Género
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De esos donde los adolecentes triunfan y los adultos mueren.
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Creado por
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Personas que temían por demandas de discriminación racial.
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Reparto
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Un montón de obreros que fabrican trapos sin ser chinos.
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Productora
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Emitido en
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Duración
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7 largos minutos de comerciales y solo 23 de historia
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Estreno Finalización
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Antes de que te entusiasmes con esto te aviso que estamos en presencia de una de los intentos mas retorcidos por parte de Nickelodeon de entretener a las masas y eliminar una a una los nodos electromagnéticos cerebrales de la juventud. True Jackson careció de un público fiel del cual engancharse y a duras penas logró sacar dos temporadas, principalmente debido al alto nivel de explotación infantil de ésta. El problema no eran los televidentes infantiles, al contrario, fueron sus madres que no aprobaban que sus hijos crean que pueden alcanzar el éxito a base de discerción escolar y explotación.
Lo que hay que saber
Argumento
Para empezar, para entender esta serie es obligatorio que veas el primer episodio, donde se explica toda esta madre. En general la serie trata de las aventuras de un puñado de peones de una prestigiosisísima compañía de modas llamada "Mad Styles" (osea, tienes que estar loco como para ponerte esas fachas). La prota es una chica negra que se ganó el puesto de vicepresidenta de la compañía por la genial idea de cambiarle los botones a una prenda de la compañía. El Jefazo de todo, un tipo que lleva ya muchos años evadiendo la jubilación involuntaria y uso de pañales, en vez de demandarla por violación de derechos de autor o simplemente por hablar sin permiso, decide convertirla de vicepresi. Esta idea no le gustó nada a Amanda, una solterona, y se encargará de que despidan a la negra o que se muera.
Personajes
Los empleados de la compañía originalmente carecían de nombre y se les llamaba por el número que tenían pegado en la espalda, pero los productores pensaron que ponerles un nombre podría reducir en un 15% las demandas a fin de mes.
- True Jackson, la
sumamente atractiva afroamericana con suerte: Pese a no estar en la década de los 90, la protagonista es alguien de color. Se trata de una adolescente muy fashion que, como se dijo antes, es negra y escaló a la cima de una compañía gracias a la alteración de propiedad intelectual ajena en tan sólo 13 segundos después que su padre la negara. También se toma muchas atribuciones como invitar a quien se le plazca al edificio para perder el tiempo. Es el objetivo del odio de la celosa Amanda, que cada capítulo maquina planes para que Max despida a True y la mande de vuelta a su país en el próximo barco. En todo el programa se ve cómo la joven se gana el cariño de la gente y el aprecio de su jefe como crear innovaciones en la moda como gabardinas con sandalias o sostenes sobre un abrigo de piel de mofeta semi-viva (no las matan porque cuando se muere se relajan los enfínteres y casi nadie quiere usar un abrigo que se caga).
- Lulú, la india que se olvida de tomarse su Ritalín: En cuanto True llega al mando su primera acción fue despedir a la antigua asistente de la compañía. La pobre mujer llevaba trabajando más años que la edad de todos los empleados juntos y que necesitaba el trabajo para poder costear una complicada operación para las hemorroides. A la adolescente le importó un cuesco y la echó a patadas y en cambio contrató a su atolondrada amiga hindú. La chica es extremadamente despistada y siempre grita, como cuando una vez mientras instalaba su estatua de Sheeva en la oficina y encendía inciensos para purificar el aire quemó un traje de oro hecho por antiguas monjas ermitañas del Himalaya que murieron todas de diarrea por comer carne de Yak descompuesta. La chica carece de apellido, por lo que se sospecha que puede ser huérfana y ha vivido toda su vida alimentándose de heces de perro en la calle y que ahora que la contrataron logró finalmente conseguir un hogar, por eso es que True tiene unos periódicos en una esquina de su oficina para su mejor amiga.
- Ryan Rayoláser, el hijo de padres hermanos: Como en toda serie, hace falta un personaje que sirva para que los demás parezcan genios. Ryan es el tercer amigo de True y se cuela a escondidas en la empresa para holgazanear con sus amigas gracias al pésimo servicio de recepción de la empresa que deja entrar a vendedores, alcohólicos y pacientes con esquizofrenia sin problemas. Ryan es el único del grupo que no es inmigrante ilegal, pero de todas formas no se le tiene permitido votar ni acercarse a vehículos motorizados. Tiene un CI muy variable que fluctúa en un intervalo de 4 y el menos infinito, dependiendo de las fases de la Luna. Cada vez que en el edificio se escucha algo romperse o algun temblor leve, es causa de él, de hecho, una vez rompió una estatua de Max tan cara que estaba hecha de la sangre coagulada del mismo Jesús en la cruz, afortunadamente lograron reemplazarla con una réplica de papel maché y Max jamás notó la diferencia.
