Tsundere
Tsundere
| Publicado por | Sus padres |
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| Primera aparición | 1981, supuestamente. |
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| Creado por | Un visitante de 2ch |
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| Nombre real | Tsundere |
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| Estado | Cambiando rápidamente entre alegre y cabreada. |
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| Afiliaciones actuales | Gente que cambia rápido de caracter (GCRC). |
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| Afiliaciones anteriores | G.A.L.S Necesitamos mas datos. |
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| Alias conocidos | Chica bipolar. |
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| Familiares | El protagonista, al que apaliza y ama según le dé. |
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| Poderes destacados | Cambiar de personalidad en un periquete. |
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| Otros | Medias altas de 57 cm, minifalda, dobles coletas. |
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¡Las tsunderes creen que esta página dice mentiras, si crees eso eres tsundere!
¡¿A quien le dices Tsundere?! ¡Que yo no lo soy!No, yo no soy un tsundere, aunque cambie rápidamente de pe- ¡¡MUAJAJAJAJAJA!Pensé en hacer a Dulcinea una tsundere, pero tras meditarlo profundamente, decidí que la época no estaba preparada para una fémina asíLas tsundere (ツンデレ en Japonésido) son un tipo de personalidad cuasi-exclusivo a las féminas anime, consistente en que tan pronto están contentas como cabreadas, que extrañamente tiene miles de fans. Y antes de que digas algo, sí, también hay chicos así, ¿y qué? No te hagas el sorprendido, seguro conoces alguno, aunque te niegues a admitirlo, como buen idiota que eres.
Son personas que un momento te lanzan una mirada dulce y al siguiente ya están buscando con qué golpearte, no porque les caigas mal… digo, tampoco es que les caigas tan bien, pero bueno, no es asunto tuyo. No van por ahí mostrando sus sentimientos como si fueran dulces gratis; si se preocupan por ti, lo disimulan a patadas, literalmente. Y no es que lo hagan porque sean malas personas, es que… ¡cállate! No necesito darte explicaciones, baka. Lo que pasa es que hay gente tan insoportable que uno tiene que mantener cierta distancia emocional con la excusa de estar molesto, y si no entiendes eso, pues es tu problema El redactor se va molesto y sonrojado.
Características
¡Las tsunderes deben tener dos coletas por ley!.jpg)
¡N-no es como si quisiera explicarte lo que es ser tsundere ni nada por el estilo, baka! Pero ya que insistes tanto, supongo que no tengo más remedio...
¡Ugh! Básicamente somos... ¡digo, son! personas incomprendidas que no necesitamos la aprobación de nadie, ¿entiendes? Si actuamos de forma fría y distante es porque... ¡porque queremos y punto! No es que tengamos miedo a ser lastimados ni nada parecido... voltea la mirada y cierra los puños. Y si por casualidad hacemos algo bueno por alguien, ¡no te hagas ideas raras! Es solo porque... porque... ¡porque nos da la gana! No es que nos importe esa persona ni nada... se sonroja.
¡Y deja de mirarme así mientras te explico! Es irritante que pienses que tenemos problemas con nuestros padres o que somos así por experiencias de la infancia. ¡No necesito tu psicoanálisis barato! Aunque... tal vez... susurra tengas algo de razón... ¡Pero no te confundas! No somos como esas yandere psicópatas que van por ahí fingiendo ser adorables. Al menos nosotros somos honestos con nuestra hostilidad... ¡N-no es que me esté incluyendo en el grupo ni nada!
Cruza los brazos Y si crees que bajo toda esta actitud hay alguien sensible y cálido... ¡t-te equivocas completamente! Aunque... mira al suelo quizás, solo quizás... si alguien se tomara el tiempo de conocernos realmente... ¡Pero no es que esté pidiendo eso!
¡Ya está! ¿Contento? No es que me importara explicártelo... ¡HTPM! te golpea y se va dando pisotones
Cómo ser tsundere
Solo sigue los pasos:
1. Para las chicas, obvio que tienen que perfeccionar el "¡baka!" y el "¡HMPH!". ¡No es que yo lo practique frente al espejo ni nada! También deben cruzar los brazos, mirar hacia otro lado y sonrojarse... ¡Pero no demasiado! Y golpear con libros o abanicos cuando alguien se acerque mucho... n-no es que yo lo haga...
