Mao Zedong

	Este artículo ha sido escrito por un esforzado кoмциіѕтд, camarrada.
	¡El camarrada Lenin está orgulloso de él!

Mao Tse Txung'o

El presidente Mao cuando fracasó el Gran Salto Adelante.

	Alteza impelial de China y alrededores

Mandato	1943-1976

Residencia	Un ataúd de cristal

Hechos	Volvió China lo que es ahora, una tierra libre de pandas.

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Ming el Despiadado	Jackie Chan

Personal

Nacimiento Defunción	República de China República Impopular de China

Afiliación	Partido Comunista de Inciclopedia.

Estado actual	Dispuesto a levantarse cuando sea necesario.

Relaciones	Pol Pot, Kim Il Sung, Ho Chi Minh y otros chinos comunistas.

Enemigos	Los chinos no comunistas (incluidos japoneses, coreanos y Chiang Kai-Shrek).

Lo urgente generalmente atenta contra lo necesario.

— Mao Tse Tung sobre las costumbres sexuales en China.

LMAO Tse Txungo fue un demógrafo, líder revolucionario y estadista (que veía las estadísticas) de la República Popular China que se dedicó a resolver los problemas de superpoblación de su país y, de paso, mejoró la agricultura y la cultura con una revolución cultural.

Los Inicios

Como bibliotecario de la Universidad de Pekín, tuvo acceso a la gran sabiduría milenaria del pueblo chino. Gracias a dicha sabiduría, que siempre resalta al hombre las verdades más profundas y a la vez más sencillas de la existencia, el joven Mao llegó a una conclusión impensable para su época: Hay muchos chinos. A partir de esta máxima, Mao fue desarrollando su ideología política. La Unión Soviética le ofrecía un excelente ejemplo de cómo reducir la población obrera mediante guerras, purgas y hambrunas. La genialidad de Mao consistió en adaptar la ideología Marxista-Leninista a la realidad de China, mediante la brillante idea de hambrear a los campesinos en lugar de a los obreros.

La Marcha de 1000 kilómetros

Todo camino de 1000 kilómetros acaba con un único chino muerto de agotamiento

— Lao-Tse sobre Mao Tse Tung

No importa cuantos chinos desaparezcan, el problema es que siempre vuelven a aparecer más.

El enfrentamiento entre comunistas y nacionalistas ya estaba causando algunas bajas en ambos bandos, pero los resultados estaban lejos de satisfacer los planes a gran escala de Mao. No quiso dejar que todos los comunistas mueran en Shanghai, ya que era posible ir esparciendo cadáveres a lo largo y ancho de todo el país. Decidió entonces iniciar una larga marcha que le permitiera ir matando de hambre y agotamiento a sus primeros partidarios en los primeros tramos, mientras que reclutaba más chinos que irían quedando tendidos en los kilómetros posteriores. La estrategia resultó ser un éxito rotundo: al llegar al kilómetro mil, Mao había aliviado a incontables chinos de la dura carga de la vida. Enormes cantidades de campesinos chinos, testigos de semejante proeza, se le habían unido con entusiasmo. Mao había hecho de suficientes adherentes como para reanudar la carnicería con los nacionalistas, a mucho mayor escala.

La Guerra con Japón

Un civilización cuyos mejores guerreros se suicidaban gustosos al final de cada batalla perdida eran para Mao una nueva fuente de inspiración. Por suerte para China, el Japón tuvo la feliz idea de invadirla, hacia el año 1937. A partir de entonces, Mao pudo ir despachando sus soldados ante balas niponas o nacionalistas, según conviniera a la ocasión. La diversión se terminó cuando los Estados Unidos, alarmados ante el avance comunista en China, decidieron darle fin con dos bombas atómicas sobre el Imperio del Sol Naciente.

Fervientes partidarios de Mao combatiendo el exceso de productos Made in Taiwan

El Gran Salto Adelante

Una vez que el Partido Comunista se hizo con el poder dejando a China realmente al borde del abismo, tan sólo era necesario dar un gran salto adelante para caer en él. Sin embargo, las políticas económicas empleadas por Mao en este período resultaron ser un fiasco. A pesar de las grandes expectativas depositadas en él, sólo logró matar de hambre a no más que unas pocas DECENAS DE MILLONES DE PERSONAS, por lo que fue desplazado del poder. Al parecer, sus innovadoras técnicas para reducir la producción de grano, y el aumento de la exportación de lo que sí se llegaba a producir, aún dejaba algo de alimento para los campesinos.

Mao censuró varias obras de arte, adaptándolas a la correcta imagen del partido.

La Revolución Cultural

El fracaso del Gran Salto Adelante ayudó a Mao a ver la situación desde una nueva perspectiva. La negativa de la mayoría de los chinos a morirse de hambre y su insistencia en seguir reproduciéndose incesantemente, estaba profundamente arraigada en su cultura. Para atacar el problema de raíz, primero era necesario eliminar a todos aquellos que propagan el mal: artistas, intelectuales, médicos y demás profesionales. Esta medida, sumamente exitosa, obviamente le devolvió el apoyo del Partido, e incluso generó un reverenciado culto a su persona por todas las madres chinas agradecidas de tener menos bocas que alimentar.

Su legado

Si hasta apareció en Dragon Ball

Actualmente el gobierno de China comparte la antigua preocupación de Mao por la superpoblación, aunque hoy en día se apliquen medidas menos drásticas y tan sólo se encarcele y se castre a cualquiera que tenga más de dos hijos, que se le pase por la cabeza tener un tercer hijo o mencione la palabra "hijo" en voz alta.

Típico de la tradicional impenetrabilidad oriental, es que los altos funcionarios del Partido Comunista Chino se hagan los locos, silben y miren para otro lado cada vez que un visitante extranjero les consulta acerca del "legado" del amado camarada presidente Mao.

Galería

Mao en una plantación ~~de opio~~
Mao durante la final del mundo de tenis de mesa, en la que lucho contra Forrest Gump
Si no fuese por el Dios Sol Mao, no habría girasoles en china
Mao, patrón de los floreros
Nada como unas Matrioskas comunistas para decorar la Ciudad Prohibida
Mao era un traidor para la causa comunista, En esta foto se le puede ver haciendo el saludo nazi
Mao adaptándose a los tiempos modernos
El todopoderoso Mao utilizando sus poderes de rayos láser para trazar un bello arcoiris sobre Tiananmen