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El corazón delator
El Corazón Delator es un cuento para dormir escrito por el macabro escritor Edgar Allan Poe, en el cual relata la historia de un prejuicioso hombre que le molesta y desagrada el ojo asquerosamente inhumano de su visitante y por ello con todo raciocinio decide apuñalarlo para resolver el asunto. Después empieza a oír latidos donde sea, se vuelve loco y grita mucho. La historia muestra una trama que indica que las discapacidades justifican matar a alguien y que la música beat puede volverlo loco después de un tiempo.
Relato
Un señuelo, hay algo oculto en cada sensación...
Parte ahí la historia en la lejana mitad del burdo y burro siglo XIX. Entre penumbras y un olor a mierda de vaca característico de la época de las historias de Poe no respectivamente. En la gran casa del hombre loco que todo el tiempo menciona no estar loco, se hospeda un anciano que nadie sabe de done ha aparecido, es de buen carácter y es agradecido con su respectivo huésped, por lo que gana el cariño de todos los que lo conocen, excepto de uno, gracias a lo que parece ser producto de una fornicación perspicaz y extraña con aves, o de un temprano experimento nazi, teniendo en su cara un desagradable ojo de buitre, un ojo de buitre de mal augurio como una fuerte lluvia, y de mal salud como la clamidia.
Este ojo vuelve loco a solo uno, a su propio huésped, que a pesar de semejar de ser un hombre calmo, quiere molerse a palos al anciano, arrancarle aquel ojo y dárselo de comer a los perros o algún chino. Y este ojo desagradable y saltón será el desencadenante de toda la trama siguiente.
Ella (o el) parece sopechar, parece descubrir...
El hombre comienza a volverse loco y fisgón, dándose la tarea de espiar al viejo siempre que duerme. En cualquier historia gore o película porno, eso acabaría mal desde muy temprano, pero el hombre espera a ejecutar su plan, espera con paciencia, le gusta ser pasivo en la historia, o tal vez tenga algún fetiche muy extraño, pero siempre desde el borde de la puerta, con una pequeña vela, espía al anciano y espera el brillante momento para sacarle ese feo ojo de una vez por todas.
El sujeto tarda siete días en elaborar su plan., y en la noche del octavo, no puede esperar más, y se dirige de nuevo a la habitación del viejo. Este como de costumbre duerme; "oh, dulce calma, ¡no hay nada como dominar a un inocente!", el hombre ahora sabe lo que sienten los pedófilos y los burócratas. Enciendo un poco la luz, y coincidentemente el ligero haz de luz refleja el aberrante ojo. El anciano despierta nervioso pero no observa a nadie, se siente en riesgo y su corazón empieza a latir. El hombre escucha los sonidos nocturnos del anciano, además de sus pedos y uno que otro moco resagado. El plan está decidido, el corazón del anciano late al compás de cada puñalada que recibe y cada "me cago en la puta" que grita al recibirlos. El anciano muere, el hombre es feliz, y ahora puede irse a leer el periódico feliz.
En mi debilidad, oh mi (o su) corazón se vuelve delator...
"De a poquito en poquito se llena un jarrito", o algo así dijo una vez mi abuela, y también aplica para mutilar gente, por lo que el hombre corta por partes el cadáver del anciano y los esconde bajo distintas tablas de su casa para después jugar a "Encuentra el tesoro" con sus amigos. Se siente orgulloso de que ha terminado su misión, y se sienta a gusto a disfrutar el hermoso hecho de que bajo su silla hay un pie engangrenado.
Esa misma noche el funesto hecho ocurre, un acto maquiavélico, o algo que regularmente puede pasar en su barrio. La policía arriba a la casa del hombre, recibiendo el reporte de un grito proveniente de esa casa. El hombre, que en un principio se encuentra realmente en el paraíso, le importa poco dejar pasar a la policía a su casa para que pisen indirectamente un cadáver. Después de un rato, la policía corrobora que todo está en orden, pero a nadie le gustan los invitados, ni a mí, ni a usted, ni a su madre de usted, y los polícias le incomodan más que una muela rota. Poco a poco el hombre comienza a desesperarse, y poco a poco se oye el latido, "pum", y los policías no se van de su casa, "pum", y comienza a sudar un montón, "pum", un policía se ha embriagado en su casa, "pum", y no puede más. El hombre grita y confiesa a los cuatro vientos, ha salido del closet matado al anciano y el corazón de este lo ha delatado.
Interpretación
A pesar de que está científicamente comprobado que hablar solo, mutilar personas y fingir estar en un libro y hablar con el lector son signos de evidente locura, el narrador de la historia afirma no estar loco, ni siquiera un poco, y los locos siempre niegan su locura hasta que ya están lo suficientemente locos como para olvidar hablar o aventarse desde un puente. Aún así, muchos supuestos intelectuales que se creen mejores lectores que usted y yo consideran un significado diferente de la historia.
Algunos consideran que el hombre que narra la historia está confesando su crimen al momento que narra el libro, posiblemente a los mismos policías, a Dios, o gracias a un juego de girar la botella. Otros consideran que el hombre está anunciando con orgullo su crimen y que posiblemente, signifique que próximamente asesine al lector en un macabro suceso, pero al menos que usted vea mucho DrossRotzank o sea amigo de un asesino de verdad esto es poco factible. Otra interpretación es aquella lucha interminable del ser humano entre el bien y el mal interno, interpretado así por muchos fraudulentos sacerdotes y estudiantes libertinos de filosofía, que entablan en el interior de aquel hombre una lucha interminable e incanzable entre un dios y un diablo pequeñitos que se agarran a golpes con sus vísceras y por ende se vuelve loco, o al menos aquí lo interpretamos así.
Otras versiones y adaptaciones
- Película mala de 2009: Un clásico de tal magnitud de la literatura no podía quedarse fuera de la pantalla grande, y así como viejos refunfuñones en Navidad y vampiros brillantes adolescentes triunfaron, la adaptación del cuento de Poe lograría grandes cosas. Aunque tras el intento de hibridación de este con las películas de Transformers y de Liam Neeson, las cosas no salieron muy maravillosas, a pesar de todo, la película se volvió un gran clásico de los botes de remates de DVD's de los supermercados.
- Música: Al parecer este oscuro y lúgubre relato ha inspirado a varios músicos contemporáneos, que en sus etapas góticas de punk y sus viajes con sustancias ácidas extrañas han dedicado varias canciones al corazón delator aunque sus líricas no tengan prácticamente nada que ver.