Música concreta
Desde sus más remotos origenes, la humanidad ha querido alcanzar como meta aniquilar todo aquello que ha creado y que ama. La música concreta fue un método para lograr acabar con la música de una vez por todas de una forma barata y efectiva. Fue usado durante el siglo XX, y sirvió de precedente para nuevos sistemas de horror sonoro, como el Reggaeton o Justin Bieber.
Prepárese para oír ruidos antinaturales, símbolos de la degradación de la mente humana. Odie a sus tímpanos y a sus orejas, las cuales difícilmente sobrevivirán a esta tremebunda hecatombe auditiva. Y por último, tenga en cuenta una última cosa: jamás podrá volver a una estación de tren sin sentir numerosas náuseas.
Historia
Comienzos
La música concreta tuvo unos orígenes, y por mucho que los jefes de la resistencia del futuro hayan tratado de impedirlos, no han podido destruirlos. Sin embargo, hemos de tener la esperanza de que el destino no esté escrito y podamos enviar pronto un robot (a ser posible, con la morfología de Arnold Schwarzenegger) para detener a los malvados Pierre Shaeffer y Pierre Henry.
Fueron ellos. Los dos terribles hermanos Pierre. Podríamos llamarlos así si fueran hermanos, pero no lo eran. Ambos tenían ideas ridículas de que el futuro debía pertenecer a los sordos, todos los demás humanos debían ser aniquilados. Legiones de hombres les siguieron, incluyendo la GAES, que con el tiempo formaría una terrible organización para sojuzgar a la humanidad. Pierre Shaeffer y Pierre Henry daban terribles y elocuentes discursos, los cuales no escuchaba nadie porque todos sus seguidores eran sordos. El himno del movimiento, "Estudio para locomotoras", era utilizado para asediar a todos aquellos que oían. Los sordos no se daban cuenta del mal que hacían con esos ataques. Y si lo sabían, les daba igual... Ellos no lo podían oir.
Popularización
Llegaron de oídas todas estas calamidades a un dictador caído, Adolf Hitler. Con las tropas soviéticas y americanas llamando a la puerta de Berlín (oséase, la puerta de Brandemburgo) Hitler necesitaba una superarma. Ordenó a sus científicos investigar la música concreta a fondo, causando cientos de muertos en estos horribles experimentos.
Hitler tenía un sueño terrible y ridículo: El de una sinfonía que versaría sobre unas toses a alta velocidad intercaladas con la "Cabalgata de las Walkirias" modificada para que sonara mucho más aguda. Todo ello, reproducido con un megaaltavoz. Todo el mundo sabía que nada sobreviviría a aquello.
Sin embargo, los aliados también empezaron a usar música concreta en la guerra. Berlín fue asediada por los rusos con el sonido de una puerta abriéndose acelerado mil veces. Hitler, a los dos minutos de que se reproduciera el disco, decidió suicidarse.
La II Guerra Mundial había terminado, pero ahora comenzaba un nuevo conflicto: La Guerra Fría. En ella, estadounidenses y rusos se enfrentaron por lograr unas cotas mayores de horror que su adversario para así poder tener la supremacía militar. Para conseguirla, los estadounidenses contrataron a Pierre Shaeffer y Pierre Henry, pero los rusos equilibraron el fiel de la balanza contratando a una jauría de perros furiosos. La guerra por la supremacía estaba abierta.
Una película que ilustra esta situación es "Dr. Strangelove or How I Learn To Stop Worrying And Love the Sound" de Stanley Kubrick. La película narra la historia de un comandante del ejército estadounidense que se vuelve loco y ordena reproducir un disco con la ópera "Woozeck" acelerada tres mil veces. Los rusos advierten sobre esto que si un solo compás de esa música llegara hasta su espacio aéreo, se activaría un dispositivo automático indesactivable que reproduciría el ruido de un cristal rompiéndose lentamente tres mil veces seguidas, lo que haría que la humanidad se cagara por la pata abajo.
Y es que el alarmismo en la Guerra Fría no estaba injustificado. Expertos de aquella época aseguraban que si las superpotencias hacían uso de sus armas ruidosas, todo ser vivo en la tierra moriría instantáneamente, el sol implosionaría destruyendo todo a su paso hasta llegar a Urano y después se formaria un mega-agujero negro que se tragaría la Via Láctea. Para minimizar los peligros que traería consigo esta situación, las autoridades de la ONU idearon un protocolo de actuación ciudadana consistense en esconderse bajo una mesa y taparse la cabeza.
