Kerbal Space Program

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Si lo abandonas por 40 días irá a parar a las mazmorras o directamente al abismo.

Atención Kerbonauta, se recomienda que escuche el himno de nuestro glorioso Programa Espacial antes de su próxima misión. Sus posibilidades de sufrir una combustión espontánea se reducirán en un 15%.


Jervos Programando en el Espacio
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Inocentes, no saben en donde se han metido
Datos
Plataforma PC, Mac y un par de consolas
Género Simulador espacial... y de genocidio
Desarrollador Unos con un monete en el logo.
Nombre original Challenger simulator
Año de salida 2011
Datos curiosos Si tus cohetes se estrellan por un bug no es culpa nuestra.

Kerbal Space Program es un videojuego indie parido en México que trata sobre construir, manejar y sobre todo explotar naves espaciales. Es célebre por enseñar mecánicas orbitales a niños de 10 años y por su simulación de físicas plagada de fallos. Su comunidad es muy activa y crea mil y una funcionalidades a base de mods, vamos que es como un videojuego de Bethesda pero hecho con más cariño. En este título el jugador se encarga de administrar el programa espacial de todo un planeta mientras va aprendiendo ingeniería aeroespacial sobre la marcha. Que Dios os pille confesados, kerbals.

Historia

Kerbal Space Program empieza en Kerbin, un planeta muy parecido a la tierra que está infestado por unos bichos verdes y cabezones llamados kerbals. Debido a un problema de sobre población y ya que convertirlos en Soylent Verde™ sería demasiado burdo, el jugador ha de mandarlos a otros rincones del sistema solar o matarlos en el intento. Esto es un sandbox, así que cualquier método vale. Durante el juego se obtienen fondos, reputación y átomos azules. Estos últimos no sabemos de dónde salen, pero por algún motivo sirven para progresar por el árbol tecnológico. De éste se obtienen nuevas y mejores partes para tus naves, cómo un par de pilas para que el soporte vital no se apague o un moco en una cápsula que da más átomos. El primer objetivo es obtener fondos para el programa espacial, fácil, sólo hay que hacer un cohete con las partes más básicas que da el juego y que nunca más volverás a usar. Tras lanzar a tu primer kerbonauta al espacio ¡ÉPALE AHÍ! quieto parado amigo, los primeros motores no tienen potencia para salir de la atmósfera, tendrás que hacer una serie de contratos tediosos durante hora y media antes de llegar a lo bueno. Por que sí, si tras tu primer lanzamiento no ha muerto nadie, desbloquearás contratos de otras empresas que te pagarán para que pruebes nuevas partes, hagas mediciones a tomar por saco del Centro Espacial o, en el futuro, mandes turistas al espacio. Algo crucial para reducir la población.

Muy bien, una vez has conseguido los átomos necesarios, el juego te deja salir al espacio. Y más te vale haberte visto un tutorial antes, porque si no dudo mucho que sepas cómo orbitar Kerbin. Si en este punto no te has calcinado en la reentrada a la atmósfera, tendrás suficientes fondos y átomos para intentar (y recalco intentar) llegar a la Muna, bueno, llegar llegar no porque aún no puedes alunizar sin cagarte encima. Este juego va poco a poco, así que te pedirán que la orbites un rato y luego vuelvas a casa. Cuando encuentras el tutorial para alunizar ahí ya puedes probar a llegar a la superficie y como no hay atmósfera, tendrás que gastar gran parte del combustible para deceler- vale, que te has quedado varado en la Muna, no te preocupes que siempre pasa. Aquí tienes dos opciones, o bien mandas un rescatador, esta vez con el doble de combustible, o finges que el cohete varado es una base lunar y el valiente kerbal que has sacrificado dejado ahí, tu primer colono espacial.

