Historia de Francia

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BanderaQuemandose.jpg ¡Advertencia! Este artículo hace humor con emblemas o personajes históricos patrios. Si temes que tu héroe u orgullo nacional baje de tu pedestal imaginario, entonces NO leas este artículo.
NO DIGAS QUE NO TE LO ADVERTIMOS


Cita3.pngSólo hay dos cosas que saben hace bien los franceses: Besar y rendirseCita4.png
Pijo británico del Call of Duty 3 haciendo un repaso de la historia de Francia.

Francia es uno de los países con más historia del mundo ya que ha sido invadida múltiples veces ya sea por romanos, alemanes o raperos argelinos. Pero Francia también tuvo sus grandes momentos como la Revolución francesa o el gobierno de Napoleón Bonaparte y Napoleón III (No deben confundirse con Napoleón IV, también conocido como Emmanuel Macron).

La historia

La edad de piedra

Los primeros en poblar Francia fueron unos trogloditas conocidos como cromagnones los cuales eran iguales que el resto de los cavernícolas pero decían Oh La La! cada dos minutos y estaban gobernados por un viejo antepasado de François Hollande. Poco más se sabe de estos individuos solamente que cuando entraban en guerras tribales con otros trogloditas rapidamente se rendían y se ponían a suplicar por su vida.

Los galos y el Imperio Romano

Típicos galos

Francia estaba poblada por los galos, unos celtas que según lo que hemos podido ver en Astérix eran en su mayoría obesos y adictos al dopaje. Pero un buen día Julio César decidió expandir los dominios de Roma por todos lados incluida Francia. A los galos no pareció que les gustase mucho la idea por la que acabaron luchando en una serie de largas grescas conocidas como Guerras Galias. Finalmente las tropas de Pijus Magnificus consiguieron vencer a los galos convirtiendo así Francia en parte del Imperio Romano

La Edad Media

Tras la caída de Roma, Francia se llenó de bárbaros invasores de Alemania. Francia se volvió un lío monumental de reinados hasta que un tal Carlomagno decidió aparecer para imponer orden y repartir unas cuantas leches. Francia tuvo que enfrentarse a numerosos enemigos incluidos unos árabes locos que venían del ese país del sur. Los moros de todas formas ganarían la guerra cientos de años después cuando Francia se llenó de marroquíes y argelinos

Pero de todos los enemigos de Francia, había uno que sobresalía. Como no estamos hablando de Inglaterra con quienes tuvieron una pequeña trifulca conocida como la Guerra de los Cien Años. Este largo conflicto trajo momentos memorables como una tal Juana de Arco que tras unos cuantos vinos franceses, se le apareció Dios. Por increíble que parezca, los franceses en vez de rendirse ganaron la guerra por lo que se sospecha que hicieron trampas al consumir el dopaje de Astérix

La época barroca

Aquí podemos ver a Luis XIV en un momento de calma

Entonces, en Francia apareció uno de los reyes más famosos (Y afeminados) de la historia. Estamos hablando como no, de Luis XIV conocido también como el Rey Sol porque era muy solete. Este rey era muy amable y comprensivo, mientras él disponía de todo tipo de lujos tales como tenedores de oro, sillones de oro y fulanas de oro en el Palacio de Versalles, mientras que sus súbditos pasaban hambre y tenían que ir a luchar a guerras estúpidas de esas que salen en Barry Lyndon.

Pero en ese momento en grupo de hippies librepensadores conocido como los ilustrados pensaron que esto tal vez no fuese justo. Los reyes al descubrir esto se pusieron se muy mala hostia y decidieron meterse en más guerras ridículas tales como la Guerra de los siete años, un ridículo enfrentamiento global en la que las potencias europeas se mataban porque algún monarca le llamo gordo a otro o alguna idiotez por estilo.

