Jean Baudrillard
Jean Baudrillard fue un sociólogo, filósofo, fotógrafo francés considerado dentro de la corriente posmoderna; que estudió y criticó la cultura francesa (y toda la cultura, en general). Su pensamiento está orientado hacia la realidad, la hiperrealidad, la virtualidad, los símbolos, los simulacros de sismos, la información y las sociedades de consumo de finales del siglo XX y comienzos del XXI. Aunque nada ésto fue nunca verdad, porque nada es real.
Biografía
Aquí una reseña de su vida, sus logros y fracasos y la evolución del contexto que lo llevó a sus meditaciones.
Juventud
Nació en Reims, en Francia, el 20 de Junio de 1929, durante un temblor. Durante toda su niñez, adolescencia y juventud vivió enfrascado en una aparentemente irreversible adicción por los juegos de computadora (no, no me digan que no los habían inventado aún, eso es sólo la información que sus sistemas de poder han inventado), lo que explica su posterior obsesión por el tema de la "virtualidad" (que desarrollaremos posteriormente).
Esta es una de las etapas que Baudrillard ocultó con más vehemencia, por estar profundamente avergonzado de su pasado friki.Se pasaba días, horas jugando en la computadora, sin levantarse (excepto cuando se trataba de la hora de almorzar o cenar). Tenía a todos sus familiares preocupados, pero no dejaba que ninguno entrara a su habitación para nada, pues temía que lo desconcentraran. Y en lo que se conectaba al internet para jugar, pues también le alcanzó el tiempo para tomar unas clases de sociología y fotografía; de paso aprendió alemán. Pero qué útil es el Internet.
Sin que se diera cuenta, le llegaron los 25 años; y estalló la guerra de Argelia. Es en este punto de quiebre donde empieza su febril ascenso por la escalera del conocimiento. Durante el despegue de un avión Francés, el cable de conexión a Internet se rompió, dejando a toda la ciudad de Reims incomunicada y aislada de los servidores. El joven Baudrillard salió del sopor en que el vicio lo tenía y comprobó que, efectivamente, no tenía conexión. Salió a la calle y preguntó a su vecina: "¿Qué ha pasado con la conexión a Internet?". La vecina, que resultó ser bastante bonita, le respondió: "Es un avión, hay una guerra...o algo así...creo". En ese momento, Baudrillard cayó en la cuenta de dos cosas: Que la guerra es mala, causa muerte y destrucción y que es parte de una realidad-simulacro en que los medios masivos de comunicación tienen sumido al mundo; y de que su vecina era sumamente atractiva. Tomó la decisión de dedicarse a la política, la crítica literaria, y casarse con su vecina. Dejó el internet, se afeitó por primera vez, se lavó la cara y se mudó de la casa de su madre.
Madurez
Ya libre del yugo del vicio, sin conexión a internet, y algo de vida social, se dedicó a ayudante de profesor en una universidad, mientras publicaba sus estudios sobre la sociedad de consumo, los simulacros, la realidad y todas esas cosas filosóficas que trataremos después. Vivió de su moderado sueldo como ayudante de cátedra y las regalías de sus libros, y con algunos ahorros logró comprar un pequeño apartamento en París y casarse con su vecina, quien le dio dos hijos.
Es en esta etapa de su vida donde escribe la mayor parte de sus trabajos sobre el marxismo, en especial para decir que era pasado de moda; y había pasado a la historia. Luego, para colmo, anunció que la historia no existía; así que mandó todo lo anterior al diablo y se concentró en lo nuevo.
Década de los 90s
Los buenos años 90s. Fue una década importante en la vida del señor Jean Baudrillard, pues le trajeron algo de fama (no la suficiente, claro está). A principios de estos años, hubo un pequeño malentendido entre Saddam Hussein y la ONU. Aparentemente, por accidente, algunos pocos miles de soldados iraquíes habían (otra vez: accidentalmente) invadido Kuwait; y los Kuwaitianitenses no estaban precisamente encantados, así que llamaron a la
Casa Blanca. El Mr. President, que por esas fechas era Bill Clinton llamó a sus amigos, y al más puro estilo "Teléfono malogrado" todos se enteraron del asunto, y la tensión se incrementó en el Golfo Pérsico.
Pues bien, este problemita no tomó desprevenido a Jean, quien había hacía tiempo advertido que los soldados iraquíes estaban algo nerviosos. En un destello de genialidad, el 16 de enero de 1991 declaró al mundo entero en conferencias de prensa, libros, periódicos, la revista Playboy y una película, que "la Guerra del Golfo no tendría lugar". Había llegado a esta conclusión luego de analizar durante varios meses las relaciones exteriores de los países involucrados y relacionarla con su concepción de las relaciones de poder entre los países y estaba seguro. Al día siguiente, la guerra empezó.