Y bueno, todo sigue esta dinámica a partir de ahora: aceptar contratos, alcanzar nuevos horizontes en la exploración espacial y ocultar tus fallos garrafales ante la opinión pública. Lo bueno es que puedes hacer todo esto cómo tú quieras, es más hasta puedes ser un Elon Musk verde. ¿Que quieres hacer cohetes que se aterricen solos? Al toque mi rey. ¿Que quieres comprarte tu propia red social? Por supuesto, hasta te damos un traje Hazmat para aguantar la toxicidad. También podrás montar tu propio sistema de satélites para que todos los kerbals puedan acceder a tu red, ah y para comunicarte con tus naves en los límites del sistema solar, que esto iba de explorar el espacio. Ya el tema de los divorcios lo juegas en Los Sims.

Jugabilidad

La misión media termina así. Por suerte guardaste antes, ¿verdad <inserta tu nombre aquí>?

Los requisitos para jugar a este juego no son demasiado exigentes, sus gráficos son modestos. En cuanto al gameplay, tan solo necesitarás un grado de ingeniería aerospacial y un par de másters en astrofísica. En su defecto, también puedes adquirir una segunda pantalla, necesaria para reproducir los tutoriales ya mencionados mientras juegas. Y no sólo tutoriales, se necesitan gráficas para consultar cuándo se puede viajar a un planeta y cuánto combustible necesitas o también acceder a hilos de reddit de hace una década para ver si tu nave es viable o no. Veamos un ejemplo práctico de partida de KSP:

  • Inicias el juego, dependiendo de la cantidad de mods instalados y del tubérculo que tengas como procesador, la carga dura de cinco a diez minutos.
  • Si el juego no se ha colgado durante la carga toca elegir un contrato. Veamos que misiones hay hoy. ¿Aterrizar una base en Tylo? venga va.
  • Tras media hora robando mirando diseños de bases ajenas y otra media averiguando cómo meter tantos módulos en un cohete, toca el despegue.
  • Ups, has volcado la nave muy rápido y has perdido el control. Mientras tu cohete de cientos de miles de dólares cae haciendo tirabuzones al mar reviertes al lanzamiento.
  • ¡Bien! Ya estás orbitan- ah espera que se te han olvidado los paracaídas. Revertir el vuelo.
  • De acuerdo, volvemos a estar en órbita y con paracaídas de sobra. ¿Cuánto delta-v era hasta Tylo? ¿9260? Vaya hombre, el peso extra de los paracaídas hace que no tengas suficiente. Revertir el vuelo.
  • Bueno con ese par de tanques ya no te falta combustible, ¡hora de ponerse en marcha! Sólo tienes que crear un nodo de maniobras (un cachivache que permite modificar tu órbita para llegar al planeta objetivo) y trastear con sus vectores durante 20 horas hasta que la órbita intercepte a Tylo. Bien, ¿todo listo? ¡enciende los motores! y pierde toda la esperanza cuando ves que por mucho que sigas el icono del nodo, tu órbita hace lo que le da la gana, no se parece nada a la que tenías que seguir, no tienes el dichoso encuentro con Tylo y te toca hacer otro nodo para corregir todo este embrollo.
  • Haces la segunda maniobra, esta vez todo sale bien y no envejeces cuatro años extra por el estrés. Aceleras el tiempo y esperas a encontrarte con Tylo, ajustas tu órbita para que pase por el lugar de aterrizaje que te han pedido y ya estás listo para aterrizar.
  • Primer intento, ups has empezado la ignición demasiado tarde y la base se estrella contra la superficie, vuelve a intentarlo.
  • Segundo intento, esta vez has encendido los motores demasiado tiempo y te has quedado sin combustible antes de aterrizar. Tu base se estrella, vuelve a intentarlo.
  • Tras varios intentos fallidos miras cómo lo hacen jugadores más listos, una vez que has entendido la técnica lo vuelves a intentar. Cuidado... ¡Bravo! Has aterrizado de una pieza y tu bonita base está adornando la fea superficie de Tylo, una pena que mientras te obsesionabas con aterrizar no prestaste atención a dónde estabas yendo. La base no está dónde debe y te toca aterrizarla de nuevo.
  • Durante el aterrizaje número 28 te das cuenta de que no necesitas paracaídas en una luna sin atmósfera.