2. Los chicos... ugh, son más complicados. Tienen que mantener esa actitud de "me importa un comino" pero secretamente estar pendientes de todo. Meter las manos en los bolsillos, decir "tch" cuando algo les molesta (que es prácticamente todo), y jamás admitir que están preocupados... aunque lo estén... ¡No es que yo lo esté!
La diferencia es que las chicas pueden ser más expresivas con su agresividad - ya sabes, golpes, gritos, pucheros, mientras que los chicos tienen que mantener esa fachada de tipo duro que en realidad está más perdido que un panda en el polo norte. Las chicas pueden tener momentos de debilidad momentánea donde su lado dulce se escapa, los chicos tienen que hacer como que esos momentos nunca pasaron. ¡Jamás sucedieron! ¿Entiendes?
3. Y la parte más importante para ambos es negar, negar, negar cualquier sentimiento positivo. Si alguien te pregunta si te importa, la respuesta siempre es "¡C-como si me importara!" aunque por dentro te estés muriendo de preocupación...
Advertencia:Inciclopedia no se hace responsable de si decide seguir estas instrucciones y sale mal parado. En caso de duda, consulte con su otaku habitual.
Tipos de tsundere
Como si no fuera suficiente con tener una sola cepa de este virus emocional, la naturaleza encontró la manera de diversificar esta plaga hasta crear múltiples variantes, cada una más especializada en su particular forma de tortura psicológica. Es como si la evolución hubiera decidido crear un menú degustación de toxicidad romántica.
La violenta
Estas criaturas operan bajo la lógica de que el amor se mide en newtons por centímetro cuadrado de superficie corporal impactada. ¿Derramaste jugo sobre sus melones? ¡Hostia voladora! ¿Viste su ropa interior por accidente? ¡Combo de karate! Su filosofía: si no hay fracturas, no hay romance. Han convertido la violencia doméstica en una declaración de amor, como telegramas enviados a puñetazos. Akane Tendo y Taiga Aisaka lideran este movimiento de terrorismo romántico.
La amenazante
Estas depredadoras han descubierto que quebrar el espíritu es más eficiente que quebrar huesos. Su especialidad es la tortura psicológica como cirujanos del trauma emocional. Si una termina viviendo en tu casa, prepárate para ser su esclavo personal: harás sus tareas, le prepararás comida y dormirás en el sofá mientras ella ocupa tu habitación. Senjougahara Hitagi perfeccionó el arte de hacer que la gente se arrepienta de haber nacido.
La malcriada
Princesas del dinero de papá que creen que el universo es su parque temático personal. Su risa pomposa es como una sirena de emergencia anunciando que está a punto de derrochar una fortuna en venganzas ridículas (oh oh oh, como Santa Claus pero an agudo). Explotan sirvientes y presumen de riqueza hasta que se topan con alguien inmune a sus encantos ostentosos, momento en que su cerebro se cortocircuita. Louise de la Vallière y Nagi Sanzenin representan el capitalismo con coletas.
La snob
Especialistas en hacer que la gente se sienta estúpida por existir, son como profesores de universidad pero con peor actitud. Su silencio condescendiente causa más daño que un huracán. Si las rechazas, usarán manipulación mental para hacerte volver arrastrándote como una babosa en celo. Erina Nakiri podría hacer que Einstein se sintiera idiota.
La infantil
Chihuahuas rabiosos en cuerpos humanos microscópicos. Compensan su falta de estatura y de cualquier otro desarrollo con egos del tamaño de Júpiter y temperamentos que asustarían a generales militares. Viven en contradicción constante: odian ser pequeñas pero lo son, odian ser planas pero parecen tablas de planchar. El síndrome de Napoleón hecho anime. Taiga Aisaka y Shana demuestran que el tamaño sí importa, especialmente cuando es inversamente proporcional a la agresividad.