- Amanda Cantwell, la bruja estreñida: Treintentona (quizás cuarentona), aún virgen y que se jura de 16. Toda su vida luchó por ganarse el puesto de vicepresi de la empresa, tuvo que limpiar baños, traer café, sacudir la alfombra, limpiar vómito con aserrín y hasta tuvo que hacerle masajes prostáticos a Max para lograr escalar lenta y dolorosamente hasta el puesto de vice, hasta que llega una niña demográficamente inferior que le empata el puesto en tan sólo un santiamén. Desde ese día Amanda jura ante la tumba de sus ancestros que no descansará hasta ver a True en una jaula camino a Ghana. La tóxica mujer suele ser también victima del karma y es como la Yuyín de la serie, solo que el daño suele ser más psicológico que físico.
Oscar:¿Este fondo naranja no me hace ver
gord@?
- Max Madigan, el gerente senil: Es el omnipotente dios de la compañía, lo que él dice, se hace, aunque sea físicamente o éticamente imposible, como convertir el edificio entero en una selva amazónica para cazar animales salvajes (creados por panspermia) y así tener más stock de pieles. Quizás a causa de su miserable estado mental, usa el edificio como bodega de helados para 60 años luego de que el vendedor de su sabor favorito jubilara. True se la pasa toda la serie lamiéndole las botas y quiere complacerlo en todo, inclusive profanar tumbas y violar muertos para su deleite. Del mismo modo, Max siempre termina perdonando a Tru sin importar las pendejadas que haga ella (o sus descromosómicos amigos); ¿acaso Tru hizo explotar el edificio o mandó a Mad Styles a la quiebra por vender las acciones de la compañía para comprar joyería dental? No hay problema, no hay nada que un abrazo o una moraleja no puedan solucionar.
- Oscar, el/la recepcionista que se come las uñas al revés: Sólo hace falta un@ para que una compañía de modas sea una compañía de modas. Supuestamente tiene que regular las visitas al la empresa y atender llamadas, pero se pasa toda su jornada laboral limándose las uñas y viendo la teleserie mientras todos el mundo entra y sale como Pedro por su casa. Tiene un oído increíblemente agudo capaz de oir a Lulú rezándole a sus dioses, los planes de Amanda, las conversaciones de Tru o a Ryan jugando al 5 contra 1 en todo el edificio, no por nada es conocid@ como el/la rey/reina del chisme.
- Kopelman, el empleado del mes: Si algo le falta a la empresa, aparte de sentido común y profesional capacitado, es un buen sindicato de trabajadores. Kopelman es la viva imagen de ello. Todos los días pasa 45 minutos esperando el autobús mientras un taxi lo moja al pasar por una charca. Llega 20 minutos tarde, todo mojado y mordido por perros que se robaron su almuerzo y un chichón en la cabeza causado por un piedrazo que le lanzó una monja en la calle. Pero afortunadamente Max está ahí para hacerlo sentir bien, lo trata como un rey y le paga el sueldo mas alto de todos (más alto que el de él mismo) Si pasaron el mouse por el enlace azul sabrán que estoy hablando de otro Max en un universo paralelo donde la empresa no es gobernada por niños y MTV aún pone videos musicales.
Lo que NO hay que saber
¿Lo recuerdas? Apareció en el episodio 12 como un par de guantes.
La serie ha recibido muchas demandas porque fomenta la deserción escolar, en toda la serie hemos visto a los personajes menores de edad (que son la mayoría) pasar el día entero en la empresa, dejando absolutamente de lado el ámbito escolar, de hecho, se duda enormemente que Ryan sepa leer siquiera. Más aún cuando la serie solían sintonizarla en horario de la tarde y los niños faltaban a clases por verla. Esto alertó a los apoderados en distintas partes del mundo a excepción de los huérfanos, porque como sabrán, ellos no tienen padres y por ende nadie les puede decir nada... y demandaron a la serie y ésta marcó el primer strike.
Otro motivo por el fin de la serie fue que en el edificio, la puerta roja al lado del baño de mujeres, hay un matadero donde le extraen la piel a las especies y así hacer los glamoroso atuendos que vende la empresa, como piel de panda, tigres, ornitorrincos y cóndores, que aunque no tienen uso estético lo hacen por pura diversión. Esto salió a la luz durante el final del episodio 23 llamado "Amanda y la Menopausia" que durante los créditos en vez de mostrar esas imágenes estáticas con esas letras que nadie lee, mostraron escenas donde Ryan y Amanda sujetan a un cachorro de oso mientras Tru le arranca la piel con un serrucho, mientras Lulú se revuelva con el cadáver de la mamá Oso y grita oraciones en indio. Los productores dijeron que ellos no tenían nada que ver con eso y le echaron la culpa a Kopelman, el cual por jamás tener diálogos, no pudo negarlo. A los 2 días Kopelman fue castrado como castigo y la serie anotó el strike 2.
Aunque la serie jamás llegó al strike 3, los productores decidieron despedir a todos ya que ninguno de ellos era lo suficientemente competente como para guardar secretos, además era sólo cosa de tiempo para que se revelara el secreto de las actrices embarazadas del elenco, las cuales estaban en el 7mo mes de gestación al momento de la cancelación, extrañamente nadie jamás se había dado cuenta.
Véase Tambien