Artículo Religioso Destacado |
Elías
Elías fue, según la Biblia, un mutante con poderes piroquinéticos y profeta hebreo que vivió hace 2926 años, 5 meses y 7 días (aproximadamente). Durante el reinado del rey Aleatorio I, Elías defendió con toda violencia la adoración del Dios hebreo contra un dios pagano que estaba metiéndose en su territorio, ya saben cómo son los dioses y sus mafias. Tras usar sus poderes de fuego contra los matones enemigos, fundó la Escuela de Profetas Mutantes del Profesor Elías hasta que en el 850 a. C. fue abducido por un OVNI en llamas.
Contexto
Hace muchosmil años, el Reino de Israel, una vez unido bajo Salomón, sufrió la ironía de haber sido dividido en dos (como hacía Salomón con los bebés): el Reino del Sur de Judá y el Reino del Norte de las Vegas-Israelíes. Mientras en el sur seguían de mojigatos siguiendo el Torá al pie de la letra porque no tenían cojones suficientes para desobedecer, el norte apostaba por cosas que les dieran dinero rápido como la instalación de casinos, sacrificios o templos a Baal, dios cananeo que había comprado los derechos mediante sobornos al ayuntamiento. El rey Sidón de Fenicia hacía mandado a su hija a dirigir sus casinos instalados en Israel y estando ahí se casó con Acab, que fomentó el turismo religioso con propósitos pecaminosos.
Sin embargo, no faltaban los pequeños grupos de choque de adoradores de Yahveh que molestaban en cada inauguración de clubes nocturnos, templos, baños unisex, etc. Que estaban perdiendo su trabajo por los sacerdotes fenicios que cobraban menos y laburaban más. Hubo una huelga y disturbios de los profetas, pero Acab mandó a aporrearlos con tanquetas de agua y cachiporras; luego se sintió mal de tenerlos en la cárcel así que los hizo decapitar para acercarlos a su señor y que todos estuviesen felices, al final no era tan mal tipo.
Elías, que era parte del grupo, no había ido ese día al trabajo por una diarrea explosiva que lo mantuvo en casa. Cuando se enteró de que era el único superviviente, recordó el pronóstico del clima (sus poderes de profeta sólo sintonizaban el canal del clima) que hablaban de una sequía, lo que lo hizo quedar peor ante los seguidores de Baal que era el dios responsable de la lluvia, el trueno, el relámpago y el rocío. Escapó por los pelos cuando le dijo al Rey y a sus hombres, "miren atrás, un becerro de oro para adorar" y se fue corriendo.
Saga de la Viuda de Sarepta
Tras huir, acaba en medio del desierto dispuesto a morir de aburrimiento sin tener nada que hacer y quizá también morir de hambre y sed. Yahveh utiliza sus poderes telepáticos para comunicarse con él y guiarlo a un escondite junto a un río, donde sería alimentado por cuervos, cuando Elías se cansa de comer gusanos se escapa de Dios y se va a una villa cercana donde está una viuda que no tiene nada de comer porque Elías llamó la sequía para darle una lección a sus enemigos valiéndole un nabo la vida de las personas inocentes.
Elías, más gordito por los gusanos e hidratado por el agua del río, llega pidiendo alimento que ni la viuda ni su hijo moribundo tienen. Pero él dice: "soy un profeta del señor, maldita sea, dame todo lo que tengas", lo que la pobre mujer hace por miedo al barbudo que quemó su puerta con la mirada. Pero Elías tenía un plan y era darle un cupón para comer en McDavid de por vida, lugar al que Elías no podía ir por estar entre los más buscados, así a la viuda de Sarapeta y a su hijo no les faltará comida nunca más.
Por su voluntad se queda a vivir ahí y descubre que el niño tiene problemas de apuestas con los casinos locales, pues tuvo que buscar la forma de poder sobrevivir ya que lo estaban extorsionando los dueños. El hijo de la Viuda tiene que fingir su muerte, los matones y dueños mafiosos van al funeral a profanar el cadáver o algo así, entran y las puertas se cierran, del ataúd aparece Elías diciendo "eso no se hace, hijueputas" mientras toda la habitación se enciende en llamas de las que sale el profeta diciendo "los problemas de este pueblo han terminado", cuando en realidad no había terminado nada pues la sequía continuaría otros tres años, pero a él no le importó porque se fue a su siguiente aventura.
Saga de los profetas de Baal
Cansado de esconderse, propuso un desafío a los profetas de Baal (que gustaban de las apuestas) quien orara lo suficiente para que su dios encendería el fuego de la barbacoa el sacrificio sería el vencedor. Ambos prepararon unos deliciosos toros con grasa y piel y todas las cosas deliciosas que gustan a cualquier dios sin importar su religión, los pusieron sobre un altar de roca y oraron para que el fuego se encendiera.
Todos los profetas adivinos de Baal se juntaron para tratar de hacer fuego, pero su brujería no funcionó después de 6 horas de estar bailando alrededor del altar sin sacar una sola chispa, luego le tocó a Elías, quien fingió que estaba tirando agua sobre el altar (que en realidad era alcohol para más placer) y usó sus poderes de fuego para convocar algunas llamas del cielo, iniciando así el inciendio, acabando con esta putada y les cortó la cabeza a esos bravucones baaleros. Así es, aprovechó que los 400 profetas enemigos estaban distraídos mirando el milagro para decapitarlos a todos. Así el pueblo de Israel sabe cual deidad es más peligrosa y debe ser adorada.