La caritativa
La Dr. Jekyll del tsunderismo. Perfecta vecina, excelente estudiante, futura esposa ideal... hasta que aparece el protagonista torpe y la convierte en una bestia emocional. Es como ver a la Madre Teresa transformarse en Hulk por culpa de un adolescente con mala suerte. Los síntomas: vena palpitante, miradas asesinas, y la gradual pérdida de su reputación vecinal. Demuestra que incluso las santas tienen su límite.
La moralista
Defensoras de la justicia que inventan reglas inexistentes para justificar su acoso legal. Predican virtud mientras fantasean con escenarios que harían sonrojar a gente que visita mucho Ámsterdam. Su hipocresía es tan densa que viola las leyes de la física. Cuando su fachada se derrumba, las encuentras en armarios con el protagonista vestidas de cosplayer. Iino Miko representa la corrupción del poder estudiantil.
La depravada
La forma final del tsunderismo, donde abandonan toda pretensión y abrazan el sadismo puro. Han convertido el abuso emocional en un arte marcial. En realidad son chicas tímidas que usan la crueldad como armadura, pero nadie tiene tiempo para terapia cuando estás siendo torturado psicológicamente. Afortunadamente raras porque incluso los otakus reconocen que esto necesita intervención médica.
La del bento
Han weaponizado la cocina casera como forma de seducción negable. Su lógica: maltratarlo mientras le das de comer para que se queje menos, pero debes saber cocinar para no envenenarlo como tu rival la yandere. Si rechazas su comida, se desatan guerras nucleares. Es domesticación humana disfrazada de hospitalidad. Chitoge Kirisaki perfeccionó el arte de hacer que la gente se sienta culpable por estar bien alimentada.
Anime
En realidad hay muchas, muchísimas, tantas que si las listáramos completamente, los servidores harían ¡KAPUM!, así que solo listaremos a las más notables organizadas cronológicamente porque sí, necesitamos orden en este caos de coletas y hostias voladoras.
Mujeres
Las pretsunderes
Los 70 fueron la era precámbrica del tsunderismo, cuando estos proto-especímenes aún no habían desarrollado las características definitorias de la plaga que vendría. Era como observar los primeros peces desarrollando patas, sin saber que eventualmente caminarían sobre la tierra y arruinarían el ecosistema del anime para siempre. Eran tiempos inocentes donde la violencia romántica aún no se había normalizado y los personajes femeninos podían tener personalidades complejas sin necesidad de golpear gente para expresar afecto. Si hubiéramos sabido lo que se avecinaba, tal vez habríamos podido detener la mutación en esta etapa primordial.
- 1974 - Oscar François de Jarjayes (La rosa de Versalles), la mujer que se hacía pasar por hombre y tenía conflictos internos sobre su identidad y sentimientos. Proto-tsundere aristocrática con espada.
- 1976 - Candy White (Candy Candy), alternaba entre dulzura y testarudez dependiendo de quién la molestara. Versión huérfana del futuro tsunderismo.
Década de 1980
Los años 80 fueron la época dorada de la inocencia tsundere, cuando estos especímenes todavía tenían cierto encanto primitivo. Era como observar las primeras bacterias del tsunderismo multiplicándose en el caldo de cultivo del anime, sin saber que décadas después estaríamos rogando por antibióticos. Lum inventó el acoso sexual con descargas eléctricas y lo llamó romance, mientras que Akane estableció el precedente de que la violencia física era una forma válida de expresar sentimientos confusos. Tiempos más simples, cuando los creadores aún no sabían el monstruo de mil cabezas que habían liberado sobre el mundo.
- 1981 - Lum Invader (Urusei Yatsura), la alienígena en bikini que electrocutaba por amor. Primera tsundere oficial del anime, porque alguien tenía que empezar esta locura.
- 1987 - Madoka Ayukawa (Kimagure Orange Road), la chica cool que no sabía si amar u odiar al prota psíquico. Básicamente inventó el triángulo amoroso tsundere.
- 1989 - Akane Tendo (Ranma ½), maestra del martillazo sorpresa y prometida a la fuerza del chico-chica. Comenzó su reinado de violencia doméstica.
