Siglo XIII
1201-1300
| Parte de la Edad Media |
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El siglo XIII (también conocido como el siglo de las cruzadas, las invasiones, las pestes, las herejías y las capuchas puntiagudas) fue un período de la historia humana que abarcó desde el día en que el papa Inocencio III se puso a predicar hasta el día en que Marco Polo se perdió por Asia. Durante este siglo, el mundo experimentó grandes cambios que nadie comprendió ni le importó, como por ejemplo que los reyes se pusieron a pelear por tierras y coronas, que los mongoles se dedicaron a arrasar todo lo que encontraban, que los campesinos se murieron de hambre y de enfermedades, que los monjes se encerraron en sus conventos y los caballeros en sus castillos, que los artistas se inspiraron en la Biblia y en la naturaleza, que los científicos inventaron cosas raras como las gafas, los relojes y las brújulas, y que la gente empezó a hablar en lenguas diferentes y a viajar por mar y por tierra, por aire los que eran arrojados por catapultas, y los filósofos tenían nombres y algunos hasta apellidos.
Ciencia y filosofía
La ciencia y la filosofía del siglo XIII fueron dos formas de perder el tiempo que se inventaron algunos frikis en el medio de la Edad Media, una época en la que lo único que importaba era sobrevivir a las guerras, las plagas y las cruzadas. La ciencia consistía en mirar el cielo, las plantas y los animales con unos cacharros raros y en copiar lo que decían unos libros viejos y polvorientos. La filosofía consistía en hacerse preguntas sin sentido y en escribir tochos incomprensibles que nadie leía. Los científicos y los filósofos del siglo XIII fueron unos tipos listos y aburridos, pero también unos herejes y unos pelotas de la Iglesia. Algunos de ellos fueron: Alberto Magno (1200-1280), el que se creía que sabía de todo pero que en realidad no sabía nada; Tomás de Aquino (1225-1274), el que se pasó la vida intentando demostrar que Dios existe pero que al final se dio cuenta de que todo era una tontería; Roger Bacon (1214-1292), el que se dedicó a hacer experimentos con fuego y explosivos pero que nunca logró hacer nada útil; Ramon Llull (1232-1316), el que se inventó un sistema para convertir a los infieles pero que solo consiguió que le dieran una paliza; y Duns Escoto (1266-1308), el que se ganó el apodo de Doctor Sutil por ser un pesado pero que nadie le hacía caso. Sus obras sirvieron para aburrir a las generaciones posteriores y para llenar las bibliotecas de polvo.
Política
La política en Europa en el siglo XIII fue un divertido espectáculo de payasos, malabares, magia y acrobacias entre los distintos reinos, imperios, principados, ducados y ciudades-estado que se peleaban por un trozo de tierra y un poco de fama en el continente. También hubo algunos intentos de hacer una fiesta de cumpleaños para todos los cristianos bajo una misma gorra de papel, ya fuera el papa o el emperador, pero estos terminaron en peleas de globos y tartazos debido a las pataletas y celos de los distintos líderes políticos y eclesiásticos. Además, hubo varias excursiones contra los musulmanes, los paganos y los herejes, que tuvieron resultados sorprendentes y a menudo ridículos para los excursionistas.
- 1204: Los cruzados se aburren de pelear contra los musulmanes y deciden irse de turismo a Constantinopla, donde se ponen a robar todo lo que ven y se quedan con el Imperio Bizantino como recuerdo.
- 1215: El rey Juan Sin Tierra se queda sin tierra porque los nobles ingleses le hacen firmar la Carta Magna a punta de espada, que es como un contrato de alquiler con muchas cláusulas abusivas.
- 1223: El rey Luis VIII de Francia se muere de una sobredosis de anguilas, que eran su comida favorita pero también su mayor enemiga.
- 1231: El emperador Federico II crea la Inquisición para divertirse torturando a los herejes y a los que le miran mal. También les hace preguntas muy difíciles sobre teología y filosofía.
