Quema de coches
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La Quema de coches, carburning o brûlure des voitures es un deporte jugado por los nobles habitantes de las banlieules francesas principalmente, aunque ahora se ha expandido por diversos rincones del mundo dada su jugabilidad y lo atractivo del juego.
Se juega en zona urbana, siendo el más popular de todos los deportes urbanos sobre otros grandes como el Street Basket, el Fútbol callejero o la captura de Pokémons. A diferencia de otros deportes de quema, este tiene ciertas reglas restrictivas que impiden el uso de cualquier herramienta para hacer arder los coches aunque si se permite que el vehículo sea encendido en llamas con métodos muy distintos.
La actividad mundial de este deporte está regulada por FIQCYPA (Federación Internacional de Quemada de Coches Y Pirómanos Asociados) que además se encarga de la organización de la Copa Mundial de Quema de Coches™ que se organizado una sola vez pero que se organizará en adelante cada 4 años en Saint Dennis, Seine cerca de París en Francia. Por lo general, algún encargado del gobierno da el inicio al campeonato pronunciando algún discurso.
Naturaleza del juego
Este deporte es muy particular y con una reglamentación bastante compleja. Sin embargo, su objetivo es muy sencillo: hacer la mayor cantidad de puntos. Para ello, se debe conseguir que los coches que queme le den una suma de puntos superior a la de los demás participantes del torneo. Sin embargo, no todos los coches tienen el mismo valor a la hora de ser quemados, no todos arden igual, ni todas las formas de quemarlo valen. Además están las otras variantes, como los torneos individuales o por equipo, los torneos nacionales e internacionales, de clubes o individuales y la versión todos contra todos.
En los siguientes párrafos se intentará aclarar la enorme complejidad de la mécanica de este magnífico juego.
Los diversos requisitos previos
Dadas las particularidades e intensidad de este deporte, resulta muy necesario que el participante en cuestión posea determinadas características y además que complete unos determinados requisitos
Requisitos físicos
Un jugador normal de carburning puede llegar a correr hasta 20 kilómetros en una sola partida. Es por ello que el experto carburningnista debe tener una condición física envidiable capaz de soportar estas grandes jornadas de actividad física. Sin embargo, la capacidad aeróbica puede ser compensada con otros talentos como la capacidad para esconderse, el conocimiento de Krav Maga ou otros artes marciales, los conocimientos de tácticas de guerrillas o incluso el teletransporte.
Otra capacidad física muy deseable es la capacidad de lanzamiento de objetos, utilizada a la hora de lanzar los objetos que harán que el coche estalle en llamas. De todas maneras esta capacidad puede también ser compensada con un mayor acercamiento al objetivo, lo que sin embargo, si no se es rápido, puede traer unas desastrosas consecuencias.
El uniforme es también un elemento importante. Sin embargo existen dos opciones que dificilmente son mezcladas. Por un lado, tenemos los uniformes antifuego cuya evidente función es la de proteger al jugador de las llamas. Este uniforme tiene un nivel de protección en caso de accidente e incluso en el momento de la jugada defensiva que es enorme, pero sin embargo limita un poco los movimientos, cosa importantísima en caso de que el jugador centre su técnica en la velocidad o incluso para el lanzamiento de objetos. La segunda opción es la ropa adaptada para el movimiento, que facilita estas tareas aunque deja vulnerable al participante ante posibles explosiones. Sin embargo, la compensación en velocidad hace que sea el uniforme preferido por la mayoría de participantes.
Pese a la libertad de vestimentas, existen tendencias nacionales o incluso locales sobre las prendas llevadas. Por ejemplo, la variedad marsellesa es como la que vemos a continuación, una especie de chandal con más apariencia de pijama de color contranatura o incluso fosforecente, acompañado de zapatos deportivos, calcetines por fuera hasta la pantorrilla y una gorra mal colocada, mal combinada y normalmente de marca. Los uniformes fuera de Francia tienen un aspecto similar, como por ejemplo el respeto por la ropa deportiva entre los concursantes hispalenses que sin embargo añaden como complemento estético los artículos hechos de oro. También existe una tendencia general a que todos estos grupos lleven sus uniformes puestos todo el tiempo, incluso fuera de competición.