Cada político, reportero y todas las tres personas interesadas en el asunto se burlaron de él, sus libros no se vendieron más y las acciones que había comprado se desplomaron. Fue el hazmerreír de toda Francia, Europa y del mundo entero. Su mujer lo dejó, sus hijos se alejaron de él, perdió su trabajo en la universidad y la gente lo empezó a mirar mal en las calles. Ante todo esto, como Jean no pudo enfrentarse a semejante infortunio con optimismo, enloqueció. Para mediados de los 90s, empezó el declive mental final de Baudrillard.
Años finales y locura
Luego de la vergüenza pública y el desmoronamiento de su vida social, laboral, científica y sexual, Baudrillard se volvió loco. Declaró que había tenido razón, y que la Guerra del Golfo no había sucedido jamás. Aunque ya para entonces no era tomado muy en cuenta, se le interrogó al respecto de esa aseveración, y cuando le tocó argumentar por qué seguía firme, a pesar de que la guerra sí había sucedido, comenzó una de las etapas más fructíferas de su pensamiento. Lástima que hayan sido elucubraciones de una mente lunática. Surgió su pensamiento respecto del "simulacro", la realidad como símbolos de símbolos de símbolos y cosas así...filosóficas. Perdió la idea de la realidad e, inclusive, llegó a demostrar que nada es real y que todo es, en verdad, hiperreal; a través de la lógica y la razón.
Ocurrió a inicios del siglo XXI un hecho digno de mención: la caída de las Torres Gemelas. Ante este hecho, lleno de "realidad"; Baudrillard declaró ante la poca prensa que aún hacía públicas sus declaraciones: "El terrible desastre de las Torres se pudo haber evitado. Lo que pasa es que nadie, NADIE le hizo caso a mi idea del "simulacro". Yo les advertí, les dije. Nadie me escucho, dijeron que estaba loco. Deben hacer simulacros. Todo es hiperreal. Tengo hambre. La Guerra del Golfo no ha tenido lugar. Aaaaa." Fue todo un éxito en los noticiarios y programas culturales del 2001.
Sin embargo, a pesar de su pequeño momento de gloria, la salud de Juan se deterioró. Un día, en el asilo para ancianos en el que residía, sufrió de un colapso de cuerpo completo mientras empezaba un nuevo libro, nunca publicado (en parte porque sólo pudo escribir el título: La realidad y yo, la historia de una adicción). Murió el 06 de Marzo del año 2007, de una sobredosis de realidad.
Obra filosófica
Como se explicitó en la introducción, Juan Baudrillardo pertenece a las corrientes filosóficas contemporáneas conocidas como "Posmodernismo" y "Posestructuralismo". Pero, aún dentro de este grupo de estrafalarios pensadores, pseudopensadores y simples idiotas, Baudrillard destaca y no queda muy bien delineado. Por lo tanto, basaremos nuestro análisis en sus libros. O al menos, los más importantes, conocidos, o los que hayamos decidido poner. Si no se encuentra alguno de los principales, o del que se esté buscando referencia; no hay problema: es pura desidia.
La sociedad de consumo (1970)
Una obra de los primeros 20 años de labor de Baudrillard, y representa una exposición de lo desactualizado de la filosofía marxista. Su título nos entrega muchas luces sobre el tema que trata. Exacto: las drogas. En este libro, Baudrillard declaró que la economía mundial ya no se basaba en la explotación del proletariado, sino en el sistemático consumo de drogas de todo tipo. Vemos que el "opio del pueblo" fue reemplazado por el "crack del pueblo"; haciendo que el pensamiento de Marx pasara a la historia. Veremos posteriormente que, para acabar completamente con estas ideologías, luego Baudrillard destruiría la historia. Poco a poco, veremos cómo sus libros tratan menos de estos temas, para terminar inclinándose por la "realidad".
Cultura y Simulacro (1978)
¡Se lo advertimos!. Ya nada de economía ni policía. Cultura y simulacro. Una obra dirigida a todos los públicos. La introducción que el mismo Baudrillard le pone aclarará dudas:
La cultura actual ha olvidado la prevención, la cautela. El otro martes hubo un incendio en la panadería, y nadie supo que hacer. El mundo está encaminado a la perdición si no incorpora a su cultura, a su educación y a sus folletos de seguridad. Cualquier día de estos pasará algo realmente terrible.
Este pequeño fragmento lo dice casi todo por sí mismo. Lástima que no le hicieron mucho caso al gran hombre.
La Guerra del Golfo no ha tenido lugar (1991)
El primer libro de la trágica década de Baudrillard. Justo durante la posguerra, Jean publicó este libro. A pesar de la abrumadora estupidez que destila desde el título, fue un megaéxito de ventas. En este libro, el autor coloca todos los argumentos, razonamientos y falacias que le permitieron demostrar que la Guerra que acababa de terminar no había siquiera empezado. La mayor parte de su contenido es demasiado ridículo y disparatado que, por la dignidad, seriedad e integridad de esta wikia, no lo citaremos.
