Frodo Bolsón

Frodo pensando en Sam.

El joven ~~FORRO~~ ~~Froto~~ Frodo Bolsón es el hobbit encargado de portar y destruir el anillo único (ese que tiene un poder destructivo increíble y que puede hacerte transparente o volverte adicto y hacerte capaz de poner la misma cara que el célebre Gollum). Al margen de esta crucial empresa, Frodo tiene un pasado oscuro y doloroso que relataré con la máxima sensibilidad y respeto hacia su persona.

Historia

¿Y yo que hago con esto y el anillo?

Inicios

Desde la desgraciada pérdida de sus padres, Frodo residió en la Comarca con su tío Bilbo Bolsón, un tío excéntrico y extrañamente bien conservado. Frodo y él tenían buen rollito, al margen de algunos desagradables episodios como aquella vez que, contando 7 años de edad, Frodo bajó al sótano de su casa y se encontró a su tío Bilbo en plena sesión de sado con un hombre enorme (en todos los sentidos) de barba blanca que usaba un báculo a modo de látigo.

A pesar de este tipo de desavenencias, Frodo disfrutaba de su infancia en la Comarca. Su tío Bilbo le organizaba fiestas cuando cumplía años. Invitaba a todos sus amiguitos de la Escuela Primaria de la Comarca y le compraba estupendos disfraces de Blancanieves o cenicienta, que el mismo Frodo elegía.

Pero su tío se preocupaba por las constantes cosas que Frodo hacía, como pegarse con hooligans o descifrar crímenes en Inglaterra, por lo cual decidió buscarle algún amigo para que se distrajese. Y así conoció a Sam, Y a partir de ahí surgió ~~el amor~~ una gran amistad. Con el tiempo, Sam se convirtió en el jardinero de Frodo y Bilbo porque lo echaron de la universidad por posesión de hongos color azul fosforescente que, según él, encontraba en el bosque, obviamente ilegales pero esa es otra historia.

Adolescencia y crecimiento

Frodo mirando hacia atras para ver si el gordo de Sam le sigue el ritmo.

Entrado ya en la adolescencia, Frodo empezó a acudir al instituto como todos los hobbits de su edad. Nunca había sido muy sociable e integrarse le resultó difícil. En la clase, no sentía encajar ni entre los más malos (esos que consumían alucinógenos,bebían licor de frambuesas y le compraban hongos a Sam), ni en la Jet Set formada por los hijos de las más prestigiosas familias de la Comarca (esos que vertían las capas de las mejores marcas y defendían la limpieza de sangre/sable - dichosos liberales pro mestizaje hobbits/elfos...! -). Nisiquiera se sentía aceptado entre las filas de los Frokits, unos tipos raros que decían estar trabajando en proyectos secretos para dominar el mundo (hablaban de un arma secreta llamada Frokitpedia o algo asi). El único amigo que tenía era un tal Sam, un pelirrojo que por alguna extraña razón le trataba siempre de usted (hasta en los momentos más intimos).

Debido a sus maneras, su forma de hablar y sus extrañas costumbres indumentarias Frodo sufrió las mofas e insultos de muchos compañeros, lo que quedó grabado para siempre en su autoestima. Nadie comprendía su gusto por las camisas de seda violeta o los bombachos ajustados. Todos se metían con su rimmel (quizás fuera porque no era de marca, pero el pensó que nadie se daría cuenta de ese minimo detalle). Pronto Frodo cayó en una profunda depresión y abandonó sus estudios. La única persona a la que veía era a Sam, que le visistaba asiduamente en su casa, donde pasaban largas horas a puerta cerrada.

Frodo pronto sucumbió a la tentación de los estupefacientes, cultivando una fuerte adicción al crack que le redujo a un chaval escuchimizado, pálido y siniestro. Así sigue en la actualidad. Lo último que se sabe de él es que se aburrió al haber terminado con al asunto del anillo único y se compró un piso en Gondor, que comparte con Sam (que cambió su nombre por Samantha). Los nuevos aires liberales de las autoridades les permitieron oficializar su amor en una ceremonia sencilla con familiares y amigos íntimos.

Final

Al final de la vida que conocemos de él, cruzó el charco y se fue para Jóligud, no sin escribir antes un tocho de mil quinientas páginas (en el que relataba de manera autobiográfica su adicción)que llamó "El señor de los anillos", también conocido como "con un deo tarao, pero me salvao".