Voltaire

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Voltaire
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Voltaire Trisku.jpg
Tenía tanto dinero porque él mismo lo imprimía
Personal
Nacimiento Defunción París
Murcia
Estado actual Morido
Lugar de residencia Bibliotecas nunca visitadas
Sobrenombres François-Marie Arouet
Su obra
Se dedica a Filósofo despeinado
Origen Un rayo que dejó su cabello reVuelto
Hazañas logradas Ser reconocido casi sin haber hecho nada.
Relaciones Con algunos príncipes.
Enemigos Los burgueses, como él.
Obras Algunas obras menores y no muy buenas
Poderes Escribir muchas obras de teatro, enciclopedias y cartas de amenaza


Cita3.pngNo estoy de acuerdo con lo que dices, pero defenderé a costa de tu vida mi derecho a no escucharlo.Cita4.png
Voltaire sobre la libertad de expresión. No por nada se le considera padre de la Revolución francesa.
Cita3.pngUn dicho ingenioso no prueba nada.Cita4.png
Voltaire probando a través de un dicho ingenioso que un dicho ingenioso no prueba nada.[1]

Voltaire™ fue un notorio troll francés del siglo XVIII que se hizo pasar por filósofo, historiador, físico, matemático, novelista, dramaturgo, abogado y cantante de cabaret, todo mientras estudiaba clases de tuvalí. En realidad se llamaba François-Marie Arouet, pero le daba vergüenza su segundo nombre, así que adoptó el nick Voltaire después de que le cayó un rayo y sobrevivió, pero su cabello se volvió blanco y revuelto. De espíritu irónico y crítico (es decir, cínico), Voltaire escribió cientos de libros y artículos llenos de disparates que para su época eran exactamente eso, disparates, que fueron recogidos en la famosa Encyclopédie, parodia en clave de humor de la dÉsencyclopédie.

Biografía

Aprendizaje

A temprana edad, François-Marie demostraba una excepcional inteligencia, pues a los 12 años ya sabía que 1+1=2, aunque conjeturaba que era un complot de los ingleses. Abandonó muy joven su hogar para no tener que padecer los sufrimientos que le causaba tener un padre millonario. Ingresó en una sociedad libertina, la Sociedad del Temple, de la que se desafilió tras contraer unas cuantas enfermedades de transmisión sexual, y eso que sólo compartió el baño. A los 24 años aprendió a leer y escribió su primera obra, Edipo y los clonosaurios, por la que fue acusado de pervertido y encarcelado en la Bastilla, con total razón.

Logró fugarse gracias a su ingenio e inició una nueva vida con el nombre de Voltaire, nombre gracioso con el que nadie lo reconocería. Tras enfrascarse con él en una agria discusión sobre si Pelé era mejor que Maradona donde aquél decía "todavía estamos en el siglo XVIII, por amor del señor no me hables de fútbol o te mato", retó a duelo al noble caballero de Rohan, quien se acobardó rehusó cometer semejante locura, así que en cambio le ofreció una cena de desagravio en su casa. Antes de terminar de comer, Rohan se excusó un momento para ir al baño; entonces, unos fortachones con pelucas y mejillas rosadas salieron de la nada y molieron a palos a Voltaire "para ayudarle con la digestión". Voltaire fue acusado del gravísimo crimen de ensuciar la mansión de Rohan con su sangre, sus ideas y otras secreciones corporales y nuevamente volvió a la Bastilla (era muy fácil ir a la cárcel entonces).

En Inglaterra

El pobre Voltaire tuvo que hacer de todo para que algunos de sus libros fuesen publicados.

Una vez liberado, accedió a exiliarse "voluntariamente" a Inglaterra. Allí se contagió del irónico humor inglés y trabajó como guionista de los tatarabuelos de los Monty Python, labor que alternó con la composición de sus Cartas sobre los ingleses, donde se quejaba de que aquellos amanerados seres le trataran tan bien. En 1727, mientras descansaba bajo un manzano, realizó dos descubrimientos revolucionario: primero, que si te quedas dormido bajo manzanos te roban la cartera, y segundo, la gravedad. Sin embargo, en 1728 se enteró que un tal Isaac Newton ya se le había adelantado y en un manzano más bonito, pero como en su natal Francia nadie lo sabía, simplemente plagió se inspiró en los textos de Newton y los hizo pasar por propios (tachó el nombre del inglés y puso el suyo). Después haría lo mismo con Francisco Tocino, Jonathan Swift (autor de Los viajes de Gulliver y abuelo de Taylor Swift) y John Locke (el calvo de LOST).

