Medusozoa

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Extraterrestre infiltrado Medusa común y corriente.

Las medusas son el resultado de que la naturaleza se pusiera a programar con los pies. Parece que alguien se olvidó de terminar el código de estos bichos y la naturaleza los lanzó al mar sin pasar ningún control de calidad. Son los bugs vivientes del océano: a veces se dedican a dar vueltas sin sentido, otras veces se dedican a electrocutar a todo lo que pasa por su lado y otras veces simplemente nos dejan boquiabiertos con sus caras sin ojos (y sin caras, en realidad), con sus cerebros sin… cerebro y sus formas tan apetitosas para las tortugas.

Evolución

Nave nodriza espacial Partes de una medusa convencional.

Las medusas han recorrido un largo camino en su evolución, desde ser seres unicelulares que flotaban en el océano hasta desarrollar habilidades sorprendentes como la capacidad de moverse y cazar presas con sus tentáculos o de vivir sin cerebro. Pero, ¿qué les depara el futuro? ¿Serán las medusas los próximos amos del universo, o simplemente seguirán siendo criaturas marinas que brillan en la oscuridad y asustan a los bañistas?

Aunque no se espera que se unan a los alienígenas para formar una alianza invencible, se espera que continúen evolucionando para adaptarse a los cambios en su entorno, como la contaminación y el cambio climático. Quizás algún día veamos medusas gigantes emergiendo del agua y caminando por la tierra, o incluso medusas que decidan hablar en lugar de envenenar, aunque sea menos divertido para ellas.

Morfología

Su forma de campana o sombrilla nos hace pensar en protección contra la lluvia o el sol, pero por otro lado, su zona aboral convexa, la exumbrela, parece más bien un agujero en el espacio-tiempo. Y si eso no fuera suficiente, su tejido corporal, la mesoglea, resulta ser tan grueso que parece que les costaría moverse con agilidad, pero curiosamente puede llegar a ser tan blando y gelatinoso que a uno le dan ganas de acurrucarse dentro de ella en una tarde de frío invierno. Pero quizás lo más sorprendente de todo es que a pesar de ser seres acuáticos, su organismo está formado por un 995% de agua, lo que nos lleva a preguntarnos si no serán una especie de vida líquida con tentáculos. En cualquier caso, si te encuentras con una de estas criaturas en tu próximo paseo por la playa, recuerda mantener la distancia y no intentes abrazarla, a no ser que quieras convertirte en un bello recuerdo.

Reproducción y desarrollo

Medusa de 500 millones de años que se vuelve bebé cada que se acerca su muerte.

Empecemos por el hecho de que las escifomedusas se reproducen a partir de un pólipo asexual. Sí, has leído bien, ¡a-sexual! ¿Acaso estos animales son tan modernos que han abrazado el celibato? Pues no, porque resulta que los pólipos producen medusas sexuadas que cierran el ciclo. Así que, al final, todo acaba siendo como en la vida real, ¡con su dosis de amor y pasión! Resulta que la reproducción y el desarrollo de las medusas son en realidad un error de programación en la naturaleza. Alguien en la programación de la vida olvidó agregar los comandos necesarios para que estas criaturas se reproduzcan de manera convencional.

n su desarrollo larvario, los programadores de la medusa se quedaron dormidos en el teclado y les metieron un error de bucle infinito, porque las medusas quedaron atrapadas en un ciclo interminable de transformación. Se le conoce como bug y es muy propio de los vagos que nos programaron. Y por si fuera poco, las equiparon con una función de reinicio automático, para intentar arreglar el bug. Si se encuentran en un ambiente estresante, simplemente vuelven a su forma larvaria y comienzan de nuevo. ¿No sería genial si pudiéramos hacer eso? “Lo siento jefe, no puedo hacer la presentación hoy, tuve que volver a mi forma larvaria por un rato”. O mejor aún: “Lo siento pareja, no puedo seguir contigo, me voy a convertir en una medusa y buscar otro amor”. O lo mejor de lo mejor: “Lo siento yo mismo, no puedo seguir viviendo así, me voy a convertir en una medusa inmortal y empezar de cero”.

Toxicidad

Las medusas son como un virus informático en la naturaleza. Su código está diseñado para ser lo más tóxico posible. Sus tentáculos, a diferencia de los cables USB que se conectan a una computadora, se conectan a todo lo que encuentran. Si un pez o una persona se acerca demasiado, sus tentáculos se aferrarán a ellos como un virus de malware pegajoso y duele considerablemente más.

Pero lo que hace que los tentáculos de las medusas sean aún más peligrosos es su capacidad para disparar un ransomware, la única forma lógica y médicamente aceptada para solucionarlo es orinando la parte afectada (no lo digo yo, lo dice el doctor Google). O mejor aún, pagando un rescate en bitcoins a las medusas para que te suelten. O lo mejor de lo mejor, evitando nadar en el mar y quedándote en casa viendo Netflix.

Depredadores

Una tortuga comiéndose una deliciosa med... ay, no.

¿Alguna vez te has preguntado por qué la naturaleza creó a las tortugas? Muchos científicos creen que fue como un antivirus natural del océano. Las tortugas tienen una habilidad impresionante para detectar y eliminar a las medusas, protegiendo el mar y sus deliciosas criaturas. La naturaleza dijo: "oye, ya que no puedo hacer que estas tortugas corran más rápido, voy a darles un súper poder para luchar contra las medusas". Y de alguna manera, las tortugas aceptaron el trato y se convirtieron en los héroes del océano.

Importancias para los humanos

Aunque algunas personas podrían decir que su sabor es similar al de una bolsa de plástico, otras afirman que tienen un sabor a maravilla y se les puede dar cualquier uso culinario. Quizás podríamos utilizar sus proteínas para programar una nueva versión de Windows. Además, también son importantes en la biotecnología, donde podrían ayudarnos a crear un antivirus para nuestra programación biológica. Y aunque en el pasado las medusas eran temidas por su capacidad de causar molestias a los bañistas, hoy en día la ciencia está trabajando para convertirlas en una fuente de inspiración para la moda. ¡Quién sabe, quizás en el futuro todos estaremos programados como medusas!

Véase también

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