La revolución

Artículo principal: Revolución francesa

Allá por 1789, los franceses estaban un poco cabreados con Luis XVI porque mientras él vivía como un rey (Mira tú por donde, curiosamente era rey) ellos pasaban hambre y frío. Los nobles, los curas y el pueblo llano se reunieron para discutir este asunto pero como eran dos contra uno, los del pueblo llano salieron perdiendo. Pese a ser franceses, no se rindieron (Que cosa más rara) y decidieron asaltar la cárcel de la Bastilla donde estaban encerrados los presos políticos que habían acabado allí por crímenes tales como escribir Me Kago en el Luis en una pared y demás idioteces. Se forma la Asamblea Nacional que convierten Francia en una monarquía constitucional. Pero esto no parece gustarles a un tal Robespierre quien decide hacer unos pequeños cambios en el gobierno creando la convención. Y aquí es cuando la cosa se pone interesante. El Robespierre ese llega al poder y lo primero que decide hacer es rebanarle la cabeza al rey utilizando un artilugio llamado guillotina. Además de María Antonieta y de Lavoisier un científico responsable de la creación de droga, unos cuantos miles de personas pierden la cabeza por este trasto, por lo que se cree que Robespierre tenía algún familiar que se dedicaba a la creación de estos trastos y que todo era un caso de corrupción política. Curiosamente Robespierre acabaría probando personalmente este trasto.

Tras esto aparece el Directorio que sin duda alguna es la etapa más aburrida de la revolución. Pero para que la cosa se ponga más entretenida, un tal Napoleón Bonaparte que vuelve de Egipto, lugar donde gracias a Tutankamón aprendió como ser un buen tirano gobernante, llegaría al poder volviendo todo esto más interesante.

El Emperador de Francia

Durante su estancia en España, aprendió de los canis el arte de hacer el gilipollas con la moto
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Napoleón durante la campaña de Rusia.

Y así en 1804 Napoleón Bonaparte se nombraría a si mismo con el clásico argumento de Por mis cojones. Napoleón estaba cabreado con el mundo por lo que decidió iniciar una campaña de Risk por toda Leropa a la que llamo las Guerras Napoleónicas, llegando a lugares tales como Rusia o España donde en un claro caso de nepotismo, coloco a su hermano José Bonaparte, más conocido como Pepe Botella por razones obvias. A los españoles no parecía gustarles este nuevo gobernante por lo que decidieron salir a la calle a montar gresca. Para colmo los hijos de la Gran Bretaña decidieron meterse en la guerra ayudando a los españoles, cosa que es increíble teniendo en cuenta las excelentes relaciones entre ambos países.

Mientras en Rusia, los cosacos les estaban también dando de hostias a los franceses y además vino un tal General Invierno que acabo rematando al ejército napoleónico. Por el camino Napoleón se había ganado unos cuantos enemigos más por lo que acabó exiliado en una isla perdida del Mediterráneo llamada Elba. Pero el pequeño Napocabrón volvió a Europa allá por 1815 para darse unas cuantas leches con el Duque de Wellington y sus amigos. El lugar seleccionado fue un sitio perdido llamado Waterloo pero una vez más, los inglesitos ganaron a los franceses y Napoleón acabó en otra isla, más perdida aún que la anterior. Estamos hablando como no de Jurassic Park Santa Elena donde moriría.

La restauración y las revoluciones liberales

Una vez que Napocabrón ha sido despedido, los monarcas europeos deciden poner a los borbones de nuevo en Francia. Hubo varios borbones candidatos al trono de Francia como Froilán (Aunque este último fue rechazado por razones obvias). Luis XVIII se convirtió en el nuevo rey de Francia y su sucesor, un tal Luis Felipe, al estar aburrido y no querer problemas con sus vecinos, decidió invadir México en la llamada Guerra de los pasteles, la que probablemente sea la guerra más olvidada de la historia. La armada francesa deseaba establecer un negocio de pasteles en México pero esto a los mexicanos no les pareció muy buena idea ya que ellos querían ser los únicos en tener el monopolio de la bollería en el país. los franceses ganaron, y por increíble que parezca no se rindieron, terminando así la guerra más ridícula de la historia de ambos países.

A los gabachos como que no les gustó mucho esta idea por lo que en 1848 iniciaron una nueva revolución que dejo a las historias imágenes tan memorables como esta. Cuando parecía que los franceses finalmente habían alcanzado la libertad, apareció el sobrino del canijo Bonaparte: Napoleón III.