Volvió a Francia para publicar sus Cartas a los ingleses (ahora con el título Cartas filosóficas, por eso del eterno odio entre ingleses y franceses); en ellas, acusaba a los franceses de ser retrógradas e intolerantes, a lo que las autoridades francesas respondieron arrestando al editor y enviando el libro a la hoguera. Voltaire se refugió en el castillo de Gabrielle Émilie Le Tonnelier de Breteuil, marquesa de Châtelet, con la que supuestamente tuvo un romance, pero la verdad es que la tipa esa era frígida y se llevaba a Voltaire a la cama sólo para enseñarle ejercicios de matemáticas.

Teatro

Junto con la investigación científica, experimentó un renovado interés por el teatro (en ese tiempo no había cine o internet, y Voltaire se aburría mucho por culpa del iceberg que tenía de amante) y se dedicó a escribir varias obras: Bruto (sobre un bruto el que mató a César); La muerte de César (se le estaban acabando las ideas y hacía remakes); El hijo pródigo (por el que Jesucristo interpuso una demanda en su contra, sin éxito ya que el juez consideraba que el demantante tenía que existir); Las crónicas de Nanine, o el prejuicio vencido, y El Profeta Mahoma, o el fanatismo (que le valió ser condenado a muerte por el ayatolá de Persia, de la que se salvó al nunca visitar Persia).

También era conocido por sus fiestas entre amigos.

Todas estas obras tuvieron una cálida acogida (hay que ver cómo calentaban esas hogueras). También viajó por Bélgica, Holanda y Pequeños-Estados-que-aún-no-son-Alemania; en este último país conoció a Federico II de Prusia, con el que mantendría una larga relación de amor-odio y las pautas físicas que tienen que ver con tal. Tras intercambiar correspondencia con Voltaire,[2] Federico II desarrolló ciertas inquietudes intelectuales y empezó a leer El Príncipe de Maquiavelo, una versión desvergonzada de El principito, pero se aburrió soberanamente ("¿dónde está el zorro que habla? ¿y la serpiente come-elefantes en forma de sombrero?"), así que escribió un tratado llamado El Antimaquiavelo, en el que trataba de explicar por qué dicho libro era una mierda. Voltaire leyó el manuscrito, pero estaba tan mal redactado que decidió hacerle unos retoques, llamando al creador del manuscrito un "tonto del culo", lo que provocó la ira del rey y su expulsión.

Después de romper con Federico II, Voltaire se instaló en Ginebra, donde se sorprendió al ver que no había ginebra en ningún bar, quizá porque se la habían acabado los que llegan buscándola desde tiempos inmemoriales. Para calmar su ansiedad, se puso a escribir como trastornado (de hecho, lo estaba) y fruto de este período creativo surgieron obras importantes como La doncella (dedicada a una jovencita Margaret Thatcher, que en aquellos tiempos ya empezaba a tener sus canas, no a Juana de Arco como muchos "estudiosos" afirman), Ensayo sobre las costumbres, Poema sobre el desastre de Lisboa y, sobre todo, Cándido y su abuelo desalmado.

La Frikipédie y la Encyclopédie

Primera edición de la Inciclopedia en francés. El tio en la portada no es Denis Diderot.

Fue en esta época también cuando Voltaire y su grupito de colegas, ante la falta de compendios de información verídica y confiable, crearon La Frikipédie, ou l'encyclopédie extrêmement sérieuse, pues se sentían tan listos que pensaban que la gente leería sus artículos aunque escribieran sobre temas de los cuales no tenían ni la menor idea. Y tenían razón. Sin embargo, en 1751 la Société Générale des Artistes Éthiques demandó a los editores de la Frikipédie por "improperios e insultos", exigiéndoles entre 9.001 y 12.000 francos de indemnización y la muerte en la hoguera de cualquiera que haya escrito, leído, impreso, editado o se haya excitado (con) un artículo de esa obra.