Saga de Jezabel y Ocozías
Se revela que la esposa del rey, llamada Jezabel, era la supervillana detrás de todos y había usado sus habilidades de control mental sobre su esposo para controlarlo. Controlando a la hermandad de mutantes malvados de Baal, persigue a Elías para matarlo, quien ya no quería huir pero que decide mejor sí hacerlo de nuevo con destino a Judá, de nuevo por el desierto como si no aprendiera la lección, hasta que encuentra un pequeño arbusto dispuesto a volver a morir de aburrimiento, también de hambre, pero suena la música de los X-Men y aparece Angel, con algunas cervezas y alitas para que recuperara la fuerza, pero no le da un aventón hasta su destino, porque quiere seguir viéndolo sufrir.
Viaja al monte Horeb, donde vio en la película de Los Diez Mandamientos que Moisés recibió las tablas con las que derrotó a su archienemigo Marduk, pero no encontró ninguna tabla de ley con que vencer paganos, lo único que halló fue una tienda de recuerdos donde vendían merchandising de Moisés y de la película. Yahave le mandó otro mensaje telepático "yo soy tu señor y te ordeno que vayas a Damasco a poner a un rey nuevo, a Israel también a poner a un rey nuevo y a buscar a un joven ayudante porque ya estás poniéndote muy arrugado", a lo que Elías preguntó "¿Usted me acompañará?" y recibió de respuesta "No, a esos lugares no entro, si pudiera ir no te estaría mandando a ti". El libro de Reyes no nos dice cómo lo hizo lo de Damasco, pero seguramente acabó oliendo a carne asada.
En Israel Aleatorio I estaba siendo manipulado por su esposa para matar campesinos y quedarse con sus tierras para hacer fracking, Elías le dijo que eso hacía enojar a Dios a lo que Elías fue acusado de comunista por atentar contra los intereses del mercado. Hubo una pelea a muerte entre ambos que terminó con el rey Acab muerto liberándose del control mental de Jezabel y siendo mandado por Elías al cielo, luego de que le revelara la debilidad aleatoria de su esposa: no puede controlar a los animales.
Pasan unos años y ahora el hijo de Acab y Jezabel, Junior Ocozías, es rey. Su arco inicia cuando está herido y manda a comprar medicinas con los sacerdotes de Baalzebub porque es Israel no hacen medicina para caídas, sólo para lapidaciones y no funcionan igual. Una misteriosa figura de negro con un cinturón dorado detiene a los sacerdotes y les pregunta "¿Es porque no hay Dios en Israel que envías a consultar a Baal-zebub, el dios de Ecrón?", a lo que responden, "quizá, pero medicina definitivamente no hay" a lo que la extraña figura se enfurece y todos empiezan a arder por combustión humana espontánea menos uno, al que le dice "ve y dile a la reina madre que he regresado"... Así finaliza la historia de, no, espera, hay más.
"Madre ¿Quién es ese?" (lease con voz de niño rico y consentido), "es el tipo que mató a tu padre, que nos quiere quitar los casinos, nos quiere quitar a Baal y ahora ha regresado por ti", contestó Jezabel. "ay, no ¿qué vamos a hacer? Dijo Junior. Fin de la escena. Jezabel invita a Elías para arreglar las cosas definitivamente, lo espera con toda la ciudad controlada y cuando se acercan de repente sacan mangueras y extintores y lo rocían "¿ahora qué harás profeta? No puedes convocar tu fuego", "no necesito mi fuego cuando lo tengo a él" y de pronto por detrás llega Eliseo con el don de hablar con los animales sobre una jauría de perros salvajes, ante la sorpresa Jezabel se convirtió en Purina PetCare ese día.
"Tu dios es el verdadero Elías, prometo que me retiraré de rey y me volveré seguidor de Yahvé", dijo Ocozías mientras salía de cuadro corriendo y rodando por el monte. Ahora Elías, mojado y sin chispa, está en sus últimos minutos de vida, los sucios pueblerinos por fin lo reconocen como profeta, la guardia real ve su error, Eliseo, su sucesor que vivió estos últimos años con él aprendiendo a hacer milagros y a esconderse como bicho, le llora. Entonces según Reyes 2:11-14 un carro de fuego descendió del cielo con varios caballos de fuerza, tomó a Elías y se lo llevó con él, las descripciones de la arqueología bíblica nos dejan en claro que era un DeLorean.
Secuela: La leyenda de Juan el Bautista
En el Nuevo Testamento, Jesús da un spoiler, Juan el Bautista era Elías, que antes era maestro de fuego control y ahora era experto en el agua control, que Malaquías un señor que decía cosas malas y por eso se llamaba así, ya lo había dicho. Aunque por bautizar a Jesús y todo, la fama hizo que Bautista perdiera la cabeza.
No se le volvería a ver sino hasta que Jesús ascendiera al cielo, apareció como cameo al fondo junto con Moisés, que lo estaban esperando para ir a luchar contra los extraterrestres a otra dimensión, o algo así, esto en la Biblia se conoce como la Transfiguración de Jesús.