Para ampliar los conocimientos sobre los diversos uniformes de estos grupos de participantes, sirvase mirar los artículos siguientes que muestran algunos (de los muchísimos) engendros ejemplos: Cani · Flaite · Ñero · Cholo
Además cabe destacar aunque no es imprescindible, que un desprecio absoluto por la vida humana, incluso la propia, puesto que a la hora de este deporte pueden haber diversos daños colaterales, e incluso el suicidio como ya hemos dicho varias veces.
Si el posible carburningnista tiene todos estas características, está listo para participar.
Etapa primera: aproximación, ataque y anotación
Una vez que la partida ha sido iniciada, el jugador debe buscar un objetivo. Se trata de observar a su alrededor por un vehículo de transporte terrestre que puede ser quemado. Si es necesario, el jugador deberá caminar varias calles observando los diversos coches para encontrar el objetivo adecuado. Este debe ser escogido en función a varios aspectos.
- Encontrarse lo más lejos posible de un representante uniformado o no de la Ley.
- Encontrarse en el exterior, en vía pública o parking descubierto.
- Encontrarse preferentemente estático del todo.
- Preferentemente, escoger un vehículo que no lleve pasajeros en el interior.
Lo siguiente es aproximarse lentamente al vehículo, preparándose para lanzar el ataque e intentar una posible puntuación.
Cuando uno se ha aproximado lo suficiente al vehículo objetivo, el jugador lanza el objeto inflamante para que el vehículo estalle en llamas al contacto. Si el vehículo no ha estallado en llamas, el jugador debe aproximarse de nuevo y lanzar otro objeto inflamante e intentar conseguirlo en esta ocasión o bien el cambiar de objetivo.
El fallar en el intento de ataque permite inmediatamente que se envíe otro ataque nuevo. Sin embargo, el problema mayor es que en muchas ocasiones un soplón puede dar aviso a las autoridades o, casi imposible, estas pueden darse cuenta solas. En este caso, la Policía puede intentar detener al jugador y hacer que se pase inmediatamente a la siguiente fase sin anotar mientras que los bomberos pueden causar que los coches sean más dificiles de incendiar al lanzar ese extraño líquido no inflamable que sale de sus mangueras.
Otra complicación es la posible intervención climática, puesto que la lluvia puede impedir la correcta incineración del vehículo escogido. Para compensar esta situación, los jugadores suelen utilizar más del combustible inflamable de su gusto en la preparación del objeto inflamante. Sin embargo, el clima también puede ser favorable, como en el caso de los días con gran calor o las noches despejadas que no favorecen a los jugadores pero sí la observación de las llamas en todo su esplendor.
Finalmente, si el coche estalla en llamas, se le asigna un punto al jugador que lo consiguió o a su equipo. Esta puntuación se asigna en función a diversos factores que otorgan una mayor cantidad de puntos a los distintos coches y también a los materiales usados para la construcción del objeto inflamante. Ambos detalles son aclarados posteriormente en la sección sobre el Reglamento y Puntuación de este noble deporte.
Etapa segunda: huida, defensa y recuperación
Esta parte es muy simple. Una vez el coche está ardiendo hay que huir. No hay matices, no hay nada que decir. Hay que salir huyendo y evitar a toda costa que te atrapen los policías hijos de la gran puta nobles agentes de la ley y el orden cuyo único objetivo es el de impedirnos el que nos recuperemos para intentar anotar de nuevo. Felizmente, existen dos maneras de evitar la captura.
Por un lado encontramos la opción de esconderse, que consiste en encontrar un lugar clave sea cual sea que nos permita mantenernos al margen de la vista de los policías, los chivatos y de sus armas mientras nos buscan como idiotas por todas partes mientras el jugador se ríe de ellos. Sin embargo, si nos encuentran nos van a hacer un par de favores, una vez cada agente.
La otra opción es correr. Correr sin mirar atrás, correr hasta que el alma desfallezca, correr para poder salvar la vida, correr hasta tener ampollas en las ampollas. Hasta que la sangre se mezcle con el sudor. Es eso, o te coge la policía y la sangre se va a mezclar con el asfalto. Porque los policías odian tener que tirar los donuts y el café, así que o corres, o te dan una paliza con horribles consecuencias o les colaboras para las colas.
