Incilibros/Cómo matar con un rollo de papel higiénico
¿Cómo puedo matar a alguien con un rollo de papel higiénico? Sin duda es la pregunta que todos nos hacemos cada mañana al despertarnos. Es blandito y suave, y sin embargo, un rollo de papel higiénico como arma mortal resulta una idea tan seductora...
Tanto para los que siempre quisieron saber cómo convertir esa idea en realidad, como para los faltos de originalidad que se dedican a matar gente con otros objetos, llega esta guía que descubrirá a todos los psicópatas criminales un nuevo mundo de posibilidades.
¿Por qué con un rollo de papel higiénico?
¿Por qué no una pistola, un cuchillo o un puto cd con los bordes muy afilados? Aparte de la originalidad, existió hace años un motivo de peso para que se plantease la idea de un rollo de papel higiénico como arma mortal.
En 1937, el doctor Fred O´Dedo estaba en el baño con un serio problema intestinal, intentando por todos los medios defecar, sin éxito, con la consiguiente molestia e incomodidad que ello produce. Entonces, su esposa, que por aquel entonces había engordado hasta pesar 210 kg, le preguntó al dr. O´Dedo si se sentía bien. El dr. respondió con la amabilidad con la que solía referirse a su mujer por aquellos días: ¡Déjame en paz, jodida vaca deforme! ¿No ves que estoy cagando?. Sin embargo, ella insistió en seguir hablando con su marido, de modo que la molestia que este sentía se incrementó hasta el infinito (todos sabemos que cuando quieres cagar y no puedes, no hay nada peor que el hecho de que alguien te hable desde el otro lado). Fue en ese preciso momento cuando Fred O´Dedo tuvo la brillante idea de usar el rollo de papel higiénico como un arma mortal.
Durante las cuatro horas que estuvo el dr. en el baño, aprovechó la presencia de su mujer para pedirle los trozos sueltos de una vieja pistola de adorno, que O´Dedo guardaba en su habitación. También le pidió la caja de herramientas, aduciendo que, ya que no podía cagar, por lo menos se divertiría con unas manualidades (ya sabemos que muchos hombres se divierten con manualidades cuando están sentados en el "trono").
Años después, el Dr. O´Dedo, desde el psiquiátrico donde lo recluyeron tras asesinar a su esposa (el abogado adujo enajenación para salvarlo de la cárcel), O´Dedo siguió con un primer manual donde explicó las primeras formas para matar gente con un rollo de papel higiénico. Desde entonces, muchos otros científicos destacados continuaron con su labor.
Formas de Matar
Un arma que potencia el reciclaje
Los rollo vacíos
también pueden usarse
Como el lector se puede imaginar, a través de las investigaciones se llegaron a desarrollar tantas formas de matar a alguien con un rollo de papel higiénico que para mencionarlas todas, este artículo debería ser infinito. Por lo tanto, resumiremos sólo aquellas de mayor importancia, que son las que más veces han sido utilizadas a lo largo de la historia.
El atizador paciente
La primera forma que desarrolló el Dr. O´Dedo cuando ya no tuvo armas de fuego a su alcance fue el llamado "Método del atizador paciente". Este método consiste en golpear a alguien en la cabeza con el rollo de papel hasta que se producen lesiones suficientes como para fracturar el cráneo. Se llama así porque su efectividad consiste en que el hombre armado se basa en su paciencia y perseverancia en los golpes.
El Dr. O´Dedo comenzó a utilizar este método contra los enfermeros del psiquiátrico en el que estaba recluído, con un éxito que podríamos llamar "moderado". En concreto, uno de los enfermeros resultó gravemente dañado por este sistema: los golpes continuos terminaron por volverlo loco.
La momia
Este método, desarrollado por uno de los discípulos de O´Dedo (concretamente, su compañero de habitación en el psiquiátrico), como su nombre indica, consiste en envolver a la víctima con papel por todo su cuerpo. La muerte, en este caso, llega o bien por asfixia, o bien por sed dada la imposibilidad para moverse y beber agua. El fallo de este método consiste en que a veces la víctima puede romper el papel con los dientes, consiguiendo así respirar. El problema del agua sería resuelto por la lluvia, que se filtraría a través del papel.
El avión de papel
Este método consiste en elaborar un avión de papel higiénico, con una punta bien hecha, para lanzarlo directamente hacia uno de los ojos de la víctima. En este caso, el objetivo muere desangrado.
Este método lo desarrolló Tim O´Dedo, el sobrino de Fred, cuando se aburría en una clase de química. El objetivo era el profesor de dicha clase, quien se había acostado con la madre, la tía y la bisabuela de Tim, provocando el enfado de éste. El estudiante aprovechó que por aquellos días sufría diarrea (por lo que llevaba siempre un rollo de papel higiénico en el bolsillo (un bolsillo muy grande) y aplicó su recién ideado sistema asesino. Lamentablemente, Tim no tenía muy buena puntería y acabó lanzando el avión directamente a una llama con la que el profesor estaba comprobando la influencia del calor en el pene de una pulga con gonorrea. El avión causó un incendio, debido al cual murieron todos los presentes. Teniendo en cuenta que esto incluye al profesor, podríamos decir que el método fue, de alguna forma, exitoso.