Voltaire y compañía se vieron forzados a bajar el tono de sus artículos y publicaron la célebre Encyclopédie, ou la source en pleine évolution d'informations utiles et fiables, entièrement écrite par des singes savants, al amparo de la imprenta Ouiquia. Eso sí, Ouiquia insistió en quemar arbitrariamente cualquier referencia al cuerpo humano para no herir sensibilidades, ya que en ese aspecto no habían abandonado la Edad Media.[3]

Últimos años

En el ocaso de su vida, Voltaire conoció a Benjamin Franklin, que luego sería conocido como "el Pikachu de la ciencia norteamericana", quien le preguntó al filósofo el secreto de su inteligencia. Voltaire entonces le contó sobre su pequeño incidente con aquel rayo que le dio origen a su seudónimo, y eso fue lo que motivó a Franklin a realizar su famoso experimento de la cometa durante una tormenta eléctrica. Lamentablemente el experimento no salió tan bien, y a raíz de esto Franklin terminaría cometiendo el peor error de su vida: fundar los Estados Unidos de América.

En el ocaso de su vida (sí, de nuevo), regresó a su natal Francia, donde tuvo una entrada triunfal y recibió una larga ovación por parte del extasiado pueblo francés, que había confundido a Voltaire con Dave Mustaine a causa de su larga y frondosa melena. Como ya no tenía nada más que hacer, en febrero de 1778 asistió a la representación de una de sus propias obras teatrales, experiencia que le hizo caer gravemente enfermo. En su lecho de muerte, escribió: "Muero amando a Dios, amando a mis amigos y detestando la superstición". Como no se murió ese día, se levantó de la cama y salió a comprar un paquete de cigarrillos, pasando por debajo de una escalera, cruzándose con un gato negro y rompiendo un espejo en el proceso. Nuevamente cayó enfermo, pero esta vez la muerte no le dio tiempo para escribir algo ingenioso (o llamar al médico).

Aspectos

Busto de Voltaire para espantar los ratones de la biblioteca.
  • Crítica al judaísmo: como cualquier intelectual del siglo XVIII que intentara ser respetado, criticó la actitud de los judíos de autonombrarse el "pueblo elegido", siendo que (como decía el propio Voltaire), no hay ningún pueblo elegido, ni el cristiano, ni el musulmán ni ninguno pues esas son tonterías, y si es que acaso hubiera uno sería el francés por sus quesos.
  • Voltaire y el dinero: como a cualquiera, a Voltaire le gustaba el dinero, y si era gratis mejor. Así "Voltaire murió siendo inmensamente rico: fue uno de los mayores rentistas de Francia. Es conocida la afición de Voltaire a las aventuras financieras y también al fraude." (no nos lo inventamos nosotros, se lo inventa Wikipedia cuyo texto copiamos aquí literalmente).
  • Voltaire y el diluvio: un error de apreciación, cuando se encontraron fósiles de moluscos en las cimas de las montañas, muchos dijeron que esa era la prueba de que hubo un diluvio. Voltaire, alegando que eran tonterías y más tonterías, propuso su hipótesis, de que esos animalitos subieron a las montañas a buscar un nuevo modo de vida. Pero es de notarse que ni los que estaban a favor del diluvio ni en contra, tenían los conocimientos de nuestro siglo, que nos reveló que llegaron ahí llevados en paellas.
  • Voltaire y la esclavitud, se podría pensar que como reformista, él estaría en contra de la esclavitud, lo cierto es que eso le hubiera llevado a renunciar a sus esclavos lo que lo hubiera obligado a alimentarse, bañarse y peinarse por sí mismo. En sus obras, en cambio, pedía un trato humanitario a los esclavos pidiendo a los lectores que por un momento se olvidaran de que son negros y los trataran como esclavos nacidos en Europa. Un tipazo él.
  • Voltaire y el fanatismo. Voltaire criticó a Mahoma, aduciendo a que nadie se debe fanatizar tanto con las religiones. Luego de su publicación firmar libros gratis a ver si pescaba alguna fan, obviamente tomaron en serio su pronunciamiento y lo mandaron pal carajo.

Su moral

Voltaire defendió la tolerancia por encima de todo, excepto a los que pensaban diferente a él, solamente a ellos. Por lo demás, se le considera bastante inmoral para los estándares de la época, y eso que los estándares de la época eran de los más flexibles de la historia contemporánea (recordemos que Marqués de Sade vivía en ese tiempo).