Década de 1990
Los 90 marcaron la pubertad del tsunderismo, época en la que estos personajes alcanzaron su forma más refinada antes de convertirse en la versión industrializada que conocemos hoy. Asuka llegó para demostrar que el complejo de superioridad y los traumas psicológicos podían ser sexys, mientras que Naru perfeccionó el arte de mandar a la gente volando de un puñetazo sin consecuencias legales. Era la era dorada donde el tsunderismo aún tenía personalidad propia, antes de que se convirtiera en una plantilla de copy-paste que todo mangaka perezoso podía usar para crear una heroína instantánea.
- 1989 - Bulma (Dragon Ball), desde los 80s pero brillando en los 90s, la genio que golpeaba a Goku y luego se casó con el príncipe tsundere Vegeta.
- 1992 - Rei Hino (Sailor Moon), especialmente tsundere en el anime de los 90 donde se peleaba con Usagi por Mamoru.
- 1993 - Videl (Dragon Ball), la bella esposa de Gohan que comenzó con carácter fuerte y luego suavizó su trato.
- 1995 - Asuka Langley Soryu (Neon Genesis Evangelion), una de las primeras tsunderes conocidas por el gran público.
- 1997 - San (La princesa Mononoke), la princesa lobo que odiaba a los humanos pero se enamoró de uno.
- 1998 - Naru Narusegawa (Love Hina), la reina de los puñetazos voladores.
Década de 2000
Los 2000 fueron el apocalipsis zombie del tsunderismo, la década en que esta plaga se extendió como pólvora por todo el anime hasta el punto de que era más fácil encontrar un unicornio que una protagonista femenina que no fuera tsundere. Fue la época de la producción en masa, donde los creadores descubrieron que podían crear personajes pegando la plantilla tsundere básica: cabello de colores imposibles, tendencias violentas, y la capacidad emocional de un adolescente con hormonas descontroladas. Louise demostró que incluso siendo completamente plana en todos los sentidos posibles, aún podías ser popular si gritabas lo suficiente y explotabas cosas. El tsunderismo se había vuelto tan omnipresente que los estudios tenían una máquina expendedora de tsunderes: inserta moneda, obtén chica violenta con problemas de comunicación.
- 2002 - Nemu Asakura (D.C. ~Da Capo~), la más incestuosa de todas las tsunderes.
- 2002 - Sakura Haruno (Naruto), la pelirrosa con temperamento fuerte y sentimientos cambiantes.
- 2002 - Temari (Naruto), rubia de coletas y carácter explosivo con Shikamaru.
- 2004 - Rukia Kuchiki (Bleach), la shinigami que patea a Ichigo "por su bien".
- 2004 - Rin Tohsaka (Fate/stay night), ejemplo de tsundere clásica.
- 2004 - Misaka Mikoto (To Aru Majutsu no Index), Electromaster que intenta electrocutar a Touma.
- 2004 - Louise de la Vallière (Zero no Tsukaima), la plana tsundere pelirrosa.
- 2005 - Kaname Chidori (Full Metal Panic!), la que golpea a Sousuke por sus rarezas.
- 2005 - Shana (Shakugan no Shana), espada y pan de melón como marca registrada.
- 2006 - Haruhi Suzumiya (Suzumiya Haruhi no Yuuutsu), versión atípica del tsundere.
- 2006 - Kallen Stadtfeld (Code Geass), piloto rebelde con sentimientos encontrados.
- 2007 - Kagami Hiiragi (Lucky Star), reconocida como tsundere en su propia serie.
- 2007 - Hinagiku Katsura (Hayate no Gotoku), presidenta estudiantil con katana y corazón blando.
- 2007 - Nagi Sanzenin (Hayate no Gotoku), heredera mimada y tsundere por naturaleza.
- 2008 - Taiga Aisaka (Toradora), la "Palmtop Tiger Loli".
- 2008 - Kyou Fujibayashi (CLANNAD) una versión más pechugona de Kagami Hiiragi.
- 2009 - Akiyama Mio (K-On!), muestra rasgos tsundere con sus amigas.
- 2009 - Senjougahara Hitagi (Bakemonogatari), mezcla de tsundere y yandere.
- 2009 - Erza Scarlet (Fairy Tail), carácter severo pero afecto oculto.