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En resumen, una partida de KSP consiste en un 50% de buscar información y otro 50% de revertir vuelos.

Sistema Solar

Con engendros como estos yo también querría abandonar el planeta

Este videojuego te da todo un sistema solar para explorar, con cinco planetas, dos planetas enanos, nosecuantas lunas y un número indeterminado de asteroides. Veamos los excitantes sitios en los que puedes desterrar a tus kerbals.

Kerbol

El sol, igual que el nuestro: amarillo, caliente y en el centro de toda la creación, por lo que podemos deducir que nuestro sistema solar no existe en el canon de KSP. Sería un buen sitio en el que dejar grandes cantidades de kerbals, pero si hay algo que te enseña este juego, es que llegar al sol cuesta mucho más que escapar del sistema solar. La cantidad necesaria de combustible es obscena y ni siquiera se puede tocar la superficie, pues emite tanto calor que las naves explotan antes de aterrizar.

Moho

Primer planeta del sistema solar, tiene nombre de hongo y al estar tan cerca del sol es toda una odisea llegar allí. ¿Ya puede ser un sitio chulo no? Que va, es como la Muna pero en marrón. Lo único interesante es un profundo agujero en el polo norte, y ni siquiera era algo intencional sino un bug. Al menos con tanta radiación solar las baterías se cargan que da gusto, así que se está estudiando construir minas de energía en el planeta a las que enviar pilas descargadas.

Eve

Hermana gorda y morada de Kerbin. Tiene una densa, caliente y tóxica atmósfera que dificulta acceder al planeta, destruyendo las naves de incautos kerbonautas que la menosprecian. Eso sí, si eres capaz de sobrevivir a la atmósfera, el planeta te coge cariño y no te deja escapar. Para intentar salir de Eve habría que mandar un cohete entero, con plataforma de lanzamiento y todo. Y eso si tienes suerte de no aterrizar en su océano, que ahí el cohete vuelca y no hay manera de despegar. La relación tóxica que tiene este planeta con sus exploradores hace de éste un destino muy atractivo para abandonar kerbals.

Gilly

La luna de Eve, por llamarla de alguna manera. Realmente es un asteroide y su única funcionalidad conocida es como última parada antes de llegar a la prisión que es Eve.

Kerbin

El planeta más bonito del sistema Kerbol, tiene una gran variedad de biomas que explorar, centros espaciales que descubrir y millones de kerbals que exterminar. Lo malo es que es muy parecido a la tierra, así que no dan muchas ganas de explorarlo. También sirve de objetivo si para ti volver a casa no es opcional o como vertedero de basura espacial, ¡hay que mantener los cielos limpios!

Mun

O la Muna, o Mün, o Moho pero en gris. Es el primer satélite de Kerbin y seguramente el primer cuerpo celeste que visitarás. Tiene muchos biomas distintos y cráteres en los que aterrizar, o si te sientes travieso, puedes intentar alunizar en su superficie irregul- Volcaste ¿verdad? bueno decimos que las casas cohete están de moda y lo mismo se vienen varias docenas de kerbals a hacerte compañía.

Minmus

Segunda luna de Kerbin y la más parecida a la nuestra, pues al igual ella ésta también es comestible. Aunque en la vida real nuestra luna está hecha de queso, aquí se han permitido una pequeña licencia creativa y la han hecho de helado de menta. Tiene una gravedad inferior a la Muna y un aspecto más delicioso, por lo que es más fácil llegar y mucho más difícil abandonarla.

Duna

Análogo a Marte y quizá referencia a Dune, por desgracia aquí no encontrarás especias psíquicas ni gusanos gigantes, que este juego no es tan interesante. Tiene muchos sitios que visitar, como sus enormes casquetes polares o una cara fea en medio del desierto. Posee una atmósfera muy poco densa que es algo útil para descender al planeta y considerablemente mediocre para aterrizar, pues los paracaídas a veces hacen falta y otras no sirven para nada.