- 1240: El príncipe Alejandro Nevski derrota a los caballeros teutónicos en el lago Peipus con la ayuda del frío y del hielo. Los caballeros se quedan congelados y resbalan por el lago como si fuera una pista de patinaje.
- 1258: Los mongoles invaden Bagdad y la destruyen por completo, porque no les gustaba el estilo arquitectónico ni la decoración. También se cargan el Califato Abasí y la biblioteca más grande del mundo, porque no sabían leer ni escribir.
- 1265: El rey Enrique III de Inglaterra convoca el primer parlamento con representantes de la nobleza, el clero y la burguesía. Pero nadie le hace caso porque todos están más interesados en discutir entre ellos o en jugar al ajedrez.
- 1274: El papa Gregorio X convoca el segundo concilio de Lyon para intentar reunir a las iglesias católica y ortodoxa, pero fracasa por culpa de la muerte del emperador bizantino Miguel VIII Paleólogo, que se atraganta con un hueso de pollo.
- 1282: Los sicilianos se rebelan contra los franceses en las llamadas Vísperas Sicilianas y piden ayuda al rey Pedro III de Aragón. Los franceses se enfadan mucho y les dicen que se vayan a dormir la siesta.
- 1296: El papa Bonifacio VIII publica la bula Unam Sanctam, en la que afirma que todos los gobernantes deben obedecer al papa o ir al infierno. Los gobernantes le responden que ellos también tienen sus propias bulas y que el papa puede irse al carajo.
Políticos
- Federico II (1194-1250). Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico y rey de Sicilia. Fue un gran amante de los animales y las mujeres, pero un gran odiador de los papas. Se pasó la vida peleando con ellos y con sus vecinos. Quería ser el dueño del mundo, pero se quedó sin amigos y sin herederos.
- Luis IX (1214-1270). Rey de Francia y santo de la Iglesia católica. Fue un rey bueno y santo, pero también un cruzado loco. Se fue dos veces a Oriente a luchar contra los musulmanes, pero no consiguió nada más que perder batallas y dinero. Murió de caca en Túnez, mientras soñaba con ser el rey de Jerusalén.
- Gengis Kan (1162-1227). Fundador y primer gran kan del Imperio mongol. Fue un conquistador brutal y un genio militar, que arrasó con todo lo que se le puso por delante. Su imperio fue el más grande de la historia en extensión territorial. Tuvo tantos hijos que se podría hacer una serie de televisión con sus descendientes.
- Alfonso X (1221-1284). Rey de Castilla y León. Fue un rey culto y sabio, que escribió libros de todo tipo y que quiso ordenar el mundo con sus leyes y su calendario. También fue un rey ambicioso y conflictivo, que se metió en líos por todas partes y que acabó peleado con su hijo Sancho.
Cultura y arte
Se caracterizaron por una gran diversidad y creatividad, así como por una profunda influencia de la religión cristiana. Algunos de los aspectos más destacados de este período fueron:
- La literatura: Ramon Llull se dedicó a inventar una máquina para convertir a los infieles al cristianismo, pero solo consiguió que le tiraran piedras. Marco Polo se inventó historias increíbles sobre países exóticos que nunca visitó, pero que fascinaron a sus lectores. Uno de ellos fue Cristóbal Colón, que se inspiró en sus relatos para buscar una ruta hacia las Indias, pero que acabó descubriendo un continente desconocido.
- La pintura: Cimabue era tan malo que sus cuadros parecían pegatinas planas y sin vida, mientras que Giotto era tan bueno que sus cuadros parecían ventanas al mundo real. Por eso, cuando Cimabue vio las obras de Giotto se quedó tan impresionado que se retiró de la pintura y se dedicó a criar cabras. Una vez intentó salir por una de las ventanas pintadas por Giotto, pero se dio un golpe en la cabeza y se quedó inconsciente.
