Bayreuth

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Dieser nazi-Artikel aus Deutschland macht viel mehr Spaß, wenn Sie beim Lesen Ride of the Valkyries hören, wie es Richard Wagner befiehlt
Bayreuth
AlemaniaBanderaAlemania.png
Escudo de Bayreuth
Lema Ride of the Valkyries

Establecida En la Edad Media

Tipo de Gobierno Europeo

Alcalde Angela Merkel

Situación En Baviera BanderaBaviera.png

Población Miles de Valkirias

Gentilicio Valkirias de Alemania

Himno Ride of the Valkyries
Cita3.png¡Diese Stadt wurde von den Walküren gegründet!Cita4.png
Adolf Hitler sobre la Bayreuth.
Cita3.png¡Aquí fue conde cayeron las Valkirias!Cita4.png
Tío1.jpg cuando visitó la casa de Richard Wagner en Bayreuth.

Bayreuth, o Bayereuth (en alemán) es una ciudad nazi de Alemania ubicada en el estado de Baviera. Fue una ciudad fundada por satánicos Elfos Silvanos Germanos, pero se volvió famosa cuando millones de Valkirias de Escandinavia se estrellaron de cara contra Germania cayendo exactamente en Bayreuth, dejándola hecha una Mierda. Años después, un acaudalado[1] compositor de grandes y hermosas patillas llamado Richard Wagner también se estrelló de cara contra Bayereuth (Al igual que las Valkirias) y ese mismo día construyó su hermoso nido allí. Al poco tiempo Wagner comenzó a crear monstruosas melodías satánicas como Ride of the Valkyries, e inclusive quemó con Fuego la ópera de Bayreuth lo que lo convirtió en un semidiós de la mitología germánica.

Historia

Inicios mediocres medievales

Valkirias cayendo hacia Bayreuth.

Todo inició en la Edad Media, cuando unos amables campesinos del Reino de Baviera decidieron crear una hermosa ciudad campestre en la cual pudiesen vivir en paz y tranquilidad siguiendo las enseñanzas de Dios. Fue así como los campesinos del Pueblo Llano crearon el hermoso poblado de Bayreuth. Sin embargo, lo que no sabían es que en los bosques aledaños vivían Demonios y Elfos Silvanos Satánicos que al ver a los aldeanos ingresando a su propiedad raptaron a 666 personas y realizaron varios Sacrificios Humanos con los aldeanos secuestrados, luego realizaron una maldito Ritual Satánico a la luz de la luna sangrienta con los cadáveres quemados y mutilados de los aldeanos al ponerlos sobre el suelo en forma de la Estrella de David rodeando al poblado de Bayreuth por completo, todavía existían algunos pobladores en Bayreuth que al verse rodeados por los Demonios comenzaron a gritar de miedo con todas sus fuerzas. Los Demonios y Elfos Silvanos realizaron infames actos de brujería lograron abrir un Bujero negro en el Cielo que conectaba directamente con Escandinavia y de la cual cayeron millones de Valkirias estrellandose de cara contra Bayreuth. Luego de ese incidente, Federico Barbarroja llego a Bayreuth y al ver los cadáveres de las Valkirias en pleno estado de descomposición vomitó y anexó la ciudad al Sacro Imperio Romano Germánico. Quitando las anteriormente mencionados sucesos, minucias anodinas y cotidianas en cualquier pueblucho germánico (más un poco de peste negra y una satánica Reforma Protestante) no volvió a pasar nada relevante allí hasta el siglo XIX.

Siglo XVIII: un teatro barroco muy cuqui

No tan rápido. Antes del siglo XIX, en el XVIII, gobernaron Bayreuth el Margrave Federico y la Magravina Guillermina (la hermana fea, y tal vez por ello la favorita, de Federico el Grande). En este periodo construyeron varios edificios barrocos, entre ellos un teatro de ópera de lo más apañado y coqueto.

Siglo XIX: el siglo del patillas

Caida-de-las-Valkyrias.gif

Ahora sí. Ya en la época decimonónica un emperador enano franchute llamado Napoleón Bonaparte invadió Bayreuth y la dejo nuevamente hecha una mierda, con lo cual todo volvió a su ser. Y no contento con eso la incrusto dentro de la Confederación del Rin. Mientras esto sucedía, pocos kilómetros más al norte, y sin que aparentemente tuviera relación, el heroico Richard Wagner nacía en los restos de Leipzig.

En el año 1872 Richard Wagner, tras una agitada vida huyendo de sus múltiples acreedores, había logrado engañar a un pringao (Luis II de Baviera) para que le pagara su propio parque temático con casinos y con furcias. Estaba pues buscando solar para instalarlo por cerca del costado del río Meno, cuando de repente se tropieza y se da de cara contra Bayreuth golpeándose muy fuerte en su enorme y desproporcionada cabeza.