Sin embargo, las cosas en un determinado momento pueden pasar de la huida a la defensa en el momento en el que las fuerzas se equilibran como cuando la policía francesa se introduce en zona exclusiva de las banlieules francesas, ejemplo que puede ser apto para los suburbios de la ciudad del desocupado lector de este artículo. Es entonces cuando la racaille recibe calurosamente a los visitantes con lo más florido de su vocabulario y con lo más hiriente de sus armas cortantes y contundentes.
Si el concursante a logrado huir exitosamente o si la cariñosa defensa ha logrado destruir a los simpáticos visitantes de azul, será momento para que el concursante se prepare para empezar el ciclo de nuevo. Es por ello que se tomará unos instantes para la recuperación.
Existen diversas formas de recuperar energía. Hay quienes optan por la cura de heridas y descanso. Otros se toman una lata de Burn (ninguna mejor para este deporte) y se ponen cariñosos con alguna simpática joven de banlieule de nombre Jennifer. Sin embargo, estos son los métodos usados por los novatos y los que menos aman el riesgo. Existen otros que son más rápidos y que incluso representan un peligro extra añadido.
Pues está primero el joven concursante que se echa encima dos litros de tequila de una sola tacada, sin limones ni nada. El peligro añadido es que si una pequeña chispa se le acerca cuando incendie el coche en su próximo intento puede hacerlo explotar automáticamente. La otra gran opción es la recuperación Maradona-Style que consiste en introducirse en la nariz un misterioso y místico polvo colombiano que da energía para seguir a tope reventando coches toda la noche.
Puntuación y reglamento
Este deporte tiene un sistema de puntuación extremadamente complicado que se intentará explicar a continuación. Sin embargo, el reglamento a respetar es bastante sencillo.
Puntuación
El primer criterio a tener en cuenta es el del coche que es quemado. Este otorga el coeficiente para el cálculo de la puntuación. El coeficiente se otorga en función a las categorías que a continuación pasaremos a ennumerar:
- Coches normales. Todo aquel coche que no pueda entrar en las categorías siguientes que veremos, es decir la gran mayoría. Tienen todos un valor de +1.
- Coches clásicos. Todo aquello que viene de tiempos mejores, es decir desde 1989 hacia atrás. Solo serán excluidos todos aquellos incluidos en categorías siguientes. Su coeficiente es de +2.
- Coches cutres. Son rematadamente feos e implican mal gusto. Puede ser de cualquier época y es el árbitro el encargado de otorgarle la categoría. Normalmente se trata de coches con nombres raros (Pajero), coches patéticos (vease el primero de la sección "Aproximación"), coches normales con colores horribles (como el lila). Por hacerle un favor a la humanidad, el coeficiente es de +3.
- Coches de lujo. Aquellos que cuestan de 30 mil leros en adelante, salvo que estén incluidos en la categoría cutre, especiales o blindados. Coeficiente +4 por cabrear un niño bien.
- Coches especiales. Son transportes concebidos especialmente para alguna misión dada, son coches únicos y normalmente hay muy pocos ejemplares o uno solo. Un buen ejemplo es el Papamovil. Coeficiente +5
- Coches antiexplosivos. Estan diseñados para resistir ataques extremos. Los buenos ejemplos serían tanques de guerra y coches antidisturbios de diversos tipos. Coeficiente +6.
El segundo criterio es la explosíon. Si no existe no se tiene en cuenta, si es pequeña (no afecta a terceros) es un +1, si es mediana (afecta a otros objetos o personas inmediatamente próximos) es un +2 y finalmente si es grande (afecta a otros objetos o personas no inmediatamente próximos) es un +3.
El tercer criterio es el bonus de consecuencia de explosión. Los volcamientos implican un +1, +2 o +3 según los grados de giro cuando se ha caído. Cada giro en el aire constatado añade un +1. Cada 4 víctimas mortales se añade un punto, pero cada 2 víctimas que sean agentes de la ley se añade otro.