Nah, he aquí los argumentos principales:
- Iraq no existe: Gran parte del libro está dedicado a demostrar empíricamente que Iraq no existe. En verdad es simplemente un error en el mapa que algunos cartógrafos torpes cometieron. Si lo ves en GoogleEarth™, es un virus informático mundial. Su gobierno es simplemente una caseta en medio del desierto, y sus fuerzas armadas son un espejismo. No tiene bandera, eso que ves es sólo la bandera de Siria con las estrellas borradas y un grafiti en árabe. ¿No le crees?. Pues, ¿Alguna vez has ido a Iraq? Exacto, eso suponíamos. Y, como Iraq no existe, la Guerra del Golfo no ha tenido lugar.
- Estados Unidos no existe: Uno de los argumentos más controversiales y menos corroborables del libro. Aquél "país" que todos ven debajo de Canadá y encima de México no es más que una invención de Coca-Cola™ y McDonald's™. Exacto, las dos transnacionales compraron un enorme terreno, lo llenaron de casas, pusieron una más grande de color blanco en medio y lo saturaron con sus restaurantes y gaseosas. Esto insoportable es un gran secreto de las corporaciones, y casi mandan matar a Baudrillard luego de su descubrimiento. Sin embargo, desde la recesión económica que empezó el año 2009, los empresarios chinos compraron este terreno.
- ¿No le crees? Pues, ¿Cómo te explicas que el nuevo presidente sea parte de la minoría más grande de ese país, negro?. Ese es el plan de los empresarios chinos. Primero afroamericano, luego vendrá un "presidente" (porque, como ya dijimos, ESO no es un país) latino y, para terminar, uno de rasgos asiáticos. Y, como EE.UU. no existe, la Guerra del Golfo no ha tenido lugar.
- No hay lugar donde haya podido tener lugar: En inglés, se conoce a las zonas de conflicto como "Hot zones", o Zonas calientes, en español. Pero la supuesta Guerra del golfo, sucedía en, bueno, el Golfo Pérsico. ¡Ah, pero en un desierto! Y los desiertos son todos zonas calientes. Entonces, como la guerra tiene lugar en una zona caliente, habría al mismo tiempo 1 y 5873 guerras, una en cada desierto. ¿No le crees? Pues,¿Qué nos interesa?. Y como una guerra no puede ocurrir en todas partes al mismo tiempo, la Guerra del Golfo no ha tenido lugar.
- La Guerra del Golfo no ha tenido lugar: ¿No lo crees? Pues, ¿cómo te explicas que la Guerra del Golfo no haya tenido lugar? Y, como la Guerra del Golfo no ha tenido lugar, la Guerra del Golfo no ha tenido lugar.
La Ilusión vital (2002)
Este libro se refiere a la ilusión de la Historia. En verdad la historia es simplemente una sarta de mentiras, sandeces y errores. Todo hecho del pasado a sido tergiversado por los medios de comunicación masivos y convertido en picadillo intelectual. Básicamente, esta obra fue escrita para terminar de destruir el pasado pre-Baudrilliardiano, para así tener más compradores. Fue un fracaso rotundo.
Contraseñas (2003)
Uno de los últimos libros de Baudrillard. Fue una nada precisa autobiografía; y el título hace referencia a la juventud friki de Baudrillard. Lamentablemente, el libro recibió muy poca atención, y la mente de su autor se hallaba ya debilitada por la enfermedad. Toda una lástima.
El complot del arte (2005-2006)
Este, el último libro de Baudrillard, habla de sus gustos por el arte. Se vendió como pan caliente: por kilo; para combustible de fogatas. Baudrillard era un personaje acabado, y sus años de gloria habían pasado: era imposible pedirle talento, o ventas de ningún tipo.
Alcance de su pensamiento
Como con todo filósofo que se precie, el pensamiento de Jean Baudrillard (plasmado en sus libros) influyó en algunos aspectos a las sociedades de su tiempo, y desarrolló una serie de paradigmas, conclusiones y premisas que es bueno recoger, para tener una síntesis del pensador en cuestión. En el caso de Baudrillard, se puede resumir en tres puntos primordiales:
- No existe la realidad, existe la hiperrealidad
- Esto quiere decir que la realidad como tal no existe. Al respecto, Baudrillard hizo una analogía con un cuento de Jorge Luis Borges, en el que había dos cartógrafos que hacían un mapa de un Imperio (no, no ése Imperio). Sin embargo pusieron tanto empeño en la tarea encomendada que, para cuando acabaron, ya había salido el GoogleEarth. He allí la Hiperrealidad. Y no sólo por el GoogleEarth, sino todos los sistemas informáticos que llenan tus ojos de imágenes y tus oídos de información y te llenan de sus supuestas verdades para lavarte el cerebro y convertirte en otro más de sus maniquís sin voluntad propia para poder controlarte y... uf. Casi como si tuvieras una bala en la cabeza. Así que están advertidos.
- Todo es simulacro
- Esto, en realidad, quiere decir todo lo contrario. No digan nada, el filósofo es él. Nada es simulacro, ya nadie hace simulacros. Ya hemos hecho hincapié en está cuestión, pero esa es precisamente la idea: seguir
fastidiandoinsistiendo hasta que se adopte como parte de la cultura y la misma educación básica del ser humano.
- La Guerra del Golfo no ha tenido lugar
- Por si no te quedó claro.
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