Orquesta de Bayreuth.png

Wagner quería fundar un Festival de esos de verano a los que va la gente a escuchar música -la de Wagner en este caso ¿qué te pensabas?- y a drogarse y la villa de Bayreuth le pareció un lugar muy bucólico a tales efectos, ya que estaba habitada exclusivamente por atrabiliarios paletos a costa de los cuales uno podía echarse unas risas. Cuando las autoridades locales se enteraron de sus intenciones, ávidos de avivar el turismo rural, le recomendaron que utilizara el teatro de los Margraves como garito donde interpretar sus óperas. Wagner lo inspeccionó y comunicó a las autoridades su veredicto al respecto con la amabilidad y diplomacia que le caracterizaba: que le parecía una putísima mierda, dijo.

Entonces se dispuso a construir su propio teatro, con casinos y con furcias -aunque en realidad pasó de las furcias, y de los casinos- que en lo sucesivo se convertiría en la principal seña de identidad del villorrio. A los pocos años culminó su proyecto con la celebración del primer Festival de Bayreuth, un evento de grandísimo alcance social y artístico al que acudieron algunas de las principales figuras de la intelectualidad y la música de la época, y también Tchaikovsky.

Muy celebrado por los paisanos de la zona, acudía todos los domingos a tomarse el vermú al bar del pueblo y ponía acento aragonés cuando se pimplaba, estableció también su residencia en el mismo, construyendo el otro edificio emblemático de la localidad, la Villa Wahnfried -allí donde su Esperanza halló su Paz, no sé qué opinaría su mujer de las tales Paz y Esperanza, a buen seguro dos querindongas que se había echado-. Cuando murió se hizo enterrar allí mismo en el jardín, junto al perro.

Siglo XX: las visitas del Adolfo

Los descendientes de Wagner supusieron un gran apoyo para Hitler en momentos de necesidad.

En 1923, la nuera de Wagner, Winifred, aburrida como estaba de que su marido Siegfried fuera marica, conoce a un hombre de fuerte carácter, mucha labia, grotesco bigote y ridículo flequillo. Y queda prendada por estos varoniles atractivos alpinos del atrabiliario politicucho Adolf Hitler. Y como coincide que Wagner era el compositor preferido de Adolfito, invitado por ella, va en plan fanboy a presentar sus respetos a la reconocida familia Wagner.

Y el muy gorrón se instala en casa, para disgusto de Siegfried, cuyo estudio desmantela la dominante Winifred para poner el dormitorio de Adolfito. Los hijos de Fidi (como llamaban a Siegfried en casa) trataban a Adolfito de "tito Wolf" y éste no soportaba al gorrón, que además era como esos cuñados que nunca saben cuando callarse a tiempo.

Solo logró librarse de él cuando tras el Putsch de Múnich le metieron un tiempo en el talego, pero ni por esas: Winifred iba a verle a la cárcel a hacer el bis a bis, llevarle vituallas y papel para que escribiese no se qué cosa del Mein Kampf.

Una vez muerto Siegfried y ya con Hitler en el poder, las visitas de Adolfo a los Festivales de Bayreuth fueron numerosas, junto con demás jerifaltes del Tercer Reich a los que obligaba a presenciar las óperas de Wagner completas y sin dormirse, so pena de ser degradados y enviados a campos de exterminio en los restos de Polonia. Hitler, como puede observarse en la imagen adjunta, trató de apoyarse en los descendientes de Wagner (ahí sale con un nieto) para legitimar su (según él) hermosa ideología, que solo buscaba (de nuevo, según él) lograr el amor entre hombres blancos.

Los descendientes de Wagner fueron descritos como los nazis más ejemplares de Baviera, e inclusive se tatuaron una Esvástica nazi en el culo, más tarde no lograrían borrársela, pero la retocaron para que pareciera un señor saludando, que quedaba muy gracioso.

Así pues, luego de la Guerra comenzó la larga y dolorosa recontrucción de la ciudad (que había quedado un tanto deslucida) y los nietos y bisnietos de Wagner sintieron mucha vergüenza y tuvieron que hacer ímprobos esfuerzos para desvincular el Festival de Bayreuth del nazismo, entre ellos encerrar a la matriarca Winifred en un trastero, que ni por esas se callaba la vieja cabrona, nazi hasta el final.

Economía

El Festival de Bayreuth es en verano. En esa época la economía de Bayreuth es muy activa, se llena aquello de músicos, turistas y curiosos en general. Se activan los bares y restaurantes y hasta una cafetería regentada por unos italianos muy simpáticos.

El resto del año la economía de Bayreuth se va a hibernar como los osos. Hay una universidad politécnica o algo así, que es lo único que mantiene un poco viva la ciudad, pero tampoco es que la cosa tire mucho, no es precisamente el MIT aquello.

Población

Richard Wagner sujetando la cabeza de una hermosa Valkiria escandinava recién decapitada.

Son todos como el tipo que se ve en la foto. Ellas además de bigote tienen una ligera barba. Y luego está la familia Wagner que se parecen un huevo a él todos, tanto los legítimos como los hijos naturales que fueron dejando los legítimos por ahí, que no son pocos. Al final los Wagner son una cosa así como la familia real de Bayreuth, y los reyes, ya se sabe, el fornicio fuera del vínculo les gusta más que a un tonto un lápiz.

Notas

  1. De acaudalado nada, lo que pasa es que estaba subvencionado por un monarca sarasa.

Vease También

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