El cuarto criterio es el bonus por explosivo usado. Los explosivos arrojadizos prefabricados (como las granadas) añaden un +1, los explosivos arrojadizos caseros (como los cocteles molotov) añaden un +3, los explosivos fijos (dinamita) añaden un +2, un coche explotado con un balazo en el depósito añade un +10, un coche explotado desde dentro tras maniobra del piloto añade un +10, un coche que explota por acción de otro vehículo añade un +2. El incendiarlo con leña, papel y similares más un mechero otorga un +20. Finalmente, cualquier otro medio de explotarlo implica un -20 y que no se pueda participar del siguiente ataque.
Existe también el llamado bonus del público, que se otorga si el público aplaude de manera efusiva y emocionada al mirar la explosión. Equivale a +10. Así mismo, existe el bonus francés, otorgado a la explosión de vehículos de marca francesa o la muerte de ciudadanos franceses que no sean de banlieule. Es una especie de homenaje a los orígenes del juego, que otorga un +5. Igualmente si el que hace que el vehículo es vasco o tiene orígenes vascos, se otorga un +5 por bonus abertzale, ya que se recuerda el parentezco de este deporte con la Kale borroka. Por contra, si eres jugador de GTA, pirómano o la Antorcha Humana se descontarán -5 puntos por manejo profesional previo del fuego.
Finalmente, se hace la cuenta final que consiste en: (Primer criterio x segundo criterio) + (tercer criterio) + (cuarto criterio) + (bonus del público)
Por ejemplo, si el abertzale Aitor Satrustegui adicto al GTA revienta el Papamovil con una granada de mano, el coche explota mata al Papa y dos tipos de la Guardia Suiza y da tres vueltas por el aire aterrizando dos calles más allá con las ruedas hacia el aire matando a tres tipos del Opus Dei mientras una emocionada convención del Partido Comunista aplaude, las cuentas serían las siguientes:
(5 de vehículo x 3 de explosión) + (7 de bonus de consecuencias) + (1 de bonus de explosivos) + (10 de bonus del público) + (5 de bonus vasco) + (-5 puntos de jugar al GTA) = 33 puntos
Reglamento
Como anteriormente ya se mencionó, el reglamento es bastante simple. Prácticamente todo es válido, salvo el uso de armas de fuego que otorguen una ventaja exagerada (por ejemplo, los lanzacohetes) y vehículos diseñados para la destrucción (tanques de guerra). El uso de estos objetos implica una inmediata descalificación. Por lo demás, sientase libre de incendiar lo que quiera.
La relación entre el carburning y la sociedad
El carburning ha estado siempre presente en nuestra sociedad, aunque en el pasado estaba mal visto y considerado como un deporte innoble, impuro. Sin embargo, en los últimos años la nobleza de este deporte ha sido reinvindicada fuertemente y se ha vivido un gran tiempo de expansión por diversos países.
La complejidad de sus normas de puntuación, así como la facilidad para cualquiera de participar y la espectacularidad de las anotaciones hace que este deporte consiga, nunca mejor dicho, encendidas pasiones a su alrededor. Sirve además de vínculo para que sus practicantes, normalmente jóvenes de entornos marginados de una u otra forma, se integren a la sociedad mediante el deporte. Esto ennoblece aún más a un deporte de caracter donde prima la lucha, la estrategia y las explosiones expectaculares.
Historia y popularidad
Los orígenes del Carburning se remontan a la invención de la rueda puesto que inmediatamente tras este descubrimiento fabuloso, alguien tuvo la intención de quemarlo. Aún podemos encontrar restos de esta invención en otro popular deporte que muestra muchas reminicencias de su origen primitivo como es la quema de ruedas. Este mismo aún es muy popular en países latinoamericanos durante las jornadas de huelgas e incluso en Francia donde posteriormente se inventará el carburning.
Pero cuando le añadieron cosas a las ruedas y empezaron a aparecer los primeros carros, algunos visionarios se empezaron a fijar en toda la estructura a la hora de quemarlo. De ahí la aparición de aquel deporte vasco emparentado, Kale borroka, que empezó con los vascos quemando todo coche romano que se le cruzase por delante. Sin embargo, la Kale borroka se especializó pronto en quemar de todo y otros se interesaron exclusivamente en los coches. Fue así como los vascos del lado francés lo exportaron a París y este se hizo un deporte muy habitual en las banlieules, aunque siempre relegado por el rechazo de los burgueses que lo consideraba un deporte marginal y de marginales.
