Cúbiculo Crónico.Cita4.png
Benedicto XVI sobre Síndrome del Cúbiculo Crónico
Cita3.pngPuede que este Síndrome ni siquiera exista, pero me encanta difamar información por Internet para sembrar el caos.Cita4.png
Dogbert sobre Síndrome del Cúbiculo Crónico.
Cita3.pngSe cree muy importante... con sus tres paredes... y su bote con chinchetas.Cita4.png
Homer Simpson sobre uno de sus compañeros que sí tiene cubículo.
Cita3.png¡Te juro que lo pillé en un baño público!Cita4.png
Esposa anónima sobre el origen de su Síndrome Cubicular.
Cita3.pngNo entiendo este Síndrome.Cita4.png


¿Qué es el Síndrome del Cubículo Crónico?

Tú no mereces entrar en mi cubo.

¡Cuán afortunados quienes se hacen esta pregunta!.

El Síndrome del Cubículo Crónico comprende un conjunto de signos y síntomas similares a los de la esquizofrenia que suelen manifiestarse de lunes a viernes, generalmente entre las 8:00 y las 15:00 horas del día, si bien en casos graves aparecen también entre las 17:00 y las 20:00 horas. Un 98% de los pacientes refiere, además, que dicho trastorno remite espontáneamente los viernes, para reaparecer súbitamente los lunes. Los primeros episodios surgen como consecuencia de la instalación de cuatro paredes, cuyo tamaño y color pueden variar en función de lo capullo que sea tu jefe de quien las elija, alrededor de un individuo hasta entonces mentalmente estable.

Los síntomas

  • Incontinencia urinaria. El sujeto duplica sus visitas al cuarto de baño, viajes que aprovecha para entablar algunas conversaciones con esa gentuza sus compañeros de trabajo a los que les comenta las inclemencias climáticas, los resultados deportivos y las novedades de la prensa del corazón.
  • Sensación de boca seca. La boca del individuo se convierte paulatinamente en un desierto lleno de arena que pide algún tipo de líquido de forma urgente. Este síntoma se manifiesta entre 15 y 20 veces a lo largo del día, suscitando en el sufriente unos deseos imperiosos de acercarse a la máquina del agua, a la del café, a ambas al mismo tiempo aunque estén en extremos opuestos, o al cuarto de baño. Esta solución momentánea puede producir efectos secundarios tales como: conversaciones insulsas, saludos de mala gana, miradas cruzadas de odio y cotilleos en las zonas de refrigerio.
Faemino es más feliz que . Faemino tiene un cubículo, ¿y ?
  • Sensación de invisibilidad: El individuo confinado en un cubículo tiene la creencia de que, durante su jornada laboral, va adquiriendo el color transparente, de tal modo que nadie llega a verle durante un periodo de aproximadamente ocho horas en las que puede dar rienda suelta a todos sus instintos.
  • Conductas obsesivas: Quien padece este tipo de trastorno presenta alteraciones de conducta de tipo obsesivo como son: colocar más de veinte veces al dia el montoncito de folios que hay en la mesa, contar tres veces los bolígrafos antes de ir al cuarto de baño, poner recta la foto que ha colocado a modo decorativo entre quince y cien veces, escribir artículos de extensión grotesca en la inciclopedia, escribir artículos de extensión grotesca en la nunyepedia, escribir artículos de extensión grotesca en la wikipedia, repetir frases una y otra vez en sus textos, repetir frases una y otra vez en sus textos, y repetir frases una y otra vez en sus textos.
  • Conductas especialmente extrañas: Los afectados de este síndrome suelen presentar -además de las anteriormente descritas- conductas especialmente extrañas: ingesta de materia no alimenticia (pica) como goma de borrar, clips papeles o chinchetas; alivio del picor en las fosas nasales; miradas asesinas, emisión de descalificativos hacia los compañeros de trabajo, y agresiones de violencia extrema a sus congéneres como consecuencia de un principio de paranoia galopante; destrucción lenta y progresiva de los componentes del cubículo; y desplazamientos horizontales por el suelo derivados de la sensación de agorafobia producida al abandonar el cubo.
  • Conversión en cubo. El sujeto, en las etapas finales de la enfermedad, se convierte en un cubo bastante gordo. En estos momentos, el paciente es de difícil tratamiento, pero de fácil organización en estanterías y/o almacenes.


Diagnóstico

¿Cómo sé si lo tengo?

Si cree que lo tiene, es que lo tiene.

No es suficiente. ¡Necesito un test!

De acuerdo, de acuerdo. No se altere por favor.

Si no tiene usted la capacidad de autodiagnosticarse la Inciclopedia pone a su disposición un fabuloso test para aclarar sus dudas. Y recuerde que debe ser completamente sincero incluso en lo referente a temas sexualmente escabrosos.

.No funciona. Es de mentira. Mwahahahahahaha
  • ¿Ha tenido usted sed en los últimos dos meses?
    • Si.
    • No.
  • ¿Ha ido a mear en las últimas 48 horas?
    • Si.
    • No.
  • ¿Ha visto alguna vez un objeto con forma de cubo?
    • Si.
    • No.
  • ¿Ha comido alguna vez algo cortado en cubos?
    • Si.
    • No.
  • ¿Es usted un cubo?
    • Si.
    • No.


Soluciones. Si ha contestado afirmativamente a alguna de las preguntas anteriores es indiscutible: tiene usted el Síndrome del Cubículo Crónico.

Tratamiento

El tratamiento del Síndrome del Cubículo Crónico está compuesto por una amalgama de subtratamientos similares a los del hipo, por lo que si usted padece este Síndrome resulta totalmente imprescindible que realice las siguientes operaciones cada vez que llegue a casa después de un largo dia de trabajo:

  • Beba usted un vaso de agua al revés, es decir, vía urinaria.
  • Aguante la respiración el máximo tiempo posible (como mínimo dos horas).
  • Pídale a alguien que le de un susto (preferiblemente mortal).
  • Chupe un limón poniendo la cara de El Fari.
  • Sujete con su nariz una cuchara chupada.
  • Golpee a un payaso con un matafuego hasta dejarlo agonizando.
  • Consiga 20 litros de Napalm, Fosforo Blanco u otra sustancia de similares caracteristicas ígneas, un kilogramo de panchitos y queme su cubiculo y el de sus compañeros; después observe con gozo el espectaculo mientras come relajadamente los panchitos. Puede que no sea infalible, pero le relajará.
  • En el fatídico caso de que usted se haya convertido ya en un cubo -y solamente bajo estas circunstancias- héchese a rodar por el suelo en círculos a fin de conseguir esas formas redondeadas que los demás poseen y valoran. Procure no excederse en los años de rodamiento (se recomiendan entre dos y siete) ya que su síndrome podría derivar en el ya conocidísimo Síndrome del Esférico Crónico.
  • En caso de duda consule a su inciclopedista más cercano o, en su defecto, a su camello; si bien lo más probable es que el primero le obligue a solicitar los servicios del segundo.

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