Homo neanderthalensis
| Neandertal | |||||||||
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| Clasificación científica | |||||||||
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| Nombre binomial | |||||||||
| ‘‘Homo neanderthalensis’’ o ‘‘Homo sapiens neanderthalensis’’ William King o Thomas Henry Huxley | |||||||||
El neandertal (Homo neanderthalensis para tu tía) fue una forma de homínido duro y atractivo que vivió hace unos 40,000 años, cuando los humanos modernos aún no habían inventado el fuego móvil ni el internet de las cosas de piedra. Algunos los llamaban Homo sapiens neanderthalensis, porque clasificar es complicado, pero lo cierto es que eran como el primo antiguo que se instaló en Europa, Oriente Próximo y Asia Central, justo cuando los humanos anatómicamente modernos estaban organizando su primera fiesta Homo... sapiens.
Los neandertales eran unos tipos duros, con huesos anchos y tórax espaciosos para que les cupiera más aire que por ese momento era más costoso, que se las arreglaban para sobrevivir en un mundo hostil, frío y repleto de dinosaurios. Descubiertos en el Valle de Neander en Alemania, el Neanderthal 1 fue el inicio de la moda robusta. Aunque algunos los consideraban una especie aparte porque eran muy racistas. Se murieron por culpa de los humanos modernos, el clima o un volcán. O por las tres cosas.. Sin embargo, nos dejaron un regalito genético que aún llevamos en nuestro ADN, gracias a las orgías del paleolítico.
Descubrimiento
Los primeros fósiles de neandertales se encontraron en Bélgica y Gibraltar, pero nadie les hizo caso porque pensaron que eran huesos de gorilas europeos. Hasta que apareció el Neandertal 1, en un valle alemán que se llamaba como él. Fue justo antes de que Darwin publicara su libro sobre la evolución, que seguro que se inspiró en el Neandertal 1. O quizás fue al revés, y el Neandertal 1 se inspiró en Darwin. Nunca lo sabremos.
El que encontró el Neandertal 1 fue un tal Fuhlrott, que se lo enseñó a un tal Schaaffhausen. Pero había otro tal Mayer, que se inventó una historia muy rara. Decía que el Neandertal 1 era un cosaco ruso que iba detrás de Napoleón. Y que tenía las piernas torcidas y las cejas muy pobladas por culpa del raquitismo. Claro, como si los cosacos rusos fueran famosos por su falta de calcio y parecido con los neandertales.
En 1864, otro tal King dijo que el Neandertal 1 era una nueva especie humana: el Homo neanderthalensis. Pero algunos de sus colegas no le creyeron. Pensaban que era un fraude, o un primo lejano de Mayer, o de Napoleón, o de Darwin.
Historia
Hace mucho, mucho tiempo, cuando el mundo era joven, el dios Urano se puso a jugar con el barro y creó a los primeros humanos: los homoerectus. Eran unos seres primitivos y peludos, que caminaban erguidos y usaban piedras y palos para todo. Urano les enseñó a hacer fuego y a refugiarse en las cuevas. Los homoerectus vivían felices, sin preocuparse por nada más que por comer, dormir, herectarse y no evolucionar. Pero cuando Urano fue destronado por su hijo Cronos, los homoerectus se quedaron sin su protector, y fueron cazados y exterminados por los Smilodon. Nadie los recuerda ya, ni siquiera yo.
Cronos se convirtió en el nuevo rey de los dioses, y quiso crear a sus propios humanos: los neandertales. Los hizo a su imagen peluda y semejanza mal encarada, y les enseñó a hacer herramientas, a cazar, a cuidar de los muertos y enterrar a los enfermos (no eran tan listos). Ellos vivían orgullosos, sin temer a nada ni a nadie. Bueno, quizás un poco a los osos y a los cromañones.
Un día, el hijo de Cronos, el dios Zeus, se hartó de su padre y lo destronó. Zeus se convirtió en el nuevo rey de los dioses, y quiso crear a sus propios humanos: los cromañones. Eran unos seres inteligentes y creativos, que tenían el cerebro más grande y el arte más psicótico. Eran más numerosos y avanzados, empezaron a competir con los neandertales por los recursos, el territorio y la moda de las barbas rupestres. Los neandertales se resistieron, y hubo muchas guerras y mezclas entre ambos. Al final, sólo quedaron los cromañones, que se convirtieron en los antepasados de los humanos actuales.