Finalmente, hace pocos años, el actual presidente de Francia, Nicolas Sarkozy dio un gran impulso a este deporte al proclamar a los cuatro vientos su ferviente admiración por los habitantes de banlieules y declararlos racaille para que salgan y practiquen con orgullo este noble deporte. Toda Francia ardió con gusto y el deporte se normalizó y empezó su expansión por el mundo. El primer gran acto fue la huelga general el I Campeonato Mundial de Carburning™ organizado en Francia en sus principales ciudades. Tal fue el entusiasmo por el acontecimiento, que incluso se quemaba todo aquello que tuviese ruedas (como los contenedores) o cualquier cosa a la que fuese posible prenderle fuego. Igualmente la Policía hizo una gran labor, estimulando a los jóvenes mediante palizas, golpes, muertes y otras diversas muestras de su magnífica brutalidad policial.
Inmediatamente después del primer campeonato mundial, se organizaron diversos torneos regionales y muchos se organizaron para dedicarse profesionalmente a este deporte. Los equipos nacionales más dignos de destacar son los de Francia, País Vasco, e incluso Eutanasia. Cabe remarcar, que los Estados Unidos son el único país o región que no ha organizado un equipo propio de carburning porque todos son un montón de gordos maricones sin ganas de hacer deporte y que prefieren la droga.
En cuanto a los clubes privados, debemos destacar los grandes campeones mundiales. El Borraka Club de Bilbao, la Sociedad de Carburning de Donosti, el Paris Saint Carburning, los Carburningdins de Bordeaux, el Carburning Club Barcelona, el Sevilla Carburning Club. También los agentes de la ley se organizan en clubes privados y los más destacados son los de Madrid y los de París, ambos destacables por su brutalidad efectividad.
Variantes del juego y competiciones importantes
Existen imporantes variantes para jugar a este deporte en competición, aunque la base no cambia.
La primera de las variantes es el enfrentamiento por equipos. Esta es la más importante y difundida. Consiste en que uno de los equipos lanzará a uno de sus jugadores al ataque y este intentará anotar, mientras en la defensa todos podrán intentar ayudarlo a huir o a enfrentarse a las fuerzas de la ley. Una vez se haya terminado el intento sea con la recuperación, la paliza o la muerte, se sigue con el otro equipo. Así se sigue hasta que cada equipo haya atacado un número de 7 veces. El ganador será aquel que haya conseguido acumular un mayor número de puntos en los 7 intentos. De haber un empate, se forzará una ronda de la muerte que implica un solo turno para cada equipo en donde ganará el que más puntos acumule en ese único ensayo. De continuar el empate, se procederá a otra ronda de la muerte hasta que el desempate se produzca. En caso de que uno de los equipos sea completamente capturado y/o haya muerto, el equipo con supervivientes será el ganador. Si esto le sucediese a ambos, el ganador sería el que tiene mayor cantidad de puntos y si también hubiese empate se tendría que hacer un lanzamiento de moneda al aire.
La otra gran modalidad es el enfrentamiento individual. Que básicamente es igual al anterior solo que únicamente hay tres turnos y solo un participante por equipo enfrentado, aunque en esta modalidad se suele admitir más de un participante. Existe la variedad Survival Challenger que consiste en ataques continuos por turnos de forma indefinida hasta que solo uno de los participantes quede en pie, es decir sin ser capturado o peor, muerto.
En el Campeonato mundial y en las ligas más importantes del mundo se suele utilizar la competición por equipos, aunque suele haber al final de la temporada un minitorneo de un día con los jugadores mejor valorados que se enfrentan en una sola partida de larguísima duración llamada Carburning Run Derby.
En cuanto a las competiciones, la más importante es el Campeonato mundial entre países. Además, se debe destacar la liga Francesa y la Vasca por ser las más fuertes y exigentes. El torneo Europeo también es digno de ser destacado.