Ike

En lo que respecta a ser una luna gris y rocosa, Ike hace un gran trabajo. Al contrario que Mun, no tiene cráteres si no cadenas de montañas enormes que dificultan el aterrizaje. Otra cosa que se le da de muerte es desviar a las naves que se acerquen a Duna, ya que es muy grande y orbita bastante cerca. Este saboteo continuo es un mecanismo de defensa de Duna, que pretende evitar la llegada de kerbals a su superficie. Por desgracia este juego está lleno de frikis de la exploración espacial, todos deseosos de llenar la superficie del planeta de rovers plagiados a la NASA, y éstos han aprendido a usar la gravedad de Ike para su beneficio.

Dres

Otra piedra gris y sosa. Uno diría que ésto es un mecanismo de defensa para que los kerbals no lo visiten, y a decir verdad parece que le ha funcionado, pues es el astro menos visitado e interesante del sistema solar y eso que la competencia es abundante. Es un planeta enano que orbita en un supuesto cinturón de asteroides que nadie ve y tiene una órbita inclinada para dificultar los viajes. Lo más divertido que uno puede hacer en este paraje es intentar atravesar el gran cañón del ecuador con su órbita sin estrellarse. En la segunda entrega añadieron unos anillos y una cordillera para que no lo ignorasen tanto, pero como nadie juega a ese juego, no ha habido quien se entere de estos cambios.

Jool
Desde que Valentina visitó Jool no sabe que parte de su cuerpo es que, ni tampoco como ponerse un casco.

Un gigante gaseoso con muchas lunas que explorar, es casi como otro sistema solar en el que jugar a que manejas naves espa- ah no espera. Su color verde invita a que los kerbals aterricen en su superficie, pero está hecho de gas y no tiene de eso. En su lugar cualquiera que intente aterrizar aquí sufrirá calor, presiones extremas y mil bugs. Los efectos de este ambiente hostil sobre el cuerpo de un kerbal hacen que sus extremidades y cabeza sean estirados desde distintas direcciones, quedando el bicho hecho una pena. Algo similar a lo que ocurre cuando uno cae en un agujero negro pero peor, porque en este caso se puede ver lo que ocurre desde el exterior. Debido a lo traumático y grotesco de este destino, el KSC no permite desterrar kerbals en este planeta, pues los niños que miran ilusionados las misiones desde sus casas quedarían traumatizados de por vida. Y con el tremendo problema de sobre población que tenemos en Kerbin no queremos que ahora les de miedo ir al espacio ¿verdad?

Pandora Laythe

Insólita luna con una atmósfera respirable y océanos de agua. Está plagada de islas por lo que sería un perfecto retiro vacacional de no ser por el clima helado y porque todas son de un aburrido color marrón, no vaya a ser que la luna sea interesante de más. Gracias a la presencia de oxígeno es la encargada de que los jets sean viables en este juego, dando un motivo para sacarlos de Kerbin y explorar otro sitio, a parte de que con tantas islas es el único método de transporte que merece la pena.

Su clima frío y su ligera atmósfera hace que sea el destino ideal para kerbals chilenos, por suerte Chile no existe en KSP, así que a los kerbals que vayan a parar aquí les espera una vida agónica con asma crónico y frío todo el año. No, no vamos a ponerles calefacción en los hábitats, mucho piden.

Vall

Luna hecha de hielo, con muchas montañas que la hacen parecer una bola de papel arrugada, lo que sugiere que originalmente fue un proyecto que Dios rechazó y lanzó al espacio, donde acabó orbitando a Jool. Tiene criovolcanes por toda la superficie, o sea, volcanes que escupen agua, o sea géiseres, lo que la convierte en un gran parque acuático. También se supone que posee un océano bajo la superficie, igual que Europa, pero el cupo de océanos ya estaba completo así que en este juego no aparece.