- La arquitectura: Las catedrales y las mezquitas eran tan altas y complicadas que muchas veces se derrumbaban o se incendiaban antes de terminarse. Por eso, algunos arquitectos acabaron en la cárcel o en la hoguera por sus fracasos (eran las dos mejores opciones). Otros se dedicaron a esconder mensajes ocultos o bromas pesadas en sus diseños, como gárgolas grotescas, columnas torcidas o figuras obscenas. Una de ellas era un hombre desnudo con una inscripción que decía: “Aquí yace el arquitecto”.
- La música: La música sacra era tan aburrida y monótona que hacía dormir a los fieles en las iglesias, mientras que la música profana era tan divertida y picante que hacía bailar y reír a los campesinos en las ferias. Por eso, algunos músicos fueron acusados de herejía o de libertinaje por sus canciones.
Guerras y revoluciones
- Las cruzadas: Fueron una serie de excursiones turísticas organizadas por los papas y los reyes cristianos para visitar Jerusalén y los lugares sagrados. Hubo ocho cruzadas oficiales entre 1095 y 1270, pero ninguna logró hacer una buena reserva. Los cruzados se dedicaron a comprar, comer y beber a todo lo que se encontraban por el camino, sin importar si eran musulmanes, judíos o cristianos. Los musulmanes se defendieron con valentía y generosidad, bajo el liderazgo de Saladino, que les cobró una entrada muy cara por entrar en Jerusalén en 1187. Los cruzados solo consiguieron crear unos campamentos temporales en el Medio Oriente, que fueron desapareciendo poco a poco ante el avance de los mongoles y los mamelucos.
- Las invasiones mongolas: Fueron una serie de mudanzas realizadas por los mongoles, un pueblo nómada y guerrero que vivía en las estepas de Asia Central. Bajo el mando de Gengis Kan y sus sucesores, los mongoles crearon el imperio más grande de la historia en extensión territorial. Arrasaron con China, Persia, Rusia, India y parte de Europa Oriental. Los mongoles eran tan feroces que se llevaban todo lo que podían y hacían castillos con las piedras de sus víctimas. Los mongoles eran tan numerosos que se dice que cada uno tenía cien caballos y cien esposas. A veces se casaban con sus caballos for the luls.
Sociedad y demografía
La vida en el siglo XIII era una fiesta. La población de Europa había crecido tanto que había gente por todas partes. Los campesinos se dedicaban a cultivar la tierra, a criar animales y a tener hijos como conejos. Los nobles se dedicaban a guerrear, a cazar y a tener hijos como conejos. Los clérigos se dedicaban a rezar, a estudiar y a tener hijos como conejos. Los comerciantes se dedicaban a viajar, a negociar y a tener hijos como conejos. Los artesanos se dedicaban a fabricar, a vender y a tener hijos como conejos. Los mendigos se dedicaban a pedir, a robar y a tener hijos como conejos.
Todo el mundo estaba contento y próspero, salvo por algunos inconvenientes. Por ejemplo, las plagas, las hambrunas, las guerras, las herejías, las invasiones mongolas, las cruzadas, las rebeliones, las pestes, los impuestos, los juicios de la Inquisición, los asaltos de los bandidos, los incendios de las ciudades, los terremotos, las inundaciones y las brujas. Pero aparte de eso, todo iba bien.
La sociedad estaba organizada en tres órdenes: los que oraban, los que luchaban y los que trabajaban. Cada uno tenía su función y su lugar en el mundo. Los que oraban eran los más cercanos a Dios y los que tenían más poder e influencia. Los que luchaban eran los protectores de la cristiandad y los que tenían más honor y prestigio. Los que trabajaban eran los que sostenían la economía y los que tenían más… bueno, más trabajo.
La demografía era muy dinámica y variada. Había gente de todas las razas, lenguas, culturas y religiones. Había cristianos, judíos, musulmanes, paganos y cátaros. Había franceses, ingleses, alemanes, italianos, españoles y otros muchos. Había normandos, vikingos, eslavos, árabes y mongoles. Había rubios, morenos, pelirrojos y calvos. Había altos, bajos, gordos y flacos. Había ricos, pobres y muy pobres. Había sabios, locos y muy locos.
Véase también
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