Década de 2010
Los 2010 marcaron el momento en que la industria finalmente se dio cuenta de que había creado un monstruo y comenzó a intentar ponerle maquillaje para que se viera más sofisticado. Era la era de la deconstrucción tsundere, donde los creadores trataron desesperadamente de justificar por qué seguían usando el mismo molde añadiéndole traumas psicológicos más complejos y contexto social. Kurisu al menos tenía un doctorado para justificar su superioridad intelectual, mientras que Kaguya convirtió el tsunderismo en un juego de ajedrez mental de 4D. Era como ver a alguien intentando convencerte de que su hamburguesa de McDonald's es gourmet porque le pusieron una hoja de lechuga orgánica encima. El virus tsundere había mutado, pero seguía siendo el mismo parásito de siempre chupando originalidad del anime.
- 2010 - Saya Takagi (Highschool of the Dead), sarcasmo y afecto encubierto.
- 2010 - Misaki Ayuzawa (Kaichou wa Maid-sama!), severa en la escuela y dulce en secreto.
- 2011 - Chitoge Kirisaki (Nisekoi), la rubia de los puñetazos y la llave.
- 2011 - Kyoko Sakura (Puella Magi Madoka Magica), de enemiga a protectora.
- 2011 - Makise Kurisu (Steins;Gate), científica con corazón escondido.
- 2012 - Yukino Yukinoshita (Oregairu), reina de hielo que se va abriendo.
- 2013 - Izumo Kamiki (Blue Exorcist), la invocadora de zorros que insulta a todos pero los protege.
- 2013 - Emi Yusa (Hataraku Maō-sama!), enemiga y compañera de trabajo del rey demonio.
- 2015 - Kaguya Shinomiya (Kaguya-sama: Love is War), tsundere de guerra psicológica.
- 2016 - Beatrice (Re:Zero), la loli bibliotecaria que niega su afecto.
- 2017 - Nino Nakano (The Quintessential Quintuplets), cambio radical de hostilidad a afecto.
Década de 2020
Los 2020 representan la agonía final del tsunderismo, la época en que esta plaga centenaria finalmente comenzó a mostrar signos de extinción masiva gracias a personajes anti tsundere como Maomao o la Sosa de Frieren. Es como observar a los últimos dinosaurios del Cretácico, excepto que estos dinosaurios son molestos y nadie los va a extrañar. Los pocos especímenes que quedan son versiones diluidas y domesticadas del virus original, como si el tsunderismo hubiera perdido su potencia después de décadas de overuso.
- 2020 - Nobara Kugisaki (Jujutsu Kaisen), martillo en mano para todo.
- 2021 - Rumiko Manbagi (Komi Can't Communicate), compite pero también ayuda.
- 2023 - Tomo Aizawa (Tomo-chan Is a Girl!), fuerza bruta y sentimientos mezclados.
- 2025 - Akane Arisugawa (I'm Getting Married to a Girl I Hate in My Class), grita más de lo que habla.
Hombres
Los tsunderes masculinos siempre fueron la versión menos tóxica de esta epidemia, principalmente porque la sociedad no les permitía andar golpeando gente sin consecuencias como a sus contrapartes femeninas. Vegeta estableció el estándar dorado del tsunderismo masculino al ser genuinamente peligroso y luego evolucionar hacia algo parecido a una persona funcional, aunque le tomó aproximadamente 200 episodios y tres transformaciones capilares lograrlo. El problema es que por cada Vegeta que realmente se desarrolla, tienes diez Kyos que básicamente son gatos enojados en cuerpos humanos, gruñendo por razones que ni ellos entienden. Los especímenes más recientes como Damian muestran signos prometedores de que esta subespecie podría evolucionar hacia algo menos irritante, aunque seguir el desarrollo romántico de un niño de seis años sigue siendo profundamente perturbador sin importar cuán adorable sea su sonrojo.
- 1989 - Vegeta (Dragon Ball Z), el príncipe de los saiyajin que pasó de "voy a destruir la tierra" a "protegeré mi familia".
- 1996 - Inuyasha (personaje) (InuYasha), el perro demonio que gruñe pero protege.