Zeus, harto de todo, envió al Tártaro, el inframundo de los griegos, a los últimos neanderthales para que dejaran de molestar con sus quejidos de extinción. Lo que resultó genial porque hacía mucho frío y había bastantes Hecatónquiros para cazar. Allí, fundaron su propia civilización, lejos de los ojos de los humanos modernos y sus lanzas correctamente afiladas. En la actualidad, la revista National Geographic está preparando una expedición al Tártaro para buscar la civilización neandertal y documentarla para tomarles fotos comprometedoras y, con suerte, continuar con la hibridación.
Taxonomía
En 1864, William King dijo que los neandertales eran una especie diferente de humanos. En 1963, Bernard Grant Campbell dijo que no, que eran una subespecie. Y desde entonces, nadie se pone de acuerdo. ¿Son los neandertales Homo sapiens neanderthalensis o Homo neanderthalensis? ¿Son primos o hermanos de los humanos actuales? ¿Se mezclaron o no se mezclaron? ¿Qué dice Darwin? ¿Qué dice la genética? ¿Qué dice la morfología? ¿Qué dice la National Geographic? ¿Qué dice dios? Nadie lo sabe. Es un misterio que nadie quiere resolver.[cita requerida.... nah]
Anatomía
Eran unos tipos duros que aguantaban el frío como nadie. Tenían la cabeza grande, el cuerpo pequeño y la nariz ancha. Algunos dicen que era por el clima, otros que era por comer muchos mamuts. Lo cierto es que tenían una fuerza brutal, y podían partir nueces con las cejas. Eran más bajitos que los humanos modernos, pero más pesados. No corrían mucho, pero caminaban un montón. Hablaban poco, pero mascaban mucho. Y vivían poco, pero intensamente.
Los neandertales y los humanos modernos tenían algunas diferencias en la cabeza. Los neandertales tenían el moño grande, la frente pequeña, las cejas gordas, la cara saliente, el mentón hundido y el espacio retromolar. Los humanos modernos tenían todo lo contrario. Los neandertales también tenían la nariz grande, los dientes grandes y el cráneo alargado. Los humanos modernos tenían la nariz normal, los dientes normales y el cráneo normal.
Alimentación
No solo comían carne, sino que también se daban sus caprichos. Según el clima y el lugar, podían comer desde pájaros y tortugas ninja hasta focas y delfines. Y no solo eso, sino que también se hacían tortitas de frutas y verduras, y se tomaban infusiones de plantas medicinales. Pero también tenían sus vicios. A veces, se comían a otros neandertales, pero no por hambre, sino por diversión. Era su forma de hacer amigos o de deshacerse de ellos.
Capacidad de lenguaje articulado
¿Los neandertales hablaban o no hablaban? Esa es la cuestión que divide a los científicos. Algunos dicen que no, que solo hacían ruidos raros con la boca, como «Yabadabadoo». Otros dicen que sí, que tenían un lenguaje parecido al nuestro, pero más tosco. La clave está en el hueso hioides, que está en el cuello y ayuda a hacer sonidos. Tenían un hioides muy similar al nuestro, lo que sugiere que podían hablar. También tenían un gen que se relaciona con el habla, lo que refuerza la idea. Pero también tenían la laringe más alta que nosotros, lo que dificulta la articulación. Entonces, ¿qué pasa? ¿Hablaban o no hablaban? ¿Y qué decían? ¿Y cómo sonaba? Nadie lo sabe, habría que preguntarles directamente.
Genómica
Los neandertales se fueron hace mucho, pero nos dejaron su ADN. Sacarlo de sus huesos no es fácil, porque hay mucha basura genética de bacterias, humanos y aliens. Pero con paciencia y tecnología se puede. Se ha secuenciado el genoma neandertal casi entero, y se ha comparado con el nuestro. Y resulta que somos muy parecidos, salvo en algunos detalles. Los neandertales podían tener el pelo rojo, el grupo sanguíneo ABO, la intolerancia a la lactosa y el gen del habla. También tenían algunos genes que nos han pasado y que nos hacen más o menos resistentes a ciertas enfermedades como a la muerte por combustión humana espontánea, que sólo nos harían pelirrojos.