El gobierno de Napoleón III

Napoleón III Bonaparte quería ser tan famoso (Y capullo) como su tío por lo que decide participar en numerosas guerras como la Guerra de Crimea o una nueva intervención en México (Aunque esta vez contó con la ayuda de otros amiguetes de Leropa). Pero su verdadera ocasión llegaría con la Guerra Franco-Prusiana cuando Alemania decidió invadir las regiones orientales de Franchutelandia. Napoleón III estaba deseoso de entrar en combate para así convertirse en un ídolo como lo fue su tío pero como no es que fuera muy listo acabó siendo prisionero de los alemanes y obligado a renunciar al trono.

La Tercera República

Tras deshacerse del pelmazo de Napoleón III, en Francia llegó una época más o menos tranquila en la que se realizarían grandes aportes tales como Julio Verne, la Torre Infiel o más importante aún: El Can-Can, símbolo de los pervertidos franceses junto a los cruassants o los cabezazos asesinos de Zinedine Zidane

Los franceses eran tan trés géniale que tenían expandir su país hacia otros lugares del mundo para así ganar a los inglesitos que ya habían comenzado a invadir y someter colonizar África. También se expandieron en el Océano Pacífico llegando a lugares como Tahití e incluso intentaron llegar a Tuvalu Ulterior pero al ver lo cutre que era este país, se rindieron sin luchar.

La Primera Guerra Mundial

Al principio del Siglo XX la política europea era una paja mental monumental por lo que cuando el Archiduque fernando fue asesinado en Serbia todos los países de Europa, menos los españoles que son muy listillos se pusieron a vender chatarra a todos los bandos, acabaron dándose de hostias. Como los franceses estaban cagados de miedo porque los alemanes les iban a invadir tuvieron que pedir ayuda a los inglesitos y a los norteamericanos. Al final la guerra esta termino en una especie de empate pero como los franceses no querían acabar pareciendo unos perdedores, que es lo que son crearon el Tratado de Versalles para tocar los huevos castigar a Alemania. Los alemanes se cabrearon y acabaron votando a un tal Hitler que le devolvería la jugada.

La Segunda Guerra Mundial

Tras que Francia se llenase de españoles que huían de un bigotudo con mala leche llamado Franco, otro bigotudo llamado Hitler decidió invadir Francia. Los franceses se cagaron los pantalones y tras dos minutos decidieron rendirse y convertirse en la fulana de Hitler. Pero un gabacho llamado Charles de Gaulle no quiso rendirse y creo un gobierno en el exilio que a decir verdad no es que hiciese mucho... Para colmo los japoneses también decidieron invadir las colonias francesas en el sudeste asiático aunque un vietnamita con cara de ladilla llamado Ho Chi Minh lo intentase evitar. Finalmente los aliados desembarcaron en Normandía y gracias al Call of Duty conocemos el resto de la historia.

La posguerra

Pero a Francia no se le acabaron los problemas con la derrota del bigotudo sino que ese tal Ho Chi Minh decidió que los franchutes eran tan malos como los japos e iniciaron una guerra por lo que Francia tuvo que rendirse. En Argelia, los franceses no sólo tuvieron que rendirse también sino que también los argelinos invadieron Francia mediante inmigrantes y jugadores de fútbol. Los franceses también se rindieron en el África tropical y el Sáhara. Y a Charles de Gaulle los estudiantes se le rebelaron en Mayo del 68.

Los franceses estaban deprimidos y paran compensar tuvieron que construir una Bomba nuclear y el cine erótico cutre de los Años 70 que todos los españoles iban a ver al otro lado de la frontera.

La Francia del Siglo XXI

Si por algo se caracteriza la Francia de hoy en día es por sus grandes aportes al mundo tales como Fútbol, Rap en franchutés y David Guetta. Varios presidentes intentaron hacer grande de nuevo a Francia como en tiempos de Napoleón pero todos fracasaron. En Francia tuvimos presidentes tan ilustres como Jacques Chirac, Nicolas Sarkozy (Conocido como Napoleón IV por cuestiones de estatura) o el amado por todos François Hollande. En 2017 una loca con aires de grandeza llamada Marine Le Pen quiso copiar a Trump y Rendre la France encore grande. Pero sin embargo el ganador resulto ser un guaperas llamado Emmanuel Macron