- 1998 - Syaoran Li (Cardcaptor Sakura), el mocoso que pasó de odiar a Sakura a sonrojarse con verla.
- 2001 - Kyo Sohma (Fruits Basket), el gato del zodíaco que maúlla de rabia pero ronronea de amor.
- 2004 - Uryu Ishida (Bleach), el Quincy que dice odiar a los shinigami pero siempre los ayuda.
- 2012 - Hachiman Hikigaya (Oregairu), cínico con gestos altruistas.
- 2012 - Jean Kirstein (Attack on Titan), rival y aliado de Eren.
- 2012 - Midorima Shintarou (Kuroko no Basket), reservado pero protector.
- 2013 - Oreki Houtarou (Hyouka), apático en apariencia, atento en el fondo.
- 2016 - Yuri Plisetsky (Yuri on Ice), gatito gruñón del patinaje.
- 2022 - Damian Desmond (Spy x Family), el niño rico que insulta y se sonroja.
No anime
- 1971 - La Chilindrina (El Chavo del 8), cambios bruscos de humor y afecto escondido.
- 1996 - Helga G. Pataki (Hey Arnold!), la tsundere por excelencia en animación occidental.
- 2005 - Zuko (Avatar: The Last Airbender), príncipe en busca de redención.
- 2003 - Raven (Teen Titans), emociones contenidas y apoyo constante.
Los falsos positivos
Esta sección representa el caos taxonómico que creó la popularidad desmedida del tsunderismo: de repente todos los personajes con cualquier forma de comportamiento contradictorio fueron mal diagnosticados como tsunderes por fans desesperados. Nagatoro en particular causó una crisis identitaria masiva entre los otakus que no podían distinguir entre "me gusta molestarte porque me gustas" y "me gusta molestarte porque soy un pequeño demonio sádico". El resultado fue una generación completa de fans que no sabían la diferencia entre tsunderismo genuino y simplemente tener una personalidad abrasiva, llevando a malentendidos románticos tanto en la ficción como en la vida real.
- Nagatoro Hayase (Don't Toy with Me, Miss Nagatoro) - Hiyakasudere: La sádica burlona que disfruta atormentar a su senpai por diversión pura, no por sentimientos confusos. Es como un tsundere que se saltó la parte del "dere" y se quedó con puro sadismo adolescente.
- Nana Osaki (NANA) - Hinedere: La chica cínica que critica todo pero no necesariamente esconde amor, solo tiene una personalidad amargada por la vida. Es lo que pasa cuando un tsundere va a terapia y se da cuenta de que no todo es sobre el romance.
- Kuroko Shirai (To Aru Kagaku no Railgun) - Yandere disfrazado: Parece tsundere hacia su "onee-sama" pero en realidad es una acosadora obsesiva con tendencias criminales. El tsundere que tomó el camino oscuro.
- Eris Boreas Greyrat (Mushoku Tensei) - Bakadere con esteroides: Actúa hostil pero en realidad solo es increíblemente directa y franca. No hay dualidad emocional, solo falta de filtro social.
- Raphtalia (The Rising of the Shield Hero) - Loyal dere: Su "frialdad" inicial es trauma infantil, no tsunderismo. Una vez que supera sus problemas se convierte en pura devoción canina.
- Power (Chainsaw Man) - Chaos dere: Su comportamiento errático no se debe a sentimientos románticos confusos sino a que literalmente es un demonio con la mentalidad de un gremlin malcriado.
- Marin Kitagawa (My Dress-Up Darling) - Gyaru honesta: Parece que va a ser tsundere por su apariencia de gyaru pero resulta ser completamente directa y sin filtros sobre sus sentimientos.
- Tohru Kobayashi (Miss Kobayashi's Dragon Maid) - Dragón confundido: Su comportamiento aparentemente tsundere es en realidad el resultado de ser una criatura ancestral tratando de entender conceptos humanos básicos como "el espacio personal".
- Shouko Nishimiya (A Silent Voice) - Trauma response: Su aparente frialdad inicial no es tsunderismo sino la reacción natural de alguien que ha sido víctima de bullying severo.