Sin embargo, durante toda esta época se emplearon armas de música concreta. En la guerra de Corea, el general Douglas MacArthur sugirió usar música concreta para aniquilar a las tropas chinas que estaban contraatacando. Dicha orden fue rechazada por el presidente Harry S. Truman, que fue más indulgente y solo le puso a los chinos la discografía completa de "La Tigresa del Oriente". Un día más tarde, Corea del Norte y China firmaban la paz.
Otro conflicto en el que se usó fue la guerra de Vietnam, en el que se emplearon altavoces gigantes para destruir la selva. Los árboles y cultivos se marchitaban al paso de la música concreta que era reproducida en los helicópteros, pero los vietnamitas lograron ganar la guerra gracias a la Ofensiva del Tet, en la que los charlies reprodujeron durante siete días seguidos el sonido Tet, lo cual enloqueció y desmoralizó a las tropas americanas.
Pero la Guerra Fría concluyó, y el peligro de una guerra sonora ha disminuido mucho. Pero ahora hay que tener cuidado con los casos de terrorismo. Hace pocos años, Al Qaeda trató de reproducir "La consagración de la primavera". Sin embargo, durante los preparativos se reprodujeron por error cinco segundos de la grabación en la cueva. Desde entonces, Bin Laden está desaparecido.
Características
Los oyentes de música concreta no conservan recuerdos de ésta, pues el cerebro los bloquea para aliviar el sufrimiento. Pero a veces estos vuelven en forma de pesadillas, torturando al oyente donde menos puede defenderse: en los sueños. Esto, combinado con los libros arcanos y místicos de Pierre Shaeffer y Pierre Henry y los relatos de H.P.Lovecraft basados en hechos reales nos pueden dar una idea general de cómo es la música concreta.
La música concreta se basa en la modificación de sonidos naturales para modificarlos electrónicamente y que así no los reconozca ni su santa madre. La música concreta también puede proceder de sinfonías ya compuestas por alguien a quien el autor tenga un especial rencor.
Las modificaciones pueden ser varias: Aceleración, desaceleración, volverla varios tonos más aguda, volverla varios tonos más grave... La única música concreta considerada no nociva para la salud es una que resultó de la mezcla de todas estas técnicas en igual grado.
También hemos de mencionar que existe una variante de esta música, la música electrónica, que emplea sonidos nuevos para llevar a cabo sus maquiavélicos planes. Esta música se puede combinar con la música concreta para formar la música electroacústica: El día que alguien cree una sinfonía de este tipo, las puertas del infierno se abrirán, no habrá ley física alguna en el universo, Dios se llevará a los justos y dejará a los injustos y comenzará la lucha definitiva entre las fuerzas del bien y del mal. Algo similar a cuando mezclas mentos con coca-cola.
Fin
Durante todo este artículo hemos tratado de advertirle, hemos tratado de avisarle de lo terrible que pueden resultar algunos ruidos anitinaturales. Si quiere ahora sumirse en esta barbarie, unirse al horror, hágalo. Pero luego no nos pida responsabilidades.
A continuación le ofrecemos una muestra de este infierno. Coja el ratón y coloque la flecha sobre el botón. Si esta usted lo suficientemente loco para hacerlo, haga click. Asegurese de haberse despedido antes de sus seres queridos. Cierre los ojos. Póngase los cascos. No haga pagar su locura al resto de la humanidad. Y ahora, arrástrese indefenso hasta el corazón de las tinieblas.
Si ha hecho click, usted debe de estar muerto. Nos hemos tomado la libertad de rastrear su IP y llamar a la funeraria. Enseguida pasará un coche fúnebre a por usted, debido a que suponemos que no está en condiciones de hacerlo por ud. mismo, dado su estado. Encontrándose como está en la puerta de las más enigmáticas de las preguntas, tendrá muchas dudas, pero nosotros se la solucionaremos: SÍ, el coche fúnebre lo paga su seguro.
Si usted ha sido lo suficientemente cobarde o inteligente como para no hacer click, cierre el ordenador. Nunca vuelva a entrar en Inciclopedia. Olvide qué es la música concreta. No caiga en la tentación. No abra esta Caja de Pandora y no libere a las pestes. Huya de su casa. ¡Escape!... Es por su bien.
¿Qué estas haciendo? ¿Estas loco, necio insensato? ¡Nos matarás a todos! ¡No hagas click, Dios mío! ¡¡¡NO HAGAS CLICK!!!
Artículo destacado Este artículo ha sido destacado en la Portada por decisión popular. Los rumores sugieren que sus autores fueron instruidos |