Hibridación y legado genético
Y sí, compartían ADN con los humanos modernos. Se mezclaron en orgías de Próximo Oriente y Europa occidental, dando lugar a esa mezcla única que ahora llamamos "ADN moderno con un toque neandertal". Incluso les dejaron a los humanos actuales entre un 1 y un 4% de genes. Una especie de legado genético que podría ser el origen de nuestras habilidades para ponernos violentos. Los estudios genéticos han revelado que los neandertales se cruzaron con los humanos modernos hace unos 50,000 años, y que este flujo de genes tuvo efectos positivos y negativos en la salud, la inmunidad, la adaptación y el comportamiento de las poblaciones actuales. Por ejemplo, algunos genes neandertales nos ayudan a resistir mejor las infecciones, mientras que otros nos hacen más propensos a las alergias, la depresión o el mal humor. Así que la próxima vez que te sientas mal, no culpes a tu pareja, a tu jefe o a tu suegra, culpa a tu ADN neandertal.
Cultura y conducta
Contrario a la imagen de cavernícolas toscos, los neandertales eran más sofisticados de lo que parecían. Además de hacer herramientas y cuidar de los enfermos, usaban el fuego y tenían un sentido de la moda que rivalizaba con los Homo sapiens contemporáneos. ¿Cavernícolas? Más bien hipsters del Paleolítico. Se adaptaron a los ambientes fríos y variados de la última glaciación, desarrollando una morfología robusta y una cultura material diversa. También se han encontrado indicios de que practicaban rituales funerarios, adornos personales y arte rupestre, lo que sugiere una capacidad cognitiva para engañar bobos vendiéndoles cosas mal pintadas o cobrándoles un pastón por servicios funerarios prometiendo una vida después de la muerte que tras 35 mil años siguen esperando.
Sociedad
Vivían en grupos pequeños y nómadas, que se cuidaban entre sí. Pero no les gustaba mucho relacionarse con otros grupos pues también eran xenófobos. Preferían quedarse en su clan, donde cada uno tenía su papel según su sexo demostrando que eran unos cavernícolas sociales y no habían evolucionado al progresismo. Los niños neandertales tenían una infancia dura, pero no por falta de cariño, sino por el ambiente hostil ¿qué tanto? Pues, les hacían tumbas bonitas al 90% de ellos, el 10% restante no necesitaba una porque llegaban a crecer. Otras veces, les dejaban en una cueva, como al pobre de Shanidar, que tenía más achaques que años. Pero no se quejaba, porque sabía que sus compañeros le querían y que lo iban a enterrar ritualmente aunque no se muriera todavía.
Industria lítica y asentamientos
Se pasaban el día tallando núcleos y lascas, como si fueran cromos. Luego les ponían un palo y un poco de brea, y ya tenían un arma o una herramienta. Algunos eran más modernos, y hacían unas cosas que se llamaban Châtelperroniense, que sonaban a postre francés. Pero nadie sabe si se las inventaron ellos o se las robaron a los humanos modernos. También eran unos maestros del fuego, que lo usaban para todo: para cocinar, para calentarse, para trabajar la piedra y para hacer hogueras románticas. Vivían en grupos pequeños, que se juntaban de vez en cuando para hacer fiestas o cacerías. Tenían sus zonas de dormir, de comer y de hacer cosas.
Canibalismo ritual
No solo se comían a los animales, sino que también se comían entre ellos. Algunos dicen que era por el cambio climático, que les dejó sin comida. Otros dicen que era por el ritual religioso, que les daba superpoderes. Y otros dicen que era por el gusto, que les gustaba la carne humana porque somos muy sabrosos. Lo cierto es que hay muchas pruebas de que practicaron el canibalismo, y no solo por hambre. Igualmente se encontraron huesos afilados, que sugieren que los usaron como herramientas. Así que no solo se comían a sus semejantes, sino que también los reciclaban lo que es una gran forma de ecologismo.