Kawaii
El movimiento kawaiísta (también conocido como "¡Awww! ¡Qué liiiiindo! ¡ ^w^ !" [1]) surgió en Japón (como todo lo que se respete) por ahí de 1969 en las escuelas de la región de Akihabara. Desde allí empezó a contagiar a media Japón, posteriormente a los japonófilos alrededor del mundo, y recientemente hasta a tu hermana. Se caracteriza porque sus miembros practican la ternura extrema en todos los aspectos de la vida, para promover la paz en el mundo[2] y lograr un planeta mejor y más lindo para todos.[3]
El origen
Según dicen por ahí, todo empezó cuando un grupo de chicas (aparentemente liderados por una joven llamada Suzu Kawai empezaron a usar lapiceros occidentales para escribir. Como permitían escribir líneas más delgadas que los pinceles caligráficos y tablillas de piedra que usaban para escribir en las escuelas de ese entonces, lo primero que se le ocurrió a Suzu fue... ¡escribir redondito ^w^ ![4] Sus amigas lo vieron de lo más tierno y empezaron a comprar lapiceros para escribir con estrellitas y corazoncitos, lo cual llevó a un aumento en la venta de bolígrafos, un par de suspensiones por comportamiento inmaduro[5], y un cambio radical en las revistas para chicas.
Para este entonces, la industria japonesa se dio cuenta del potencial de este accidental descubrimiento, sacando al mercado a la popular, simpática y monísima[6] Hello Kitty [7], y eventualmente a otros quinicientos mil tropecientos amigos más cortesía de la Sanrio.
Situación actual
Japón ya ha sido conquistado por las fuerzas de gatitas, Pokemones chilenos, Puchús y demás ali... perdón, linduras. Por si no se lo creen:
- Hello Kitty sigue siendo éxito de ventas a estas alturas.
- Ya hay aviones adornados con diseños de Pikachu y demás linduras.
- Revisen el fenómeno moé. Es más, el fenómeno lolicom. Podría citar un par de ejemplos.
- Cualquier día en Akihabara o Harajuku podrá usted ver chicas en edad de merecer, vestidas de niñas, ¡y lo peor de todo es que les calza genial![8]
Y alrededor del mundo
Japón es el lugar donde ha surgido esta pandemia, pero no es el único sector contagiado. Sino, puede usted preguntarle a Gwen Stefani o a Kirsten Durst que ya han caído en las garras de este movimiento.
No podemos olvidarnos de la kawaiísta por excelencia: la fangirl. Ella vive la vida con toda la ternura de su corazón, lo cual hace, paradójicamente, que le caiga pesada a todos a su alrededor. Bueno, es solamente una parte de los síntomas que la caracterizan; la otra parte es una japonofilia insoportable, aunque con lo enferma que está Japón, es casi que lo mismo.
Efectos en la moda
Al ser tan popular (y rentable) el fenómeno, los diseñadores japoneses se dedicaron a sacar ropa especial para estas anormales jovencitas. Entre ellos están:
- Decora: donde las chicas se visten con ropa para niñas (véase Xuxa o Tatiana) y se decoran con una cantidad impresionante de accesorios de múltiples colores
chillones. - Sweet-Loli: se visten más o menos como la pastora de Toy Story.
- Goth-Loli: como la anterior, pero más dark.
- Punk-Loli: ¿Alguien ha visto a Avril Lavigne? Así, pero más preocupante.
- Wa-Loli: El cruce entre un traje victoriano y un kimono. A pesar de lo que se puede suponer, se ve bastante bien.
- Guro-Loli: No sé qué rayos hace aquí, pero tiene que ver más con el movimiento emo-sado-maso que el Goth-Loli.
¿Quieres saber algo?
- Sólo las chicas pueden ser kawaii. Si un hombre lo intenta, sólo logrará parecer gay (si no es que ya lo es).
- Ser una chica sepsi en Japón está pasado de moda por culpa de este fenómeno. Ahora hay que ser sepsi y tierna.
- Según un estudio reciente, las familias en Japón son más pacíficas si tienen una hermanita menor.
¡Aww, ya se acabó! ¿Quieres ver más linduras?
¡Entonces aquí tienes!
- Lolicom
- Moeísmo
- Mikuru Asahina
- El elenco de Lucky*Star
- Malvavisco de Fresa
- Las de Azumanga Daiou
- Consuelo Duval
- Belanova
- Fanny Lu
- Rin Kokonoe
- Todo el género del Majo Chollo
- Jelou Quiti
- Tu hermana (en proceso)