Tylo

Tiene el mismo tamaño que Kerbin y casi la misma gravedad, podría ser un planeta al uso con atmósfera y todo, pero Tylo le tiene miedo al éxito y se ha conformado con ser otra luna gris del montón. Su principal utilidad es dar asistencia gravitacional a las naves con destino a Jool, frenándolas sin tener que gastar nada de combustible. También sirve como reto frustrante, pues aterrizar en este sitio es un dolor de huevos, como ya se mostró en la sección superior. Si pretendes mandar kerbals a Tylo, condénales a ejecución por litofrenado en lugar de al destierro, no merece la pena.

Bop

Una piedra marrón con una órbita absurdamente inclinada. En un intento por hacerlo más atractivo, las agencias de viajes dijeron que aquí habitaba el kraken, pero nadie quiere ir a comprobarlo por lo aburrida y difícil de alcanzar que es.

Pol

Luna llena de nazis y memes de ranas, ah no, ese pol no. Es una pequeña luna de color amarillo, los astrónomos de Kerbin pensaban que era un grano de polen en frente de sus telescopios y tampoco estaban muy lejos de la realidad, porque es tan enana que es prácticamente lo mismo. Destacan los innumerables pinchos de su superficie y su regolito letal para aquellos con alergias. Por este motivo, los viajes a Pol se han convertido en un sádico método de ejecución para los kerbals más tocanarices.

Eeloo

Segundo planeta enano y último cacharro del sistema solar. No hay mucho que decir salvo que es un planeta frío, sin atmósfera y con una órbita inclinada y difícil de alcanzar. La mitad de las veces no tiene cobertura y está tan lejos que los paneles solares no funcionan. Si destierras kerbals en este sitio puedes mandarles reactores nucleares para que se calienten y tengan algo con lo que entretenerse. Sólo espera que no sepan como volver a Kerbin, pues darle material fisible a una población de marcianos enfadados no suena del todo bien.

Los kerbals

Kerbal Space Program 2

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En 2019 se anunció una secuela a Kerbal Space Program. Prometía tener mejores gráficos, planetas más detallados y hasta tutoriales dentro del propio juego para que los jugadores más novatos no se tirasen de los pelos. No sólo eso, también incluiría colonias de verdad, en lugar de las bases chapuceras que fingían serlo de la primera entrega e incluso viajes interestelares a nuevos sistemas solares. Todo por limpiar Kerbin de una vez de los dichosos kerbals. Originalmente iba a salir en 2020, pero como pasa actualmente en la industria, eso era una gran mentira. Aprendiendo de los grandes, cómo Cyberpunk 2077, aplazaron la fecha a 2021, no vaya a ser que tuvieran un mal lanzamiento. No ayudó que ésto ocurriese en plena pandemia y el hecho de que cambiasen de estudio a mitad del desarrollo tampoco daba buenas señales. La fecha de salida pasó a 2022 y después a 2023. Ah, ¿comentamos ya que iba a salir en early access?¿No? Bueno ahora ya lo sabes, ¡nos vemos en el lanzamiento! Total que 2023 llegó y el juego era una secuela a medias con menos funcionalidades que su predecesor. Los gráficos estaban bonitos, eso sí, pero esta vez se necesitaba un PC de la NASA para poder jugarlo, todo por hacerte sentir un verdadero astronauta. Poco a poco añadieron nuevas funciones, hicieron una hoja de ruta con cosas a añadir (sin decir fechas, no vaya a ser que los colgasen por anunciar otro atraso) y parecía que esta entrega iba a igualarse con su predecesor.

Y llegaron los despidos masivos de 2024, todos en el estudio fueron aniquilados. Oficialmente, el editor Take-Two negó que se hubiera cerrado el estudio y que el juego dejase de estar en desarrollo, pero el hecho de que en sus oficinas ya no entre nadie y que cada vez hayan más telarañas en su interior, da a entender otra cosa. Actualmente la comunidad ha vuelto al KSP original, con la esperanza de que alguien encienda las luces del estudio o vendan la franquicia a una desarrolladora más seria.