En relación con la moral de los demás, Voltaire decía que el hombre es quien debe tomar en mano su propio destino, lo que al parecer es una referencia velada a la masturbación, mejorar su condición, garantizar y embellecer su vida con la ciencia (cirugía estética), la industria (quizá piernas artificiales), las artes (photoshop) y por una buena política de las sociedades (ciencia ficción). Así dice que los hombres pueden concebir la idea de que sus congéneres son más o menos razonables, aunque la experiencia asegura que quien confía de esta manera suele vivir menos.

Influencia en la Revolución francesa

- Pero yo sí leí a Voltaire
- Sí, pero entendiste mal la parte de la tolerancia.
Enardeció a las masas y esto fue lo que ocurrió.

En uno de sus periódicos encierros en La Bastilla, Voltaire sintió la necesidad de denunciar los abusos del absolutismo y liderar una revolución como la hizo Ernesto "Che" Guevara en la independencia de las colonias inglesas en América. Así que comenzó a redactar panfletos comunistas que posteriormente distribuiría en las principales calles de París con el objetivo de iniciar la sublevación del pueblo. Viendo este que no funcionó la campaña, decidió grabar un demo de la canción "Beat it" con mensajes subliminales para derrocar a la monarquía. Muchos años después, un tío llamado Maximilien Robespierre la escucharía e iniciaría un período de terror en el que literalmente rodarías cabezas por toda la nobleza y se instauraría la República (y más tarde el Imperio, pero la intención es lo que cuenta).

Obras

La obra Cándido incluía elegantes grabados.
Ella es Formosante.
  • Cándido (1759): Obra que busca convencer al lector sobre la existencia de un mundo mejor mediante una alegoría en la cual un joven criado se vuelve aprendiz de un doctor positivista llamado Pangloss, el cual le dice que deberá embarcarse en una travesía por la Tierra Media llevando consigo un anillo que, al final de esta, deberá quemar en el Vesubio antes que el cruel señor de Alemania parta con sus ejércitos hacia Gondor. Dirigida por Peter Jackson en conjunto con Oliver Stone, la obra es una expresión de angustia de la juventud americana ante la expansión de McDonalds y la Guerra de Vietnam, con musicalización de los Beatles y la actuación estelar de John Travolta.
  • La princesa de Babilonia (1768): Versión expandida de Babilonia 5 centrada en los dilemas monárquicos de la Guerra de Sucesión española y cómo ésta afectó los sentimientos de las doncellas de la época. Es notable la metáfora de Formosante que evoca los deseos de amor de hombres no muy bien parecidos y sus constantes esfuerzos por conquistarla con joyas y cachivaches. Incluye escenas candentes como el intento de violación entre el rey de Etiopía y la princesa.
  • Comentario histórico sobre las obras del autor de «La Henriade» (1723): Diestra crítica a los sectores editoriales de Francia denunciando su ninfomanía por las condiciones de publicación de sus escritos, mientras hace hincapié en la virtud de los ingleses que publican obras tan mierdas como La Henriade y que de paso obtienen la protección de los nobles. Best-seller según Le Gazzette de ese año.

Referencias

  1. Wtf.gif
  2. Incluyendo un coqueto poema sobre el orgasmo.
  3. Porque los de Ouiquia eran tan gordos que se ofendían al ver cuerpos estéticamente apetecibles aceptables.

Véase también

vde FILOSOFÍA / LÓGICA
El pensador de Rodin.jpg

Corrientes filosóficas: A nadie le importaArgumento de autoridadBuenrollismoCangrejismoCerebro en una cubetaCállese viejo lesbianoComidismoCuñadismoEl AfortunismoExcepticismoFuerza Universal AplicadaGafapastismoHola mamá, estoy en el internetNepalismoNi Puta IdeaNudismoPor mis cojonesPanquesismoPasotismoPensamiento cítricoQue Chingue a su Madre el AméricaQue le corten la cabezaQue Lo Haga OtroValemadrismoVestidismo
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Distinciones

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Este artículo ha sido destacado en la Portada por decisión popular.

Los rumores sugieren que sus autores fueron instruidos
por el mismísimo Miguel de Cervantes.

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