La muerte psicológica
Posible una vez que el papel higiénico se ha terminado, ya sea mediante el uso continuo por días, el uso instantáneo en un sólo día (gracias a esos burritos de aquella vez), o el uso para alguna de las formas de asesinato anteriores. Consiste en colocar el cartón de papel higiénico vacío en donde uno nuevo debería estar. Cuando la víctima encuentre el cartón, será nuestro primer golpe psicológico. Ésto obligará a la persona a utilizar su ropa y sus billetes para lidiar con el problema, efectivamente quedando en la ruina. Al darse cuenta de ésto, la víctima recibe el segundo golpe psicológico, tan fuerte que causará que se orine o se cague del miedo, desencadenando el tercer golpe psicológico, en el que, ahora sin manera de liberarse de su desgracia, enloquecerá en el baño y se dará un golpe fatal en el cerebro con el cepillo de dientes o alguna otra arma blanca del lugar.
Fallará si la persona intenta limpiarse con sus dedos, por lo que es recomendable cortárselos.
Sistemas "impuros"
Estos sistemas combinan el uso del papel higiénico con otros elementos. Los más importantes son los siguientes:
El rollo-yo
Este sistema consiste en reemplazar el papel por un elástico súper-resistente. De esta forma se pueden lanzar golpes a diestro y siniestro, sabiendo con seguridad que esta arma tan mortífera volverá siempre a las manos de su dueño. Queda como algo parecido a un boomerang, pero sin canguros (¿el boomerang no tiene canguros? ¡pero si viene de Australia!). Hay que tener cuidado de que a la vuelta el boomerang no golpee la cara del dueño, porque las consecuencias pueden ser fatales.
El rollo explosivo
Este sistema consiste en utilizar el rollo de papel para esconder un cartucho de dinamita. Hay que estar atento al momento en que la víctima se va al baño para encender la mecha. El estallido conseguirá no sólo la muerte del cagador, sino también una explosión de papel que irá por el aire para festejar el éxito en la empresa criminal.
El rollo como arma biológica (versión 1.0)
Este sistema consiste en impregnar el papel higiénico de mortales termitas devoradoras de intestinos. Para un mejor camuflaje, se puede pintar a las termitas de blanco. El efecto, como el lector se habrá imaginado, es MUY doloroso (el de las termitas en los intestinos, no el de pintarlas de blanco, eso no duele, salvo quizá a las termitas, si la pintura está caliente).
El rollo como arma biológica (versión 2.0)
Este sistema consiste en aprovechar el papel higiénico incluso después de su uso (especialmente si el usuario ingirió antes una comida basada en abundantes legumbres). Consiste en meter dicho papel, junto a la víctima, en una habitación sin ventilación. Es probablemente una de las muertes más crueles que se puedan proporcionar. Dependiendo de la cantidad de legumbres que se hayan comido, esto puede considerarse como un arma de destrucción masiva.
El rollo como arma biológica (versión 3.0)
Este sistema consiste en convencer, por métodos pavlovianos, a una leona, tigresa, elefanta o animal similar, de que el rollo es en realidad su cachorro. Realizado esto, se esconde al animal salvaje en algún lugar del baño, preferentemente tras la cortina de la ducha o dentro del estanque del inodoro. Al intentar limpiarse, la víctima sucumbirá ante el amor de madre del animal. También el método entrega una solución al problema de deshacerse del cadáver.
El rollo como arma biológica (versión resident evil)
Uno de los sistemas más complicados e ingeniosos. Consiste en pedirle amablemente a Ada una muestra del Virus-T, o G en su defecto, o comprarselo directamente a Umbrella, (notese que no podra admirar el escote de Ada en su vestido rojo ni preguntarle como esta Léon). Concluido este paso, inyectarle a el rollo el virus y dejarlo reposar en su tubito mientras este hace efecto. La víctima se encontrara con nuestro nuevo B.O.W. y sera irremediablemente hecho mierda. ¿Ironico no? Notese que si esta usted tratando de hacer mierda a algun personaje protagonista o co-protagonista de un RE no funcionara ya que ellos se han cargado miles de B.O.W.'s Tambien podremos conseguir un extra de dinero ya que Umbrella querrá comprar nuestro nuevo B.O.W. para poder dominar el mundo y el inframundo y el universo.
El rollo como arma biológica (versión left 4 dead)
La forma de utilizar esto es obligar a Louis a que nos de un frasco de bilis de boomer; la impregnamos en el rollo y pronto vendra una horda de infectados a acabar con el cagador (no usar si no tenemos una metralleta cerca, luego de matar al cagador los zombis te haran pedazos)
Advertencias
El papel higiénico como arma ha sido prohibido tanto por la convención de Ginebra como por la comisión de derechos humanos de las Naciones Unidas. Es un sistema cruel, y nada ecológico (el papel higiénico que se usa para las armas no es reciclado). En muchas naciones se debate su posible prohibición, pero hasta el momento la Asociación Nacional del Rifle ha conseguido que sea legal.
En cualquier caso, se recomienda estudiar bien este manual antes de experimentar, para evitar cualquier accidente. Y recuerde: las armas no matan a la gente, la gente - y el papel higiénico - matan a la gente.
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Artículo destacado Este artículo ha sido destacado en la Portada por decisión popular. Los rumores sugieren que sus autores fueron instruidos |